Tomar el arma entre sus manos fue más fácil que observar los labios resecos del chico temblar por el increíble miedo que su sola presencia le provocaba. Estos trabajos se hacían más sencillos cada vez, pero eso no significaba que estuviera acostumbrado a ellos. Bang YongGuk no solía ser esta clase de persona.—Dime donde dejaste el dinero, YoungJae. —Preguntó por casi milésima vez, recargando a su fiel compañera con las mejores balas del mercado—. No es necesario llegar a estos extremos...no quiero matarte.
—Pues parece que tendrás que hacerlo. —YoungJae sonrió, escupiendo la sangre acumulada en su boca hacia los pies del que arrebataría su vida pronto, manchando sus caros zapatos antes de esbozar una sonrisa de satisfacción nada acorde a su situación, que esperaba ocultar su nerviosismo—. Soy una maldita tumba.
YongGuk suspiró cansino y observó al chico frente a él a los ojos por primera vez. Era triste saber que alguien tan joven desperdició su corta vida en un mundo como aquel, en busca de un poder que solo unos pocos llegarían a conseguir.
—Una oportunidad, YoungJae... —El verdugo posó el cañón en su frente, como advertencia. YoungJae se encogió de hombros sin emitir sonido, desafiando al hombre con su mirada hasta en su último segundo de vida—. Pues es una lástima...
Aquellas fueron las últimas palabras que Yoo YoungJae escuchó antes de que ese hombre acabara con su vida.
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Nací el 4, así que solo de mafia, este es el porqué de este Drabble :v (cofcofLo que cayó como anillo al dedo después de Skydive cofcof)