El Pasado O El Futuro. ||Shikadai Nara Y Tú||

Ahijada

Pov -rayita-

Abrí los ojos lentamente, todo parecía obscuro y sin embargo al parecer me encontraba en un pedazo de rama, me pare exaltada, había vivido algo fuerte hace unos instantes eso lo presentia pero no podía recordarlo

—q...quien soy?—hable con un hilo de voz, asustada, atemorizada...empecé a temblar de las manos mientras poco a poco mi cabeza se llenaba de dudas
—t-tengo que buscar ayuda— pero al pisar mal caí del árbol, no se con que choque a la hora del aterrizaje pero al abrir los ojos adolorida me encontré con un par de almendras verdes.

—oye...sal de encima pesas—bocifeo un chico, a lo que rápidamente me quite mirándolo preocupada

Luego hubo un silencio incómodo en el cual sólo nos dedicamos a mirarnos mutuamente.

—disculpa...podrías ayudarme?—fui la primera en hablar —...Tengo un... problema—dije con lo ánimos por el suelo.

Le oi suspirar pesadamente—¿cuál es el problema?—me indigne un poco

—perdí la memoria—dije firme observando como su cara se convertía en una de completo fastidio

—lo que me faltaba...—le oí decir, algo que me empezó a enojar de sobre manera

—si no me quieres ayudar esta bien—le dije ya enojada—no se por que te pedí ayuda— luego empeze a caminar entre los árboles pero antes de que me fuera dijo

—nunca dije que no te quisiera ayudar— y con eso volte a verlo feliz

—¿vas a ayudarme?—el asintió desganado, supongo que ha de ser asi siempre—¡Muchas gracias!—

—pero primero deberíamos ir con la Señora sakura, a ver si ella sabe algo que pudo haber causado tu estado—asenti repetidamente, sonriendo y pensando en un color rosa.

Caminamos en silencio, por lo que veía pronto se haría de noche.

—por cierto...—mencioné captando su atención mientras caminaba con las manos metidas en los bolsillos delanteros de su pantalón—¿cómo te llamas?—le pregunte a lo que sonrió

—¿para que quieres saberlo?—preguntó devuelta, descolocandome un poco, es cierto para que quería yo saber su nombre, con que me ayudará bastaba.

—por que...¡pienso pagarte el favor que me haces al ayudarme algún día si...nos volvemos a encontrar!—eso sonaba vilmente a mentira pero tenía que hacerlo creible , no podía símplemente decirle que no sabía el por que, me vería tonta...o tal vez si lo sabía y me negaba a decirlo—pero si no quieres de—me interrumpió

—Shikadai—me miró feliz, como si estar ahí conmigo, le agradara—Nara Shikadai—

—Nara...—susurre en un hilo de voz—entonces ¿a donde vamos shikadai?—

—al hospital—el resto del camino fue en silencio, hasta que llegamos a las puertas del hospital, al entrar nos topamos con una mujer de cabello rosado, que al nada más vernos de acercó

—shikadai que sorpresa ¿cómo esta tu madre?—preguntó

—esta bien—

—ya veo, bueno¿ que hacen aquí? Y ¿quien eres tu chica?—empeze a ponerme nerviosa y ahora que decía?!

—a-ah y-y-yo...—tartamudee

—a eso veníamos mi amiga, necesita que la revise, al parecer no recuerda nada...menudo problema—uff suspire de alivio, pero entonces sentí los ojos verdes de la señora sakura encima mío.

Sakura nos hizo una señal con la mano para que la siguieramos, entonces al llegar a su consultorio me hizo sentarme en la camilla para luego oír como le decía a shikadai que fuera a casa.

—esta bien, me iré a casa, hasta mañana—me puse algo triste

—gracias shikadai—susurre.
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—al parecer fue un shock demasiado fuerte el que hizo que perdieras la memoria pero posiblemente en un mes recuperes tus recuerdos—me dijo, durante todo este tiempo no dejé de mirarla curiosa sobretodo al color de sus ojos, me hacía pensar en muchas cosas...eran extraños—ya es tarde y el hospital pronto cerrará así que—

Rápidamente capté la indirecta asi que sin otro remedio—¡entiendo, bueno de verdad muchas gracias señora sakura!—empeze a bajar para irme pero...

—a donde crees que vas, Shannaro! Tú vas a quedarte hoy en mi casa, no puedo permitir que te duermas en la calle—la mire con los ojitos iluminados, la señora era como un ángel caído del cielo.

—¡haría eso por mi, muchas gracias!—pronto partimos a la casa de la señora sakura, era sencilla pero linda, aunque todo estaba apagado

—mi hija y mi esposo ahora deben estar dormidos pero podría darte una habitación si estas dispuesta a compartirla con sarada —la mire

—gracias Sra.Sakura pero no quiero que moleste a su familia, es suficiente con que me haya ayudado, además puedo dormir en el sofá—me miró sonriendo y acarició mi cabello juguetonamente.

Poco después me encontraba durmiendo plácidamente en aquel mullido sofá.
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—pss!...pss! Oye—agarre las mantas y me tape— oye despierta—abrí un ojo y al visualizar a una chica como de mi edad me desperté de golpe—¿quien eres?—me miró curiosa

—yo....eres la hija de la Sra.Sakura,verdad?—me puse nerviosa al principio pero después deduje quien era, por su parte ella asintió —tu mamá me ayudó y me ofreció quedarme en su casa, lamentó la molestia—

En eso apareció La Sra.Sakura—veo que ya se conocieron, bueno primero vamos a desayunar y después iremos con Naruto—me destape y al pararme una cosa de metal cayó, me acerqué a recogerlo y al admirarlo me encontré con un símbolo, desayunamos y después salimos

—entonces ¿cómo te llamas?—baje la mirada

—no lo se...No lo recuerdo—me miró con un poco de lástima, nos detivimos y al estar frente a una torre entramos hasta llegar con un hombre rubio, la Sra.Sakura le explicó la situación al Hokage.

—entonces no recuerdas nada?—negué con la cabeza, entonces me acordé de la cosa metálica, la saqué y se la enseñe

—es lo único que tengo—el la miró

—Sakura-chan sarada podrían dejarme con ella a solas?—ambas obedecieron—mira...esta banda...es de una aldea que hace mucho, ya no existe...lo más probable es que seas la única sobreviviente—tome la banda, mi flequillo tapaba los ojos por lo que no vio que quería llorar—por ahora serás tayumi Namikaze mi ahijada—

Lo más probable

Es que seas

La única

Sobreviviente.