Capítulo 16

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3/3:

—¿Qué? ¿Cómo?

—Sí hombre, no ha venido, traté de llamarla, pero nunca contestó

—¿Fuiste a su casa?

—No, porque no conozco

—Rayos

El resto del día Bruno pasó angustiado, ya que sólo pensaba en ________ y en qué pudo haberle pasado. El último timbre sonó al fin, Bruno arrugó su cara y salió disparado hacia afuera. Corrió en cuatro patas, evitando las miradas de asombro de la gente. Llegó a la casa de su amiga y tocó la puerta. Al cabo de unos minutos salió una chica castaña, piel blanca, ojos oscuros, cabello lacio y labios finos; era parecida a ______, por lo que Bruno dedujo que esta chica probablemente era su hermana.

—Hola... ehhh...—el moreno metió sus manos en los bolsillos de su pantalón y miró a ambos lados—, ¿se encuentra _______?

—Ella no quiere ver a nadie —dijo aquella chica con toda la seriedad del mundo

—Pero... —no pudo seguir hablando ya que la castaña le cerró la puerta, suspiró rodando los ojos y volvió a golpear la puerta, en seguida esta se abrió nuevamente

—Te dije que no quiere ver a nadie —antes de que pudiera cerrarle la puerta de nuevo, Bruno la detuvo

—Sólo quiero ver cómo está

—Ella está bien, vete

—Por favor

—No —la chica usó todas sus fuerzas y logró cerrar la puerta

El moreno soltó un gruñido y cruzó los brazos mientras pensaba en qué hacer. Se le ocurrió una gran idea, trepó hasta el techo de la casa y caminó con cuidado hasta la habitación de ______.

Llegó a la ventana y acercó su rostro a esta mientras usaba sus manos como binoculares, efectivamente _______ se encontraba en su cama, dándole la espalda y cubierta con las cobijas hasta los hombros, cada cierto tiempo soltaba un sollozo. No había duda de que la chica estaba llorando, otra vez.

Torció sus labios y se adentró en la habitación, sin hacer ruido alguno para no despertarla. Caminó sigilosamente y se sentó con cuidado en la cama.

—________... —dijo tocándole el hombro, ella chilló y cayó al suelo—. Cuidado te caes

—¡Bruno! —gritó enfadada y el lo miró desde la cama sonriendo

—Perdóname —rió y le extendió su mano para ayudarla a levantarse

—¿Cómo entraste? —dijo ______ sentándose en la cama

—Por la ventana —respondió sentándose a su lado

—Ah... — no dijo nada más y lo abrazó sin avisar

—¿Por qué no has ido al colegio?

—No quise

—¿Por?

—Uno: no tenía ganas, dos: odio con mi vida ese lugar

—Pero te vas a atrasar

—Últimamente me vale todo, Bruno, no me interesa el colegio

—No debería ser así

—¡Mírame Bruno! ¡¿Crees que después de haber perdido a mi familia voy a estar bien como si nada?! —la castaña se paró delante de él—. ¡¿Crees que voy a seguir tolerando que me digan huérfana?! ¡¿Crees que voy a estar como si nada sabiendo que al llegar a casa encontraré a mi hermana llorando en esta casa tan sola y enorme?! ¡¿Crees que el dolor será pasajero?! ¡No! —gritó y se sentó en la cama con la cabeza gacha

Entre mis garras (Bruno Mars)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora