El sol empezó a molestarme en los ojos otra vez, pero sabía que ya no estaba en la caja. El suelo era de otra forma, tenía otro tacto, era como de piedra... Oí voces a mi alrededor que murmuraban sobre mí, y creí distinguir alrededor de cuatro voces diferentes, que me sonaban extrañamente familiares.
—... ¿De dónde la habrán traído? —dijo la voz más grave.
—... ¡Tenemos compañera nueva! —dijo una voz con un tono algo infantil.
—... Habrá que ver sus cualidades... —dijo una voz aguda que sonaba decidida.
—... ¡Es una chica! —exclamó una voz casi ininteligible.
Fue entonces cuando me aventuré de nuevo a abrir los ojos para ver quiénes murmuraban. No los vi inmediatamente, la luz del sol se estrelló con fuerza en mis ojos, por lo que me cubrí con mi aleta hasta que pude acostumbrarme a ella.
Y cuando lo logré, descubrí a cuatro interesantes pingüinos que me observaban con curiosidad... Y no pude creerlo. Allí delante de mí estaban Skipper, Kowalski, Private y Rico en persona, que parecían tener ganas de hacer miles de preguntas cada uno.
Skipper.- ¡Por fin te has despertado!
Sarah.- S-s-s-sois...
Skipper.- Yo soy Skipper, ellos son Kowalski, Private y Rico.
Sarah.- Vaya... ¿Sois los Pingüinos de Madagascar...?
Skipper.- ¿Los Pingüinos de qué? ¿Cómo sabes eso?
Sarah.-Una serie... En la televisión... Os conozco de...
Skipper.- ¡Oh no chicos han descubierto nuestra tapadera! Kowalski monta guardia, Private recoge todos los documentos importantes y Rico, llena la guarida de explosivos... Y tú... ¿Quién eres? ¿Quién te ha enviado y para qué? —dijo poniéndome una aleta en el cuello.
Sarah.- Yo... No...
Kowalski.- Ejem... Skipper, no creo que sea peligrosa.
Skipper.- ¿Ah sí? Puede que no lo parezca, pero ya he visto esto antes y ya no me engaña nadie.
Kowalski.- Cree cuando te digo que no la envió nadie, no puede ser peligrosa Skipper, la pobre está desorientada, ¡mírala! Ni siquiera la has dado ocasión de decir quién es.
Skipper.- Está bien, te creeré, Kowalski —dijo después de mirarme desconfiado y desafiante—. Pero que conste, si es una espía la culpa será tuya. ¿Quién eres? —me dijo en un tono más delicado.
Sarah.- Me llamo Sarah. Y no soy espía... Ni siquiera sé quién me ha traído hasta aquí ni por qué... No sé por qué estoy aquí, ni si esto es realidad, ni por qué soy un pingüino...
Kowalski.- Puede que se deba a algún tipo de golpe en la cabeza que te hayas dado y por ello hayas desarrollado amnesia —dijo bajando el tono de voz al ver que sus compañeros le miraban de forma extraña—. Vaya, explicado en voz alta me parece bastante fuerte...
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Uɴᴀ ꜱᴇɢᴜɴᴅᴀ ᴏᴘᴏʀᴛᴜɴɪᴅᴀᴅ ᴘᴀʀᴀ ʟᴀ ᴠɪᴅᴀ 1 「Los pingüinos de Madagascar」
Hayran Kurgu❛Sarah, joven científica que mira todo con su lado racional, se designa como una chica diferente. No obstante, algo inesperado pasará que le hará despertar su lado más animal❜ Esta pequeña historia, desde que la escribí, ha sido algo muy espec...