Fue en vano buscar en las habitaciones era obvio que Sebastian no estaba en la casa, tampoco estaba afuera. El chico salió al jardín donde la luz del amanecer ya bañaba las rosas como todos los días "dulces sueños" la única frase que seguía taladrando su cabeza desde que se despertó, en serio el demonio se dio cuenta? Que era un martirio y castigo permanecer a su lado, no creía que Sebastian dejara de lado su estética como él siempre le llamó.
Ciel bajo corriendo aún con el camisón y se tumbó en el pasto sin ganas, sin saber que pensar tenía demasiadas ideas en la cabeza y sólo se dedicó a mirar las nubes pasar.
Llegó el medio día al parecer Ciel se quedó dormido sobre el pasto y algunos mechones de cabello se dejaron caer en su cara, sintió un regazo suave y se incorporó de sorpresa "Sebastian !!!??" Miro a un lado y guardo silencio por un segundo, no era el, se encontró con unos ojos color rosado y una sonrisa teñida de un labial rojo.
- Te asuste? Disculpa te vi tan dormido que pensé que necesitabas una almohada donde colocar tu cabeza -
- Que haces aquí? Sebastian no está en este lugar, no veo el porqué de tu visita-
- Hoo ya veo entonces el fiel perro decidió buscar su libertad, aunque eso va contra las reglas de su contrato - sonreía con burla.
La chica se acercó un poco inhalando el aroma que despedía el chico y lo hacía como si fuera un aroma embriagador, cerro los ojos dejando ver un ligero sonrojo en sus mejillas
- Es una lástima pequeño, eres un ser exquisito que cualquier demonio desearía proteger y servir, me da pena que Sebastian fuera tan tonto como para dejarte, me permites hacerte compañía el día de hoy? Puedo prepararte algo de comer -
Algo pensativo, Ciel no sabía que responder a decir verdad siempre fue muy tonto como para valerse por sí mismo ya que Sebastian hacia todo por el desde vestirlo, bañarlo e incluso cocinar pues, aunque era un demonio sus hábitos alimenticios nunca los dejo pues los postres y comidas que el demonio le preparaba era de lo mejor y tenía hambre en estos momentos no había desayunado y haría lo que fuera por comer algo.
- puedes hacer lo que quieras no importa-
- Awww ya verás que yo se cocinar mejor que el tonto de Sebastian!! -
Los dos entraron a la casa rumbo a la cocina, el sol se ocultaba al horizonte y no muy lejos de la ciudad un charco de sangre en un pequeño cuarto estaba recién fresco, una mujer de complexión no muy delgada yacía con el pecho abierto de forma delicada.
El demonio estaba aún lado saboreando los labios pues algunas gotas de sangre se dejaban ver, ahora se disponía a salir de la casa cuando unos pasos lo hicieron voltear.
- Rayos pero que porquería!!! ¡¡¡¡¡Con esto que explicación voy a darle a Will, pero por un lado estoy tan contento Sebas - Chan!!!! - la voz molesta y melodiosa de un shinigami se hacía escuchar.
El pelirrojo se lanzó con los brazos abiertos sobre el demonio no sin ser golpeado en la cara por esté, salió sin decir nada y el shinigami corrió dando brincos detrás de él.
- Bueno y que se supone que haces en la ciudad sebas-chan? Tenía entendido que dejaste todo por ir con tu pequeño mocoso y vengo a encontrarte devorando almas, por cierto, de gente vulgar que asco¡¡¡ - mostrando un rostro lleno de náuseas.
- Bien es posible que no tengo un amo a quien seguir en este momento, te importa si me invitas un trago? -
- Hooooo sebas-chan es una cita??? de saberlo podía usar mis mejores ropas!!! - El shinigami jalo del brazo al demonio muy emocionado y se encaminaron por un callejón rumbo a la plaza más cercana.
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Hasta La Eternidad
RomanceEstá historia inicia desde la nueva vida de Ciel phantomhive como demonio, ligado a servir como perro fiel y mayordomo, Sebastian se siente asfixiado por el tiempo compartido con tan caprichoso amo. Sin embargo las cosas cambiarán por la llegada de...