22.- Volados.

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-Ni siquiera alcancé a conocerla- se quejó la Panchu.

-¿Puedes contar de nuevo la parte en por qué terminaron?- pidió la Mayra sentada con cara de cansada.

-Las cosas no se dieron- dije restándole importancia.

-¿Quién terminó?- preguntó la Mica.

-Yo, no me sentía bien, la verdad es que no sirvo para comer mariscos, soy buena para la longaniza- puse cara pervertida y la Mica me empujó juguetona.

-Vo teni guata de perro, déjate de webiar- se burló la Rou.

-Cambiando de tema- dijo la Mayra poniéndose de pie y cruzando sus brazos- ¿Dónde vamos a ir de vacaciones?

-Primero, ¿Cuánto tenemos de plata?

-Tenemos 500 lucas para arriendo, entre todas- dijo la Panchu con una alcancía de metal en las manos.

-Tenemos pa regodearnos de lugares po- dijo la Mica contenta.

-No, porque una cosa es tener plata para el arriendo y otra es para comprar comida, locomoción y weas- comentó la Rou.

-Eres tan inteligente- le tiré un beso y me puse de pie.

-Tenemos plata, es lo importante.

-Sí- asintió la Panchu y suspiró- espero que sean unas vacaciones la raja.

Y sí que lo fueron, pero no como nosotras esperábamos. Me gustaría decir que estas vacaciones fueron el detonante de que nos volviéramos todos amigos, pero no sé bien cuando pasó eso.

Con el Naiko creímos que sería buena idea arrendar dos cabañas entre todos, era un terreno que tenía dos cabañas medianamente grandes y que las arrendaban a un buen precio, estaba a unas 3 cuadras de la playa y eran decentes. Aunque fue una buena idea, no todo fue lindo y honestamente no volvería a salir con ellos.

Veamos un poco en qué consistieron las vacaciones.

En el viaje cada uno se fue por su parte, con las chiquillas nos fuimos en el auto de la Kathy, la prima de la Rocío que se transformó en nuestra amiga y mi próxima compañera de carrera, era muy niña y muy tierna.

-Tengo que ir a mear- se quejó la Rou.

-Rocío, paramos en una copec hace menos de 10 minutos- dijo la Panchu.

-No tenía ganas en ese entonces.

-Te aguantas- dije enojada.

-No puedo- hizo puchero y yo pose los ojos en blanco.

Al final paramos de nuevo para que la Rou meara. Llegamos a destino primero que los chiquillos, tomamos las llaves y pagamos la mitad del arriendo. La Fran guardó las llaves de ellos y comenzamos a bajar nuestras cosas para acomodarnos. Por razones obvias nos tocó compartir habitaciones. La Fran y la Mica no tenían problema en compartir cama matrimonial, por lo que ellas durmieron juntas, la Rou con la Kathy por ser primas y al final me quedé yo con la Mayra.

-Si sales con tus arranques de diva te saco la chucha- me advirtió subiendo las escaleras.

-No pidas algo imposible- reí y ella me miró mal- no estoy webiando, son cosas que vienen en el pack al hacerte amiga de Mía Undurraga.

-Pero si con escuchar tu apellido me dan ganas de sacarte la chucha- ella soltó una risa y dejó su bolso sobre la cama.

Arrinconé mi maleta y bajé a buscar los otros dos bolsos que faltaban. Ordené la ropa en mi lado junto con los zapatos, quedamos con que el baño no tendría nada además de la pasta y cepillos de dientes.

Mia [Jaidefinichon GOTH]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora