Familia Salvaje

Capítulo XI

Como de costumbre, mientras su madre iba al colegio, Davina se quedaba con su abuelo a que le enseñara a perfeccionar su inglés.

Mientras tanto Malia dudaba entre dejar a su hija salir o no.
Se encontró con Scott en el pasillo. Cruzaron miradas por unos segundos y luego Malia siguió caminando. Pero no pudo alejarse mucho ya que se dio vuelta rápidamente y fue a buscarlo.

—Scott, tengo que hablar con vos.
—Okay, habla.
—Acá no, en un lugar más privado.
—En la biblioteca? Tengo que ir de todas formas a buscar unos libros.
—Está bien.

Ambos se dirigieron a la biblioteca. Cuando llegaron Scott agarró un libro de física y luego se sentó en una mesa junto a Malia.

—Que me querés decir?

—Es sobre Davina. Creo que tenés razón, tiene que salir. Me parece que está lista, ya sabe bastante. Y quiero decirle a la pack sobre ella, quizás Lydia pueda ayudarla con matemáticas.

Scott sonrío—Me alegra que confíes en ellos.

—Igual no pienso decirles que Theo es el padre. Es demasiado vergonzoso.

—No, no fue tu culpa. No sabías quién era.

—Gracias por intentar hacerme sentir mejor.

—Para eso estoy.

—Bueno. Mañana se las presento. Espero que reaccionen bien.

—Seguro que sí. Vamos?

—Vamos.

Ambos salieron de la biblioteca. Y de la pared que se encontraba al lado de la mesa en la que estaban sentados, salió Corey, el chico camaleón, que había escuchado toda la conversación y se dirigía a contárselo a su líder, Theo.