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POV Omnisciente

-Iré a buscar unas cervezas, si?.-Preguntó Nicolás después de varios minutos. Manuel ahora estaba hablando con Gus.

Manuel miró fijamente a Nicolás al igual que Gustavo y este último asintió.

El moreno se dirigió a la cocina y de inmediato vio a Jaime al lado de Oscar. Para su mala suerte, las cervezas estaban al lado de ellos, así que camino con la vista hacia las cervezas no más. Jaime lo observó por unos segundos para luego mirar a cualquier otra parte.

-Hola Nico, hace tiempo que no te veía.-Dijo Oscar bastante alegre, pasándole el porro a Jaime a escondidas para luego abrazar a Nicolás. Este último ni siquiera se dio cuenta de lo que había pasado, haciendo que la misión hubiera salido bien.

Jaime se fue de la cocina y salió de la casa solo para fumarse el porro afuera, mientras miraba el cielo o la calle. Eso lo tranquilizaba bastante y no podía negarlo.

El enojón simplemente no podía soportar estar en la misma habitación que Nicolás. Y no era porque le tenía algún tipo de rencor o algo así, si no porque tendría unas ganas de besarlo como antes que ni él podía controlar.

-Desde cuando te drogas?.-Preguntó alguien detrás suyo.

-Desde que tu novio se fue del liceo.-Respondió Jaime sabiendo quien era.

-No deberías hacerlo.-Dijo Gustavo. Sonaba bastante serio y hasta tal vez un poco triste por Jaime.

-Bueno, no eres quien para decirme que no tengo que hacer.-Dijo el enojón girándose para mirarlo con el ceño fruncido.

-No quieres que el Nico se entere de esto?.-Preguntó Gus, observándolo.

-Me da igual si se entera o no, no es como si fuera a cambiar algo solo porque lo sepa.-Respondió el drogadicto, dándole la espalda otra vez.

-Entonces no te importa si le voy a decir y lo traigo?.-Preguntó Gustavo, queriendo saber las reacciones de él.

-Haz lo que te haga feliz.-Contestó Jaime otra vez con ese tono cínico, sintiendo como su profesor se iba y cerraba la puerta, haciendo que pudiera relajarse por unos minutos al menos.

Después de unos minutos, terminó de fumarse el porro, haciendo que hasta se pusiera un poco triste pero no importaba, tenía más.

-Así que te drogas?.-Preguntó Nicolás detrás de él, al igual como lo estuvo Gustavo.

-Sí.-Respondió el enojón girándose para mirarlo fijamente. Nicolás tenía una cara de decepción y enojo que nadie se la podía sacar.

-Eso no te hace bien Jaime.-Dijo el moreno preocupándose por él, acercándose a Jaime pero este retrocedió un poco, haciendo que se detuviera.

-Mira Nicolás, sin exagerar, hoy me lo han dicho como cinco o seis veces y me ves dejándolo? No, cierto?.-Preguntó el drogadicto, haciendo que Nicolás confirmara que ya no era el mismo de antes.-Por qué creerías que algo cambiaría solo por qué lo dices tú?

-Jaime pudiste haberme dicho de esto...

-Ah claro, afuera de tu departamento sin que me abras la puerta? Me parece un lugar súper bueno para haberte dicho.-Dijo el recién nombrado otra vez con aquél tono cínico del que todos sus amigos estaban acostumbrados.

-Jaime qué te pasó?.-Preguntó el profesor Gaulle casi atónito, observándolo.

-Realmente lo quieres saber?.-Preguntó el ex-estudiante de Nicolás, tomándose un tiempo para luego seguir hablando.-Te fuiste Nicolás, sabiendo todas las razones de porqué había dicho y hecho eso, lo hiciste igual y no quisiste hablar en ningún momento conmigo. Acaso crees que la estaba pasando muy bien después de que me dejaste?

-Jaime de verdad que lo siento, creí que yo iba a sufrir más y ya no quería eso...

-Claro, tienes razón en eso. El día en que tú dejaste de sufrir, yo comencé a hacerlo aún más.-Dijo Jaime interrumpiéndolo.-No tiene sentido hablar ya de esto Nicolás.

Jaime pasó por al lado de Nicolás y antes de abrir la puerta, se detuvo y se atrevió a decir algo más.

-No deberías preocuparte tanto por mí, recuerda que ya no estas enamorado de mí.-Dijo el enojón con un tono serio refiriéndose a Gustavo, para luego entrar a la casa.

El moreno se quedó quieto por unos segundos hasta que decidió seguir a Jaime. Entró a la casa y tomó a este por el brazo. Hizo que lo siguiera y entraron a la habitación de Edgar como aquella vez cuando se declararon.

-No vengas a decirme weas Jaime con que ya no estoy enamorado de ti, acaso crees que fue fácil para mí verte con ella?! No me importa que haya sido algo que ese weón de Iván te obligó a hacer, dolió de la misma manera como si hubiera sido verdad.-Dijo Nicolás enfrentando a Jaime quien lo miraba con el ceño fruncido.

-No si me imagino que sufriste un montón, tanto que ahora estas con Gustavo!.-Dijo Jaime levantando la voz al igual que lo hizo Nicolás.

-Y qué? Tú también estás con Evelyn!.-Dijo el moreno ahora mirándolo fijamente.

-Pero que equivocado estas Nicolás, de verdad no sabes, cierto?.-Preguntó el enojón no pudiendo creer que su ex-profesor no supiera.

-Qué no sé qué?.-Preguntó el pequeño moreno tranquilizándose un poco, viendo como Jaime lo observaba.

-Apenas salí de cuarto medio, "terminé" con ella. Tú en verdad creías que ella me gustaba?.-Preguntó el drogadicto diciéndole la verdad.

-Y cómo sé yo que eso es verdad?.-Preguntó el profesor Gaulle todavía con el ceño fruncido. Parecía que estaba preparado para volver a levantar la voz.

-De verdad me vas a hacer decirlo, cierto?.-Preguntó el ex-alumno Navarro con una ligera sonrisa por lo cómica que era la situación.

-Decir qué?.-Preguntó el profesor moreno, no entendiendo a que se refería su ex-estudiante.

-Nicolás, yo siempre he estado ena...

-Pasa algo, amor?.-Preguntó Gustavo entrando a la habitación, interrumpiendo lo que iba a decir Jaime. Gustavo había escuchado los gritos de Nicolás y también de Jaime, así que había ido para ver si todo esta bien.

-E-Eh, no pasa nada.-Respondió Nicolás, casi odiando a su "novio" por haber entrado justo en ese momento tan importante para Jaime y para él.

-Creo que los dejaré solos otra vez entonces.-Dijo Gus con una ligera sonrisa, apunto de hacerlo pero Jaime habló.

-No importa.-Dijo Jaime mirando a Nicolás y luego a Gustavo para después salir de la habitación

Nicolás suspiró pesadamente cuando este se fue y miró a Gus fijamente.

-Arruiné tu oportunidad para engañarme, cierto?.-Preguntó Gustavo, viendo como Nicolás asentía con la cabeza.-Puta la wea! El shipp weón.

Esa noche las cosas hubieran podido salir bien para todos, pero hubiera sido muy fácil.

I Want YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora