Together [ Eaktrap ]

#6

—¡Eak, levantate o vas a llegar tarde!
—Yo voy a llegar cuando se me dé la gana.
—Y luego me vas a pedir dinero para tomar un taxi.

Eak decidió callar porque había repetido esa técnica por mucho tiempo y al parecer hasta apenas él se había percatado. O tal vez no.
Por fin, después de varios días seguidos de ensaladas y tristes atunes enlatados, había de desayunar algo decente.

—Wey, ¿sabes que sería mejor que esto?—preguntó con la boca casi llena —¿no? Yo si. Unos buenos tacos de hígado encebollado con una salsa que cause gastritis y...
—Si, si, como digas.

Levantó la mirada sorprendido ante la frialdad de su amigo. Normalmente no era así. Se comenzó a comportar extraño unos días atrás, pero no había sucedido nada importante.
Ambos llevaban ya casi tres semanas viviendo juntos. Se habían acostumbrado ya a su alrededor.

—Bueno, ¿nos vamos?-dijo Towntrap mientras mientras Eak tomaba las llaves del departamento.
El trayecto estaba más silencioso de lo normal. Eak esperaba los ocasionales comentarios sin sentido de su amigo, aquellos que le alegraban los días y ahora, las mañanas. Pero se quedó esperando por los diez minutos de trayecto al colegio. No abrió la boca en ningún momento.
Cuando llegó el instante en el que se iban a separar en la entrada del colegio, Eak decidió romper el silencio.

—Entonces...¿te espero a la salida o qué pedo?
—Si no vas a salir con nadie, has lo que quieras. Sabes que me quedo un rato más por las tardes.

Y entonces se dio la vuelta y se fue.
Sin aclararle nada. Simplemente se largó.
El tono de su voz, su expresión tan seria...¿eso significaba que estaba molesto? Pero, ¿porqué?
"¿Qué hice mal esta vez?"
E Eak pensó, y pensó, durante todas las clases. No prestó atención a ninguna -tampoco es que lo hiciera muy seguido- por seguir divagando sobre su situación actual.
En las clases que compartían él no le dirigía la palabra. Lo ignoraba, como si fuese transparente. Y cuando Eak quería entablar al menos una pequeña conversación, era como hablarle a la pared.

Comenzó por descartar posibilidades. No había llegado tan tarde a casa, había echo sus deberes adecuadamente, ¡incluso lavó platos! Así que, ¿cual era el problema? No le gustaba que su amigo no sonriera como estaba acostumbrado a ver.
Towntrap había hablado de salir con alguien. Pero nada le llegaba a la mente. Pensó todavía más mientras esperaba sentado en el borde de la pared a que su amigo saliera.
Entonces, sintió que una pequeña mano tocaba su hombro. Volteó.

—Hola, Eak— un chico de baja estatura y de rostro muy peculiar le dirijió aquella frase.

Y entonces, como si se tratara de una revelación nostradamus en la mente de una señora anciana, le llegaron los recuerdos.

—Ah...hola, Bonnie—dijo, nervioso, justo después de ver la figura de Towntrap salir por la puerta de entrada.—este día no podrá ser, tengo que irme.
—Pero tu dijiste que...
—Olvida eso, ¿si? Tengo otros asuntos que...—entonces se detuvo en seco.

¿Towntrap estaba molesto porque aceptó ir a escuchar a Bonnie tocar?
Pero, ¿porqué habría de estarlo?
Esos eran ¿celos?
Los amigos no sienten celos por ver a sus amigos salir con otros amigos -si a Bonnie podía considerarlo su amigo-
Había dicho muchas veces amigo, pero no podía parar de repetirlo porque eso son ¿no es así?
Eran amigos y los amigos se llaman amigos cuando su amistad es tan grande que supera al resto de personas que no son amigos.

—Eak, ¿estás bien?—la calmada voz de Bonnie lo sacó del trance en el que estaba. Mas bien, ver lo cerca que estaba.
—¿No antes iba el otro, el bajito de cabello azul, a practicar contigo?
—Pues, no creo ser lo suficientemente bueno para tocar con él...

Eak se quemó la cabeza de tanto pensar.
El, de vez en cuando, se había molestado al ver a Towntrap con alguien más. Había sentido ganas de ir y llevárselo de la muñeca a la fuerza y de paso golpear a los que estaban con él.
Pero no lo había echo porque sentir celos de tu amigo no estaba bien. Entonces ¿porqué iría a obedecer los caprichos del otro?
No lo iba a hacer.

—Bonnie, vámonos.—dijo mientras salia a paso lento del lugar.
—Yay!

•

Ya eran las diez de la noche.
Y él aún no llegaba.
"Seguro ya se hartó de mí"
Aquella sensación en el pecho le molestaba. No le gustaba que él no fuera el único al que Eak le sonriera de esa manera. No le gustaba pensar que no era el único para él.
Pero ¿de que le iba a reprochar?
"Los amigos no sienten celos por ver a sus amigos salir con otros amigos"
Había dicho muchas veces amigos.  pero es porque eso eran, ¿cierto?

•••
*le tiran piedras*