El Juego De Olvidar

No te alejes rival... no desaparescas amigo mio.

*Marinette*
Ladybug aun seguía peleando, no encontraba donde poder usar esa pulsera que su Lucky Charm le había otorgado, se detuvo arriba de un edificio y de su yo-yo salieron múltiples mariposas blancas

*Pi Pi* ese sonido alarmaba a la peliazul, la cual quedó de rodillas y su transformación acabó dejando ver a Marinette muy cansada pero aun conservaba esa pulsera que aun seguía sin saber para que era.

*Adrien*
Chat Noir lanzaba su bugmeran el cual atrapaba los akumas y los purificaba, Chat observo como Volpina tocaba una combinación de notas y de su flauta salia una esfera de color rosa la cual, servía como imán para los akumas.

– ¡Chat! – él mencionado volteó y miró a Marinette rodeada de personas akumatizadas – ¡Chat! ¡Ayudame! ¡Mi transformación se acabo! – Marinette pataleaba para soltarse y entre sus golpes rompía los objetos akumatizados.

– ¡Marinette! – Chat lanzo su bugmeran y atrapo los akumas que Marinette había liberado del objeto, Chat corrió a auxiliar a la chica y la cargó en su espalda y siguió peleando.

*Laila*
La flauta lanzaba ataques múltiples, y cuándo salían los akumas una esfera color rosa las atraía y las encerraba en su interior.

– ¿Porque Hawckmoth haría esto? – Laila esquivaba ataques y purificaba akumas al mismo tiempo.

Un temblor hizo caer a la chica y al instante, una grieta se abrió bajo sus pies y la hizo caer de nuevo dentro de la grieta, del subsuelo salieron enredaderas las cuales atraparon a Volpina y la fueron apretando lentamente, Volppe salio del miraclous y miraba aterrado como su portadora seria asesinada a sangra fría. El coraje lleno a Volppe y en un instante, se transformo en Valentín el cual desenvainó su espada y corto las ramas para liberar a Laila, Laila estaba inconsciente y fue callendo al vacío, Valentín la atrapó y la dejo en el suelo pero un dolor agudo sintió en su pecho.

Laila despertó y sus ojos se quedaron sin vida al ver como Valentín había sido atravesado  por una lanza de madera.

– ¡Valentín esta muerto! – grito un akumatizado soltando carcajadas.

– Va-valentín... ¡No! – grito Laila al tener al cuerpo de Valentín en su regazo y la sangre impregnándose en su ropa.

Una oleada de catarinas rosas purifico a todos los akumas, otea oleada de catarinas rojas reparo los destrozos, pero no regreso a la vida a Valentín.