El Pasado O El Futuro. ||Shikadai Nara Y Tú||

desfallecer

Pov -Tayumi-

Me safe de los dos y los mire enfadada, bueno sólo mire enfadada a Kawaki.

— muevete hoyo negro, todavia tenemos muchas cosas que ver —saque a empujones a Kawaki ya en un lugar más tranquilo deje de darle empujones.

Me miro con una ceja arqueada mientras se cruzaba de brazos pareciendo un chico malo, aunque ya era uno. —¿Se puede saber por que me llamaste hoyo negro? —preguntó.

Alze los hombros sin darle mucha importancia —los hoyos negros tragan todo lo que se encuentra cerca y tu tragas toda la comida que te encuentras, así que no hay mucha diferencia —

—pequeña morra, ¿se te olvida que soy mayor que tu? —me dio una palmada en la cabeza, a lo que le gruñi.

Entonces camino dejándome ahí parada volte pero lo que me encontré fue que el chico malo, estaba jugando en los columpios —¡ven Tayumi! —exclamó a lo que me acerque para tomar su mano desconfiada.

Cuando me lanzó a un columpio —¡ah! ¡No tenías que hacer eso! —le reclame a lo que rio, bonita sonrisa debería decir.

—¡no seas aguafiestas! ¡Diviértete! —me deje llevar por el balanceo del columpio y el viento que chocaba, además de añadir las carcajadas y risas que soltabamos entre los dos, como un momento especial lo atesorare en mi memoria.

Hasta que una presencia se presentó? Bueno el punto es que ahí estaba.

—Tayumi...¿podríamos hablar? —la cara seria de mi maestra me dio mala espina, mire de reojo a mi acompañante pero este ya no se encontraba ahí.

Baje de un salto —¿que pasa? —

—bien em se que esto es algo delicado te lo dire despacio, tu sensei ahora será Sarutobi Mirai —me soltó de golpe a lo que no supe como reaccionar, no sabía si enojarme, finjir alegría, mostrar melancolía cuando una frase llegó a mi mente.

Te está abandonando.

Le mire con terror —no puede ser...todos...¡Van a dejarme! ¡se están desasiendo de mi! —clame contra ella, mientras mis pies reclamaban retirarse cuanto antes.

—n-no Tayumi, lo que pasa e —ya no alcance a oír por que mis piernas salieron corriendo tratando de refugiarme, busque un lugar que nadie conociera.

Me escondi entre unas tablas y cartones, mientras me ponía a abrazar mis rodillas, no se cuanto tiempo estuve ahí, ni si me había dormido o sólo veía al vacío, cuando movieron el pedazo de madera, dejando al descubierto mi escondite, una cabellera rubia se asomó. —Tayumi-chan... —

—Hokage ¿por que estoy sola? —
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Miré desafiante a la chica que estaba frente a mi, mientras me negaba a irme con ella.

—ya te dije que no vete —trate de cerrar la puerta pero la fuerza de ella era más.

—¡no me iré sin ti! —exclamo dandome un escalofrio, de esos donde todo suena cursi, guakala!.

Gruñi por lo bajo maldiciendo a la Sarutobi —ah, sabía que tendríamos problemas —abrí los ojos como plato, al reconocer la voz cansada de shikadai.

Lo mire su misma ropa, su misma pose, su mismo peinado que hasta parecía retrato.En eso me agarró la peli negra de la muñeca arrastrándome hacía afuera, solté un chillido pequeño de frustración como una niña pequeña. —apurate hay mucho que practicar —me dijo la Sarutobi dándome una sonrisa.

Me agarre al barandal como si mi vida dependiera de eso, shikadai se acercó por un momento pensé que sería para alejar la mano de mirai que me jalaba pero en vez de eso tomó mi brazo para tratar de separarlo del barandal.

—¿acaso no te dije que no podías irte sin mi permiso, pequeña morra? —mire a mi Salvador con una sonrisa ignorando el apodo que me habia impuesto, Kawaki traía mi desayuno aunque era las 6 pm o tal vez más tarde.

A una velocidad sobrehumana el Nara se acercó a mi compañero. —tu quien eres para decirle que hacer —mire con una ceja arqueada la escena, le mandé una mirada a la Sarutobi a lo que esta sólo alzó los hombros negando mientras también pedía respuestas.

—eso no es de tu incumbencia mocoso —le respondió en el tono de "odio la life, nadie me hable"

Poco a poco el agarre de mi "maestra" se aflojo algo que aproveché para safarme—tardaste mucho~ —canturre mientras me acercaba recibiendo una extraña mirada de shikadai.

Me lanzó las compras mientras se arremangaba las inexistentes mangas de su chaleco —métete yo tengo asuntos que arreglar con este necio —mire sorprendida a Kawaki.

Por un momento sentí como se desprendía rayos de los ojos de los dos chicos, era algo así como odio puro, temí lo que pasaria si esto seguía.

—¡no vinimos a pelear! ¡nos vamos! — exclamó la chica de ojos rojos jalando de la mano a shikadai, sólo por esta vez deje que lo tocará, que se llevará a shikadai o sino se pondría muy feo por aquí.

Cuando entramos deje las compras en la mesa —¡mas te vale comportarse con shikadai! —le amenaze sacando el cucharon.

Levantó las manos burlándose mientras hacia boca de pato —¡perdóneme señorita ichizoku! ¡no sabia que habia tanta tensión setzual entre usted y el nara!—exclamo dejándome roja.

Le lancé el cucharon haciendo sonar el golpe —¡argh! ¡de todas maneras ya no estaremos mucho aquí, me importa un bledo comportarme! —me volte suspirando cuando mi mirada bajo se encontró con un papel arrugado.

Me palmeo la cabeza —tenemos que encontrar a mi madre —le dije.

—lo se, mi contacto ya está lista sólo falta que tu y yo nos decidamos a irnos —mire sus ojos opacos.

—prometes que traeras a mi madre? —

—te lo prometo, incluso si es necesario arrancarsela a la misma muerte —confíe en las palabras de el chico, entonces me entró curiosidad por algo.

—¿por que me llamaste "señorita ichizoku"? —