Mientras tanto, en Sand City...
Cam corrió en dirección a la sala de planeamiento de batalla y enlenteció la marcha sólo después de llegar. Con largos y firmes pasos, sobrepasó a los guardias guerreros e ingresó a la guarida del Emperador. Con una respetuosa reverencia, se detuvo frente a él.
"He reunido a una tropa de mis mejores cazadores para buscar a su hermano en la quinta dimensión, Su Excelencia".
"Bien". Zor inclinó la cabeza y, luego, le hizo una seña a Cam para que se sentara a la mesa elevada de estrategia. "Estoy seguro de Harry y su nee'ka están a salvo pero, aun así, quiero encontrarlo cuanto antes".
"Me ocuparé yo mismo, Su Majestad".
"No, no es necesario". Le hizo un gesto con la mano para restarle importancia al tema. "Al menos, mi hermano Kil ya se dirige a la quinta dimensión mientras hablamos para liderar la cacería. Le hará bien alejar su mente de los sediciosos por un momento".
Cam asintió con la cabeza mientras se sentaba, pero no dijo nada.
El Emperador suspiró y se pasó una mano por el oscuro cabello con preocupación. "Kil me aseguró que nos llamaría si surgía la necesidad, por lo que los planes de la fiesta de presentación en sociedad de Kara no se alterarán por el momento".
Cam se retorció en su silla; se creía un libidinoso al tener una erección sólo al escuchar el nombre de su futura Pareja Sagrada. Especialmente, en vistas al reporte que acababan de recibir del piloto del crucero de Harry que indicaba que el índice de muertes era sombrío.
Zor se incorporó con una expresión cómplice en las cejas y se rió ligeramente por lo bajo pese a la seriedad de la situación. "No te olvides de hacer que te atiendan las necesidades antes de unirte a la cena-fiesta de celebración".
El rostro de Cam se sonrojó ligeramente pero no dejó de mirar a los ojos al Emperador. "Que no le quepa la menor duda". Luego, sus pensamientos se concentraron en Kara; la incipiente inquietud que experimentaba al saber que le permitirían posarle los ojos una vez más crecía en intensidad. Por todos los dioses, ¡cuánto deseaba que ella ya hubiera cumplido la edad reclamable!
El Emperador dirigió la mirada hacia Cam mientras observaba el rango de emociones que jugueteaban en el rostro de su futuro yerno. "Envía tu grupo de cacería de inmediato", dijo él suavemente y lo palmoteó sobre la espalda. Luego, se puso de pie para retirarse y dejó que Cam lo viera irse.

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Sin Piedad (H.S) 2
Ciencia FicciónEl siguiente material incluye contenido sexual gráfico para lectores adultos. Esta historia ha sido calificada como una obra de contenido E por un mínimo de tres críticos independientes. Las escenas de amor sensuales son explícitas y no dejan nada l...