Mia [Jaidefinichon GOTH]

19.- No miento con cosas así.

Le presté un bikini a la Mica, ella tenía más tetas que yo, pero le quedaba bien. Se veía maraca, pero bien y me encantaba.

Ya estaba vestida con mi bikini para el mini carretito que improvisamos con la Micaela. Sentí que tocaron la puerta, me puse un vestido rápido y bajé corriendo la escalera. Abro la puerta y me encuentro a la parejita del año tomada de la mano en la entrada.

Era el Nico con la Margarita.

-Hola- saludo y ambos pasan.

-Hola, Mía- me saluda ella simpática y el Nico me mira con culpa.

-Tengo que hablar contigo- me dice él susurrando para que la Margarita no escuchara.

-No tenemos nada que hablar, ya arreglé la caga que tenías, ahora déjate de molestar- dije y subí la escalera.

Entré a mi pieza con una cara de 5 metros, la Mica se dio cuenta y me miró, sólo eso.

-¿Debería preguntar qué wea te pasó?

-Volvieron- dije botando aire.

-Es lo que querías, sabiai que era lo que iba a pasar.

-No pensé que me iba a afectar tanto- reconocí sacándome el vestido y arreglando mi bikini.

Ella me miró y sonrió.

-Nunca había visto a alguien estar tan estupenda después de parir.

-Ponle color- dije riendo.

Cuando ya tenía puesto el bikini me volví a poner el vestido y bajé para ordenar todo.

-¿Vas a hacer un carrete?- me preguntó el Naiko.

-No- respondí tranquila.

Tocaron la puerta y volví al living para abrir. Era el repartidor de copete, el maravilloso repartidor.

-Micaela, baja mi billetera- grité y le sonreí al repartidor.

La Mica bajó la escalera corriendo en bikini y me la pasó.

-Entra la caja- le dije la Mica y así lo hizo. Saqué la plata y mi carnet, él lo revisó y recibió la plata al ver todo en orden.

-¿Está todo bien?- preguntó el tipo y la Mica asintió.

-Gracias- me despedí de él y se fue- ¿vienen las niñas?

-Sí, vienen en camino- respondió la Mica.

-¿Qué vas a hacer?- me preguntó el Naiko enojado.

-Nada, ¿quieres ron blanco?- le pregunté mostrándole la botella.

-¿Eso es copete?- preguntó el Edgar.

-Sí- respondí con una sonrisa.

Teníamos todo listo con la Mica, música, vasos, copete y todo. Los chiquillos se quedaron adentro tomando cerveza mientras nosotras con la Mica nos preparábamos mojitos en la cocina.

La primera en llegar fue la Rou con su prima Katherine, pero le comenzamos a decir Kathy por obvias razones. Después llegaron las otras weonas, ningún mino, solo nosotras una noche de Diciembre.

-Por las penas de amor- alzó su vaso la Mayra.

Alcé el vaso después de ella y di un sorbo largo. Le subimos el volumen a la música y nos pusimos a cantar mientras mojábamos nuestros pies. Siento el agua chocar, miro la piscina y veo a la Panchu nadar en ella, ya estaba bastante oscuro.