I Want You

07.-

POV Omnisciente

Y así ha pasado toda la semana, Jaime ignorando a Nicolás y este último siempre tratando de hablarle a su estudiante pero era más difícil ahora que no lo veía todo el día ya que les dieron su horario, al menos en realidad le tocaba todos los días con él. Un día se volvió a sentar al lado de él y con todo el grupo de amigos de Jaime.

-No quiere venir hoy a un carrete profe?.-Preguntó Alexander con una leve sonrisa pero notando como Jaime seguía sin hablarle a Nicolás.

-Donde sería?.-Preguntó Nicolás, mirando a todos sus estudiantes ahí.

-En la casa del Edgar, hasta se puede quedar.-Dijo Manuel entusiasmado mientras sentía como el recién nombrado lo tomaba de la mano haciendo que se colocara rojo.

-No creo que sea buena idea.-Dijo el moreno mirando unos segundos a Jaime y luego a Edgar.

-Pero profe es viernes y le prometo que nadie se va a enterar.-Dijo Edgar intentando convencerlo con una leve pausa para luego seguir hablando.-Oscar va a ir.

-En serio?.-Preguntó el profesor Gaulle considerándolo.-Bueno él me podría llevar supongo.

-Entonces eso es un si?.-Preguntó Manu algo feliz viendo como Nicolás asentía.

Y otra vez volvieron a interrumpir la conversación.

-Jaime, la Evelyn te vino a buscar otra vez.-Dijo una alumna que Nicolás estaba casi seguro que se llamaba Claudia.

El enojón de inmediato se levantó y salió de la sala sin pedirle permiso o algo a Nicolás haciendo que este frunciera el ceño.

-Lamento que el Jaime este así con usted, no sé que le pasa.-Se disculpó Yelo siendo bastante sincero.

-No importa.-Dijo el profesor moreno con una leve sonrisa falsa. Por qué Evelyn lo llamaba siempre?

-Weón ya no soporto a la Evelyn, ahora el Jaime siempre esta con ella.-Dijo Naiko con un tono evidente de molestia, mirando de reojo a la puerta por si entraba su amigo.

-Están juntos o algo así?.-Preguntó Nicolás queriendo saber eso mientras apretaba sus puños.

-No lo sabemos, no nos cuenta nada de eso pero se junta con ella siempre después del liceo.-Respondió el ruloso mirando a Nicolás con detalle. Este se notaba molesto y tal vez algo celoso? Edgar de inmediato sacó eso de su mente, no podía ser eso.

-Y tú crees que ella vaya a ir a tu carrete, Edgar?.-Preguntó el moreno, no sabiendo porqué preguntaba si sabía que la respuesta no les gustaría.

-No lo sé, tal vez Jaime la invite si es que va él.-Respondió el recién nombrado con sospecha en sus ojos.-Por qué tan interesado profe?

-No estoy interesado, solo preguntaba.-Contestó el profesor Gaulle, viendo como Jaime volvía a entrar a la sala y se volvía a sentar al lado de él, sin decir ni una palabra.

Continuaron hablando sobre el carrete cuando una de las maracas del otro día volvió a interrumpir la conversación. Antes de que ella dijera algo, Nicolás habló.

-Qué pasa ahora? Acaso Evelyn vino a buscar a Jaime otra vez?.-Preguntó Nicolás con un notorio enojo en su voz haciendo que todos se interesaran por eso, hasta Jaime.

-N-No profe. El profe Iván lo necesita afuera.-Dijo la alumna para luego irse casi corriendo de ahí.

Todo el grupo de amigos de Jaime notaron un leve sonrojo en las mejillas de Nicolás cuando escuchó el nombre del profesor que lo esperaba afuera.

-Chucha profe, se puso rojito.-Dijo Manuel riéndose ya que al decir eso Nicolás se colocó más rojo aún.

-No hablen del carrete sin mí, vuelvo altiro.-Dijo el moreno levantándose de su asiento para luego salir de la sala.-Qué pasa Iván?

-Es la tercera vez en la semana que te pido una cita, por qué no?.-Preguntó el recién nombrado con flores en su mano y con una ligera sonrisa dirigida al moreno.

-Solamente no puedo.-Respondió el pequeño moreno queriendo que su colega lo entendiera de una vez.

-Acaso tienes a alguien más?.-Preguntó el profesor Iván observándolo.

-No es eso...

-Solo es una cita, nada más.-Dijo Iván entregándole las flores a Nicolás haciendo que este las recibiera casi obligado.

-Iván...

-Solo piénsalo si? La propuesta seguirá ahí.-Dijo el anteriormente nombrado para luego irse haciendo que Nicolás suspirara con cansancio y enojo.

-Nunca se rinde cierto?.-Preguntó Oscar quien estaba afuera de su sala riéndose. Se notaba que se había tomado un "descanso".

-Nunca.-Respondió el profesor Gaulle riéndose solo un poco para luego entrar a la sala con las flores en sus manos haciendo que todos tuvieran curiosidad de estas.

El moreno las dejó sobre su mesa y notó que decía algo.

"Solo es una cita para conocernos mejor, qué tan malo podría ser?" Había escrito Iván en la nota haciendo que el moreno volviera a suspirar ya que nunca se rendía.

Luego de eso se dirigió hacia su puesto de antes y vio a Jaime mirándolo furiosamente, haciendo que el moreno se preguntara que había hecho ya.

-Esas flores se las regaló el profe Iván?.-Preguntó Manuel viendo como el moreno asentía.-Ese profe es súper rico, acaso lo lleva a una cita?

Cuando dijo la parte de "súper rico" Edgar lo miró con enojo y apretó un poco la mano de este haciendo que lo mirara.

-Quiere llevarme a una cita pero no sé.-Contestó Nicolás todavía sintiendo la mirada intensa de Jaime sobre él.

-Creo que estoy de acuerdo con Manuel en eso, es súper mijito rico ese weón, por qué no acepta la cita?.-Preguntó Naiko viendo como Jaime lo miraba mal haciendo que se retractara.

-No sé, tal vez lo haga.-Dijo el moreno mirando al enojón unos segundos. Este estaba rojo tal vez de la rabia, cosa que impresionó un poco a Nicolás.

-Tal vez lleve a la Evelyn a tu carrete, Edgar.-Dijo Jaime con un tono serio. Todos podían notar los celos ahí también pero no quisieron decir nada.

-Eh, esta bien.-Dijo el ruloso algo confundido mirando a su amigo.

-Edgar no importa si llevo a Iván a tu carrete? Tal vez ahí me termina de convencer sobre la cita.-Dijo Nicolás sintiendo aquellos celos por todo su cuerpo que en ningún momento le daban un descanso.

-Me parece bien, supongo.-Dijo Edgar no sabiendo porqué su profesor y su amigo estaban actuando así, de hecho el único que se había dado cuenta de que pasaba era Manuel, quien ya los shippeaba.

El moreno y el enojón se miraron furiosamente por varios segundos para luego desviar sus miradas.

Sería un día largo.