Sakura Haruno, una mujer capaz de todo, decidida y con una hermana por la cual pondría las manos en el fuego.
Karin su hermana mayor se casara con un empresario muy importante, Sasuke Uchiha.
Un amor prohibido y apasionado nacerá entre la tormenta...
Ese día se quedaría en la memoria de Sakura y en la de Sasuke. Llegando así hasta la situación en la que ahora se encuentra la pelirosa.
-Sakura, debes cuidarte mas-le reprocho Ino al enterarse del altercado que tuvo con su jefe.
-Lo siento pero Lee tiene la capacidad de hacerme perder la paciencia en un segundo-respondió Sakura
Ino le sirvió una taza de te caliente, mientras acomodaba los pies hinchados de la pelirosa sobre una almohadilla.
-Porque no te tomas un descanso, ya estas a dos 3 meses de dar a luz, es lo mejor-insistio Ino
-Ni lo pienses, ahora mas que nunca necesito el dinero para mantener a este niño que muy pronto estará conmigo-dijo acariciando su vientre de 7 meses.
-No tienes porque sobre esforzarte, entiendo eso pero....-Ino hizo una pausa escogiendo las palabras adecuadas para no revivir la herida de hace meses atrás.-Sasuke debería...-fue inmediatamente interrumpida por Sakura quien se encontraba mas furiosa que antes.
-¡Te dije que no nombraras a ese idiota!-grito Sakura acomodándose en el sofá.
-Pero no puedes esconderle la verdad por siempre..-recalco Ino aconsejándola.-El se enterara de esto y lo sabes, las mentiras tienen patas muy cortas...-Sin mas Ino se dirigió de nuevo hasta la cocina.
-Lo se-dijo Sakura en un susurro. No quería hablar del tema porque recordarlo era doloroso, se había entregado en cuerpo y alma a alguien que a primera vista la dejó sin aliento, la sedujo con una sonrisa y una mirada. Aquel cuento de hadas se esfumo en un segundo, esa historia no tendría un final feliz, después de todo era un amor prohibido.
- Aun no entiendo como le harás para ir a la boda de Karin- Ino estaba realmente preocupada por su amiga.-considerando ese enorme vientre...
-No iré-Sakura respondió firmemente.
-Sakura! Es tu hermana! No puedes dejarla sola el día de su boda!-Ino seguía sermoneando a Sakura.
La fecha de la boda había sido pospuesta hasta nuevo aviso, Karin no soportaba la idea de no tener a su hermana en el día más importante de su vida, entonces extendió la fecha hasta que pudiera sentirse mejor, dado que Sakura le había dicho que tuvo un accidente de auto y se encontraba arn rehabilitación. Pero no fue exactamente lo que pasó...
-Cariño ¿me pasas la cartera que está encima de la mesa?-dijo Karin mientras se ponía sus pendientes brillantes y caros frente al espejo.
La empresa Uchiha celebraba su aniversario 10, Sasuke como el presidente de la empresa tenia que estar ahí junto con Karin su futura esposa.
- ¿Eh?-
- ¿Que pasa Sasuke? haz estado muy distraído-replico Karin al notar que el pelinegro miraba hacia la nada.
-Es solo cansancio...-dijo dándole la cartera.-Me adelantare a la oficina, tengo que supervisar los últimos contratos para enviarlos a los Ángeles hoy mismo.-dicho esto salio de la habitación con su chaqueta en mano.
-Bueno...-Karin se quedo callada al ver que la puerta se cerraba y Sasuke ni siquiera se había despedido con un beso, como acostumbraba a hacerlo.
- ¿Qué está pasando? - se preguntó a sí misma mientras se sentaba en el borde de su cama
Sasuke conducía su auto con una velocidad impresionante, su cabello revoloteaba con el viento.
Su mirada fija al frente mientras sonaba la radio, de repente frunció el ceño y apretó las manos sobre el volante. No podia olvidar aquel día, donde su corazón experimento un torbellino de sentimientos que ahora lo estaban matando por dentro.
-Que rayos...-dijo al notar que algo resbalaba por sus mejillas.
¿ACASO ERAN....LÁGRIMAS?
Quito una mano del volante para ponerla sobre su pecho, como si quisiera arrancárselo de un solo tirón.
Sasuke era de esos hombres que se veían intimidantes por fuera pero en realidad poseía nobleza y amabilidad en su interior. Había pasado mucho tiempo desde que sus ojos derramaron lágrimas.
-¡Maldición!-maldijo entre dientes lleno de enojo.
En unas semanas sería la boda de su hermana, y Sakura no tenia las agallas de llamarla para cancelar su asistencia.
-No sé como enfrentarla, no puedo después de lo que paso...-Sakura resoplo mientras veía la televisión desde el sillón, acariciando su vientre.
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