¡ME GUSTAS! PERO SOY UN CHICO © (EDITANDO)

29: REVELAR

Sasuke

Lágrimas bajaban por sus pómulos. Sus labios temblaban al compas de su cuerpo. Recuerdo perfectamente que llovía y ella usaba una chamarra para disimular su estado. Por alguna razón queria acercarme a ella pero no pude porque el miedo de lastimarla me inundaba... la amaba... ¿te amaba?

-No mientas Sasuke-kun

¿Qué?

-A pesar de que yo no exista. Tu conciencia no descansará por lo que me hiciste. Pero se que encontrarás a alguien que me disemine de tu mente... abriras los ojos...

-¿Porque te tuviste que ir? -pregunté casi ahogo una carcajada. Sus grandes ojos se fijaron a los míos. El miedo sucumbió mi cuerpo. Se acercaba lentamente, me encontraba atónito. No podía pronunciar ninguna palabra.

Al llegar justo frente a mí. Susurro solo para mí:-Te odio con todo mi ser Sasuke...

Se alejó de mí y comenzó a reir de una manera malvada. La comisura de sus labios se habian elevado. No podia reconocerla. Hinata... ¿porqué?

De una gran golpe que recibí en la cabeza. Desperté. Grandes ojos celestes me miraban preocupados.

-Hemos llegado teme...

¡Ah! Es verdad... el estúpido viaje escolar. Maldición ¡Porque demonios tuviste que aceptar esta idiotez! Miré al conejo rubio justo a mi lado y mi irritación subio cada vez más. Como puede sonreir de esa forma despues de lo que pasó.

Cada vez que me doy la oportunidad de observarlo asi de cerca. Me preguntó como serán sus padres ¿seran asi de alegres? Sera que su madre tenga influencia sobre de él. Pensar eso me trae recuerdos de cuando vivia en América.

No vayas a vagar por ahi Uchiha

Lo sé. Tengo que tener en claro todo lo que quiero. Y quiero a ese conejo sólo para mi.

-¡Muy bien chicos! -comenzó a dar ordenes Kakashi- Les recuerdo que cada uno de ustedes tiene la llave de sus habitaciones. Les pido de favor que vayan a sus respectivas habitaciones. Y en unas tres horas bajen para poner en práctica el itinerario. ¡Dispersense!

¡Uf! Por fin un poco de privacidad. Tomo marcha para la habitación que me habian asignado. Tocó la puerta pero nadie parece acceder, vuelvo a tocar. Y sólo escuche el sonido del seguro quitarse. Abrí pero no vi a mi compañero.

Cerré la puerta. Claramente coloque el seguro. El cuarto del hotel era muy elegante. Al entrar habian una mesa de caoba sobre de ella un florero. Al adentrarse más. Sólo habia una cama... extraño... habia una maleta. Al observar más por los suelos habian unos calzoncillos.

Me acerque a la prenda sobre el suelo. Me coloque de cuclillas y habia una etiqueta sobre de ellos. Lo lei cuidadosamente. ¡Dios! Casi me ahogo de la risa por lo tonto que era esto. La etiqueta decía con tinta indeleble: NARUTO

¿En serio? Este chico es extremadamente increible. Cada vez me hace quere saber mas sobre el.

Escuché el sonido de la ducha. Parece que se me adelantó. Bien lo esperaré acá  afuera. Bien por mi que le coloque el seguro a la puerta.

Ya no se escuchaba el sonido del agua azotar el suelo. Cuando sus ojos celestes me observaron atónito desde el umbral del baño. Tenía una toalla color rosado sobre todo su cuerpo. Como si fuese una chica de colegio. Su piel era totalmente blanca, su cabello estaba totalmente hecho una maraña dorada.

Verlo de esa forma tan vulnerable y gotas de agua caer sobre su cuerpo me excitaba de una manera espeluznante.

