Eres todo para mi

Parte 5

A la mañana siguiente se levantó muy temprano, instaló sus cosas en el gran closet. Empezó a recorrer la habitación. El gran baño la dejó sin habla.

-¡Diablos! ¡Esta gente vive en el paraíso!-dijo Sakura emocionada al ver tanto lujo.

Inmediatamente se desvistió y se adentro en la gran bañera. Nada mejor que un baño de espuma. Justo cuando estaba por relajarse Karin entro sin tocar, gritó de alegría, abalanzándose sobre Sakura quien se encontraba sentada en la bañera tapándose sus pechos con sus manos.

-¡Karin! ¡Por un demonio, deja esa maldita costumbre! -exclamó mientras alejaba a Karin de su abrazo.

-¡Lo siento, es que estoy tan emocionada de verte después de tantos años!-dijo con nostalgia caminando hasta el lavamanos.

-Si, pero no debes entrar así cuando alguien se da un baño- regañó Sakura.

- ¡Lo siento! De verdad, me alegra que vinieras - respondió mientras le dedicaba una sonrisa y salía del lugar.

Sakura resopló, había olvidado cómo era su hermana, al mismo tiempo sonreía. Tambien le agradaba volver a verla, pero un sentimiento de culpa comenzó a rodearla.

Se puso un vestido de color verde pálido con un escote en V. Su cabello lo dejo suelto y se dispuso a bajar al comedor. Admiraba los cuadros de pintores famosos y jarrones de cerámica con colores brillantes. Al ver por la ventana se dio cuenta que Karin y Sasuke se encontraban en el jardín, conversando cariñosamente.

Karin llena de alegría y sonriendo como nunca lo había hecho, Sakura quiso ir a saludarlos pero una mano toco su hombro, se dio vuelta,y se encontró con un hombre muy apuesto. Con el cabello recogido en una coleta y una sonrisa cálida.

-Debes ser nuestra huésped, como era tú nombre...- se pregunto pensativo- Ah si, Sakura ¿verdad?-dijo el hombre de unos 28 años con voz suave.

-S-Si...mucho gusto-respondió Sakura tendiendole la mano.

-Itachi, igualmente -dijo besando la mano de Sakura.

La pelirosa se sonrojo al ver que Itachi le sonreía de una manera coqueta.

-Que tengas un buen dia, nos vemos en la noche-con un guiño de ojo se alejó por la puerta principal.

-Que acaba de pasar-se dijo para sí misma mientras se acariciaba la zona donde había besado Itachi. Ese hombre transmitía las mismas sensaciones que Sasuke en todo su cuerpo pero con una diferencia: Sasuke hacía que todo dentro de ella se removiera sin control, dejándola vulnerable ante su presencia. 

-Srta. Sakura, la Sra. Karin pide que se dirija hasta el jardín para que desayunen juntas -dijo una de las empleadas.

-Claro, enseguida voy-respondió saliendo hasta el jardín.

Karin la esperaba en una mesa tomando una taza de café.

-Buenos días- saludó Sakura sentándose frente a su hermana.

-Buen dia, y ¿cómo dormiste? Supongo que bien-dijo Karin alegre.

- Si, ¿ Y Sasuke? -preguntó Sakura sorbiendo un poco de jugo de naranja.

-  Ultimamente a tenido mucho trabajo y no ha tenido tiempo de estar conmigo pero los pequeños minutos que me dedica, me hacen feliz -respondió con una sonrisa.

-Ya veo, es un hombre muy ocupado pero tranquila después de la boda lo tendrás para ti todo el tiempo-Sakura trato de consolarla. Tenía que apoyarla y dejar atrás esos extraños sentimientos que florecían en su interior.

-Si, tienes razón, mejor vayamos de compras-dijo Karin muy entusiasmada.

-Pero...-Sakura se iba a oponer pero Karin la interrumpio.

-No te preocupes por el dinero, vamos Sakura, complace a tu única hermana-dijo Karin haciendo pucheros como si de una niña se tratara.
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Sasuke se encontraba en su oficina concentrado en su trabajo de pronto entró Itachi, haciendo que Sasuke se exaltara.

-¿Qué diablos haces aquí?- preguntó muy cansado, echandose para atrás de su silla movible.

-Solo queria saludar a mi hermano, ya que no te veo a menudo ¿Está eso mal?-gesticulo Itachi.

-Deja de decir estupideces, dime que quieres- preguntó sin rodeos. Conocía demasiado a su hermano.