I Want You

42.-

POV Omnisciente

-Qué dijo? Va a dejar de drogarse?.-Preguntó Gustavo cuando estaban bajando en el ascensor.

El enojón recordó eso y se puteó por dentro. Tal vez su ex novio ni siquiera estaba cansado, solo quería drogarse.

-No hablamos de eso.-Dijo Jaime recibiendo una mirada asesina de Gustavo.

-Entonces de que otra wea hablaron que era tan importante?.-Preguntó Gus con el ceño fruncido.

-De nuestra relación completamente rota.-Dijo el enojón con una pausa.-Pero debes estar muy feliz por eso, no? Puedes volver a pelear con él.

-Me estai webeando? Nicolás estaba inconsolable cuando te habías ido a dar una vuelta, no había manera de que estuviera bien, así que no digas que soy feliz por eso porque mi felicidad depende de como este Nicolás.-Dijo el profesor de Historia no soportando mucho a Jaime.

-Y tú crees que me gusta verlo así?! Estoy completamente destruido por solo verlo con ojeras y con sus ojos llorosos pero necesito tiempo para procesar todo lo que pasó, así que no intentes dejarme como el egoísta o el que no se preocupa por Nicolás, porque daría mi vida entera por él.-Dijo el ex drogadicto mirándolo directamente a los ojos para luego salir del ascensor.

Gustavo lo siguió, mientras que sus amigos también lo hicieron para que estos dos no se golpearan o algo así.

-Entonces debiste quedarte ahí con él, sin importar tu mierda de espacio!.-Dijo Gus tomando el brazo de Jaime para que este lo mirara con los ojos lleno de furia.

-Él no quería seguir hablando de eso y no lo iba a seguir presionando, así que hazme un favor y cállate un rato.-Dijo el futuro profesor de Matemáticas mirando fijamente a Gustavo para luego girarse para ir a su auto.

-Con razón te engañó conmigo!.-Dijo el profesor de Historia viendo como Jaime se giraba para mirarlo unos segundos y darle un puñetazo bastante fuerte en la cara, haciendo que se cayera. El enojón se acercó a él y lo tomó por el cuello de la ropa para levantarlo un poco y volver a darle otro golpe en el rostro. Cuando le iba a dar otro, sus amigos lo separaron de Gustavo que estaba sangrando bastante.

-Jaime para!.-Dijo Edgar casi en un grito, viendo como este se quería soltar, así que tenía que tenerlo fuertemente.-Tranquilízate!

-Naiko llévate a Gustavo de aquí, ahora.-Dijo Manuel con esfuerzo mientras también sostenía a su amigo.

Naiko asintió y se llevó casi corriendo de ahí a Gustavo, quien seguía sangrando por los golpes de Jaime.

Después de unos pocos minutos, Jaime paró de hacer esfuerzo en que lo suelten y se "relajó". Luego de unos segundos lo soltaron pero aún así estaban atentos por si pasaba algo.

-Algo que decir?.-Preguntó Jaime con un tono serio, mirándolo a los dos.

-Creo que ya sabes lo que pensamos.-Respondió Edgar mirándolo fijamente. Vio como Jaime miraba el edificio otra vez, dirección al departamento de Nicolás y suspiró.

-Si vuelvo, no me dejará entrar otra vez.-Dijo el enojón refiriéndose a su ex pololo y profesor.

-Lo sabemos.-Dijo Manuel solo con una ligera sonrisa compasiva.-Será otro día.

-Cada segundo que pasa, se va volviendo más vicioso, lo sé porque pasé por eso.-Dijo el ex drogadicto, no sabiendo que hacer en realidad.

-Entonces ven mañana cuando puedas y habla las cosas con él más tranquilamente.-Dijo Manu con una pausa.-Como él te sacó de eso, tú vas a poder hacer lo mismo.

-Tú crees?.-Preguntó el futuro profesor de Matemáticas, mirándolo fijamente.

-Claro que sí.-Respondió el ruloso con una leve sonrisa, apoyando a su mejor amigo.

Jaime se quedó en silencio por unos segundos, mirando el piso para luego ver a sus amigos.

-Iré a mi departamento para ordenar mis cosas, si quieren después hablamos.-Dijo el ex alumno de Nicolás, despidiéndose de sus amigos para luego dirigirse a su auto y subirse a este.

Manuel y Edgar vieron como su amigo se iba para luego mirarse a los ojos.

-Cuanto tiempo se demoraran en estar juntos?.-Preguntó Edgar todavía mirando a su novio.-Yo digo que dos semanas y media.

-Tres días.-Respondió Manuel con una sonrisa sincera, viendo la cara de confusión de su pololo.

-Estás seguro? De verdad que no me imagino que en tres días estén juntos.-Dijo el ruloso extrañado.

-Tres días o menos, solo porque yo arreglaré todo esto, créeme.-Dijo Manu todavía con aquella sonrisa, mirando como Edgar le devolvía la sonrisa y le daba un pequeño beso en los labios para luego tomarlo de la mano y llevarlo a su auto.

Mientras tanto Naiko y Gustavo ya habían llegado a la casa del primero solo para curar al profesor de Historia.

-No debiste decirle eso.-Dijo Naiko de repente, cuando apretaba el algodón con alcohol sobre la herida del labio y luego de la mejilla.-Sabes que Jaime lo ama con toda su vida, todos lo notamos.

-Pero si él sabía que Nicolás estaba mal, por qué lo dejó?.-Preguntó Gustavo con el ceño fruncido mientras miraba a su amigo.

-Porque era lo que Nicolás quería.-Respondió Naikelito con una ligera pausa.-Jaime siempre ha respetado las decisiones de Nicolás, aunque le parezca que están mal algunas.

-Pero Nicolás esta mal, apenas puede pensar claramente y recordemos que se esta drogando, cosa que le nubla completamente la cabeza.-Dijo Gus, notando la cercanía en la que estaba con Naiko.

-Jaime va a arreglarlo, nunca se daría vencido si se trata con algo de Nicolás.-Dijo el pequeño estudiante mirando fijamente a su profesor.-Solo nota que estos meses siempre esperó a que Nicolás lo llamara o algo así.-Volvió a tomarse una pausa para luego seguir hablando.-Tú no vas a intentar recuperar a Nicolás, cierto?

-No, no lo haré porque sé que sería un error intentar hacerlo.-Respondió el profesor de Historia mirando los labios de Naiko por varios segundos.-Además, creo que tengo a otra persona en mente ahora mismo.

-Ah si? Debe ser bastante afortunado, supongo.-Dijo Naiko algo decaído, dejando de curar a Gustavo para luego girarse para dejar el algodón. Cuando se dio la vuelta otra vez, Gus estaba mirándolo fijamente y estaba bastante cerca de él.

-Siempre son tan malos para las indirectas?.-Preguntó Gustavo para luego tomar el rostro delicadamente de Naiko para después besarlo lentamente, sintiendo como este le correspondía de inmediato.