Otra vez ese rubor sobre sus mejillas ¡Maldición! ¿Acaso me esta provocando? No me pude resistir. Tomé su muñeca y lo lance sobre la cama....

-¡Que crees que haces! -me miraba con su ceño fruncido, sus mejillas se tornaron color carmesí. Hizo el mas lindo de los pucheros. Sonreí

Me encanta...

-Oye... -le dije. Aún estaba encima de él. Sostuve sus dos muñecas sobre la cama. Estaba en mi poder ahora. Asi que él no podía escaparse- ¿no quieres intentar algo nuevo?

Su cuerpo se estremeció al escuchar mis palabras. Parece que entendió perfectamente mi indirecta. Yo se que él desea lo que quiero en este instante.

-¿Que cosa?

-Ya sabes -contesté  seguro. No aparte ni un segundo la vista de su cuello blanquecino. Como se vería una marca de mis dientes ahí. Cuando de repente comenzó a pelear contra mi agarre y paró.

-¡¡Estas loco!! ¡Los hombres no pueden tener... tener... -sus labios comenzaron a titubear. Maldita sea es tan lindo- sexo...

¿Que dijo?

-¿Qué? -dije sorprendido. ¿Sexo? En serio acaba de pensar que íbamos a tener sexo. ¿Ahora? Bueno se que soy un amante al coito. Pero por favor no todo el tiempo la voy a tener parada.

-Y no se como dos hombres lo hacen... -cerró sus ojos con fuerza. Su cuerpo comenzó a temblar.

¿Qué? Por el amor a tu madre Naruto. Estamos en el siglo XXI no  me vengas con esa mierda. Es más estamos en un viaje gratis, en un hotel super chido y tú con tus palabras de los años 40's

Comencé a reírme de sus palabras. Su entrecejo formo una V de molestia. Ok ya basta de estupideces. Es hora de jugar, espero y esta situación se torne interesante salga ganando.

-¿Y si yo te enseño el sexo nuevo?

Sus ojos se quedaron estupefactos. ¡Perfecto! Pude ver desde esta distancia como su pupila se dilataba por mis palabras. Y de como sus piernas dejaron de moverse. Así que este efecto le causo.

-Eso quieres... -dijo muy bajo. Oh vaya, eso no me lo esperaba.

Si supieras nene... llevo deseándote hace mucho tiempo.

Sonreí

-Me alegra que quieras... solo un poco te enseñaré. ¿vale?

Asentó con su cabeza. Con la punta de mis dedos. Recorrí su cuello hasta llegar al borde la toalla. Mi corazon comenzó a trabajar demasiado rápido. Las ansias me mataban, pero tenía que hacerlo paso por paso.

Invadi con mi lengua su clavícula. De sus labios escapó un gemido excitante. Mi pene se despertaba cada vez más ya que su respiracion era la respuesta del estímulo que lo hacia pasar cada roce de mi lengua a su piel.

-Sasuke -sus ojos me miraban totalmente excitados. Ya no peleaba contra mi, me pedía a gritos silenciosos seguir más. Pero realmente queria seguir... ¿Estaba dispuesto?

Con cuidado bajé de su cuerpo. Lo miré directamente, pude ver por su expresión confusión y decepción. No queria que su inocencia yo fuera arrebatada de esta manera.

-Yo... no

Eres un imbécil

-¿Sasuke? -su mirada de entristecio totalmente. De sus labios salio un suspiro pesado y sus palabras me dejaron helado- ¿Es por la chica Hinata?

-¿Que?

-Quiero que me digas ¿quien es esa mujer?

Las sombras que mantenía esclavas en mi interior fueron disueltas por aquellas palabras. No podia seguir obligándome seguir ocultando mi pasado. La verdad tenia que ser revelada.

Fije la mirada a sus grandes ojos, al parecer noto que estaba molesto por la forma en como sus dedos no dejaban de jugar. 

-Pero si le reveló la verdad ¿querrás seguir conmigo?