Valeria.
- ¿Te pongo nerviosa? - dice cada vez más cerca de mí.
La verdad es que bastante.
Niego con la cabeza sin soltar una palabra.
Poco a poco nuestros alientos se van juntando.
Se va hacercado a medida que sus labios rozan suavemente los míos.
¿Otro beso Dani?
- ¿Que haces? - me quito de repente.
Literalmente, le has hecho la cobra, Val.
- La última vez no te quitaste - tontea.
Tarado.
- Porque fue inesperado, además no me gustas, no te tengo por qué dar besos - digo obvia como siempre.
- A mi tampoco me gustas -
- ¿Y esas ganas de besarme? - digo acercándome.
Nuestros alientos se vuelven a juntar.
- Un beso no tiene por qué significar nada - susurra.
Me agarra por la cintura, a lo que yo le pongo mi mano en su nuca.
Hazlo. Hazlo ya.
Me adelanto y le rozo muy lentamente sus labios, sus ganas de besarme aumentan.
Está a punto de hacerlo pero me separo dejándole con las ganas y me levanto del escalón.
Se queda mirándome con una cara de empanado.
- No soy tan fácil Daniel - digo largandome de allí.
Eres mala, que chasco.
Se lo merecía.
Tendrá que conseguirme y no se lo pondré nada fácil.
(...)
Jesús me despierta cariñosamente. Que amor de niño, dios mío.
- Buenos días princesa - dice con su voz ronca.
- Mmm....buenos días - bostezo - que sueño - exagero.
- Será por que te la montastes anoche con Dani - dice en voz baja mientras que se aleja.
¿Que?
¿Co..como lo sabe?
- No te entiendo Jesús - aclaro.
- Nada nada, no e dicho nada - dice nervioso.
Venga ya Jesús, no me digas que nos espiaste anoche.
- ¿Me espiaste? - digo levantándome
Él se gira y me mira fijamente.
- Escúchame Val, ¿que tiene él que no tenga yo? - vuelve a decir igual que la otra vez en el ascensor.
- Te repites - le contestó mientras te ojo algunas cosas de encima de la cama.
- La última vez no me contestaste - dice triste.
Me da un poco de pena, él se merece más, ninguna vez me a tratado mal desde que nos conocimos.
- Jesús es que...no sé - digo con la voz entrecortada - es difícil -.
¿Que le digo?
Dile la verdad.
Pero, si no la se ni yo.
- ¿Lo qué es difícil? - me mira comprensivo.
Sus ojos lo dicen todo.
- Tu eres mi amigo...y....- me mira triste - y...Dani...n...no...lo es - suelto.
Sus ojos se decaen.
¿Pero que he dicho? La he cagado.
- Él me cae mal - aclaro.
Me mira de repente y se extraña.
- ¿Y por eso te lías con él? - dice.
¿Como?
Éste está más pa' ya que pa' ca.
- Ni de broma me lío con ese - suelto una carcajada sarcástica.
- Venga ya, os vi ayer - replica.
- Le hice la cobra - realdigo.
Él me mira sorprendido pero suelta una carcajada a continuación.
De repente llaman a la puerta. Es Dani.
- ¿Todavía no estas lista? - dice borde
Que gilipollas es. Es que le corto la lengua, puff que ganas le tengo.
- ¿Por qué eres tan imbécil? - digo de rebote.
Suelta una carcajada y me mira mal.
Esto te lo hace porque le dejaste con las ganas.
- Estoy harto de vuestras peleas - dice Jesús furioso.
Normal que se enfade el chaval.
- Se lo dices a tu querida mejor amiga - volviendo a salir por la puerta.
Suspiro enfadada y me adelanto a salir con la mochila colgada en mis hombros.
- Eh! Val! Espera! - dice Jesús corriendo detrás de mi.
Me paro y le miro.
- Tengo que irme Jesús, pierdo el tren a Barcelona - digo con tristeza, pero sin que se me note.
- Lo siento por lo de Dani, no le hagas caso - dice acariciandome la mano - déjame acompañarte a la estación - dice apenado.
- Vale - sonrío.
Nos dirigimos al ascensor encontrándonos a Dani, que casualidad por dios.
- ¿Donde vais? - pregunta serio.
- Ni te va ni te viene - vacilo.
Una de las cosas que más me gusta es vacilar a gilipollas, me siento la ama.
- La acompaño a la estación, se va - dice Jesús inocente.
Dani sonríe maligno mientras que las puertas del ascensor se abren.
- Tranquilo, que no me veras más en toda tu vida - digo a punto de explotar, y a continuación salgo corriendo de allí.
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La parte más esperada JAJAJJAJA.
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Gracias a todos 💖🔜🙈
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Déjame Quererte → Gemeliers
Genç KurguQue raro es ese momento en el que dos personas se cruzan sin saber que van a terminar queriéndose.