Doctor Kim

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- Se siente tan bien... - sonrió mientras inhalaba profundamente.

- Sí.

- Gracias por la bebida - alzó la lata.

- No hay de que... Más bien gracias por la compañía.

- Prometí no dejarte solo...

- Bueno... No lo olvidaste.

- Por si no recuerdas... Tengo una buena memoria - bebió - Como si eso pudiera ser posible, no encontrarían en el mundo a un chico tan talentoso, buen mozo y con tan buen sentido de la moda... como yo.

Intentó imitar mi voz e hizo un gesto al decirlo.

- ¿Quién dijo eso? ¿Young Bae? - arqueé la ceja.

- comenzó a reír - Tú, ¿quién más podría decirlo?

- ¡¿Yo?! - abrí los ojos como platillos y me señalé.

- Sí...

- ¿Qué más dije?

- sonrió - Tú tienes cabello castaño y ondulado, ojos redondos y creo que nunca te he visto sonreír o reír de verdad... Y eres cruel.

Seguía intentando imitar mi voz...

- ¡Yah! No lo dije así...

- Cómo que no... Lo dijiste así... Aquella vez no dejabas de compararme con Kiko...

- ¿En serio? Bueno ahora que te he visto bien... Tus ojos son lindos... - murmuré.

- Ahh... Y ¿Sigues pensando que soy cruel?

Giré a mirarla y al darse cuenta ella hizo lo mismo... Estábamos mirándonos fijamente.

- Para nada

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- Para nada... Ahora pienso diferente - sonreí.

- ¿Qué es lo que piensas ahora?

- Que eres la mujer más fascinante y que para nada me mima.

Tenía su mirada fija y atenta en mi... No eran necesarias las palabras para demostrarle lo que siento... Ella Ya lo sabe.

Estaba acercándome para besarla, pero el ruido de su teléfono lo arruinó.

- ¿Leonard?... ¿En,en serio?... Salí a comprar... Está bien.

Guardó su celular.

- Lo siento... Debo irme - sonrió - Gracias.

Iba a detenerla, pero no pude... Es mejor dejarlo así... No quiero presionarla más en esta situación...

- Solo es cuestión de tiempo - sonreí apoyado en la baranda del puente.

Hoy no iría al mismo departamento... La sola idea de que Leonard este ahí me mata.
Estaba caminando, decidí fumar mientras seguía los pasos hacia aquel parque donde comenzó todo...

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