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Después de haber pasado dos horas del momento desagradable, Harry se encuentra sentado al borde de un pequeño puente que se situaba en los jardines del instituto.

El rizado miraba largo tiempo el riachuelo que se encontraba debajo del puente y observaba su reflejo en el agua.

--- Soy una porquería de persona, sin duda lo soy.
- Al mismo al tiempo que lanzaba una piedra a su reflejo haciendo que su imagen se distorsionara en el agua.

De repente escuchaba unos pasos aproximarse y levantaba su mirada para ver de quién se trataba.

Se trataba de Louis quién se paraba justo al lado de éste.

--- ¿Que haces? ¿No piensas tirarte del puente? ¿o sí?
- Pregunta Louis mientras alzaba una de sus cejas.

El rizado sonríe pasivamente y empieza a mover la cabeza en forma de negación. --- Debería de hacerlo ¿No crees? Aunque para tu mala suerte no pensaba en eso.

--- Ambos deberíamos de tirarnos. - Responde el menor.
--- Ya que los dos juntos somos un desastre andante.
- Mientras tomaba asiento al lado del oji verde.

--- Sabes Louis, se que no soy la mejor persona del mundo pero en realidad siento remordimiento por todo el mal que le hice a Taylor, ella no merece toda esta mierda.

El oji azul escucha atento las palabras del rizado, al mismo tiempo se asombra de que éste lo llamara por su nombre y no se refiriera a él como imbécil, idiota o cualquier sobrenombre que acostumbraba a llamarlo.

--- Estoy cansado, no siento un propósito en esta vida, las pocas personas que se encontraban a mi lado se alejan por diferentes razones y lo que mas me duele es que yo mismo las alejo por mi maldita forma de ser.

Louis mira al rizado a los ojos y nota en su mirada una profunda tristeza, observa como esos ojos verdes esmeraldas están un poco aguados como que si el rizado estuviera conteniendo sus lágrimas.

--- Harry no seas duro contigo mismo, pues donde me vez tampoco tengo muchos amigos que digamos y la única verdadera amiga que tenía.... Buenoo, ya no existo para ella.

El oji verde alza su mirada y coloca su mano sobre el hombro del menor, lo mira fijo por unos segundos antes de comenzar a hablar.

--- Perdóname por eso soy un completo idiota, ustedes no eran más que solo buenos amigos, perdón por haberte involucrado en esto.

--- Oye no es toda tu culpa, yo mismo me puse en esta situación por no ser leal desde un principio.
- Ambos se miraban al rostro muy de cerca uno al lado del otro.

El rizado mira con detalle el rostro del menor ya que era la segunda vez que lo tenía muy cerca, irónicamente la primera vez que lo tuvo cerca fue en diferente circunstancia, pues era en la susodicha fiesta de la discordia y lo tenía sujetado de el cuello de su camisa zarandeándolo contra la pared.

El mayor observa ese par de ojos azules, los cuáles le parecían sumamente hermosos, mira un poco mas abajo parando en esos delgados y rojos labios, observa esas mejillas perfectas como si estuvieran hechas a la medida, al mismo tiempo escuchaba como su corazón empezaba a acelerarse sin razón alguna.

Por su lado Louis se da cuenta de las miradas del rizado tornando sus mejillas un tanto coloradas, pero en si le agradaba la manera en la que lo veía el oji verde.

En un parpadear de un segundo, sus rostros fueron acercándose cada vez más.

El sentimiento extraño que estaba surgiendo en ambas partes era un tanto abrumador, y por alguna extraña razón el destino empezaba a juntarlos para que ambos lo averiguaran.

El Trébol Sin Suerte(LARRY STYLINSON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora