Último capítulo

618 60 20
                                    

Maratón 2/2

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Maratón 2/2

∽Final de la primera temporada.

∽∽∽∽∽∽∽∽

—¡Hija vamos! ¡Arriba! ¡Hoy es el día del juicio! —gritó mi madre desde la planta baja.

—¡Voy! —dije con voz ronca.

Me levanté de la cama con mucha pesadez, ¿lo bueno? He vuelto a casa y tengo a mi familia y amigos y amigas conmigo, ¿lo malo? He perdido al amor de mi vida.

Me dirigí al armario y eligí una falda de vuelo que llega hasta el ombligo y por encima de la rodilla, una blusa blanca que meto por dentro de la falda y unos tacones de plataforma negros. Me metí en el baño a ducharme y cuando terminé me sequé el cabello, lo cepillé y me maquillé con un poco de rímel, eyeliner y brillo de labios. Me miré en el espejo y sonreí satisfecha.
Bajé y mis padres ya me estaban esperando para irnos, les sonreí de forma tranquilizadora y nos dirigimos a la puerta.
Después de unos minutos llegamos al juzgado. Entramos a la sala, donde se encontraban guardias, testigos, mi abogado y el de Ji Ho.
Me senté en mi sitio, mis padres por detrás y entonces se abrió la puerta. Ji Ho entró con un mono de preso gris, esposado y agarrado de ambos brazos por dos guardias. En sus ojos se notaba el dolor y la tristeza, me partía verlo así.
El juez entró y se sentó y su sitio.

—¡Orden en la sala! ¡El juicio va a dar comienzo! —dijo dando tres golpes con el mazo— muy bien, señor Lee, ¿qué tiene que decir de la señorita Hara?

—Buenos días su señoría. Me gustaría decirle que, con lo poco que ha puesto de su parte la señorita Kim, ya que es un tema un tanto delicado para una chica de 16 años, he llegado a la conclusión de que ella puede tener algún tipo de trauma por así decirlo. Lo que el señor Woo ha hecho con Hara y con un incontable número de chicas más, de las cuales, si mal no recuerdo, solo se han podido encontrar a tres de las cuales una está internada en un psiquiátrico, es imperdonable. Ya va siendo hora de que pongamos los pies sobre la tierra y encerremos a este impresentable por todo el daño causado.

La gente que está presente en la sala empieza a dar voces apoyando a mi abogado y entonces el juez manda a callar.

—Señor Kim, ¿algo que decir de su cliente?

—No —contestó el abogado de Ji Ho, el wue se había mantenido callado y con la mirada en el suelo.

—Muy bien, pues sin más que decir, condeno al señor Woo a quince años en prisión e impongo una fiamza de 300.000.000₩. Pueden retirarse.

Mis padres se levantaron, vinieron hacia mí y me abrazaron.

—Muchas gracias por sus servicios señor Lee, ha sido de gran ayuda —agradeció mi padre.

—No hay de que, y aconsejo que lleven a su hija a un psicólogo, no le vendría mal —dijo mientras metía una carpeta en su maletín.

—Lo haré.

Me di la vuelta y clavé mis ojos en los de Ji Ho.
Él y yo nos miramos por última vez y me sonrió de forma dulce, sin mostrar los dientes, una lagrima se escapó de mi ojo, pero la quité rápidamente. Vi como los guardias que trajeron a Ji Ho se lo llevaron de la misma manera, y antes de salir por la puerta miró para atrás y volvió a sonreirme diciendo un "te amo" que sólo nosotros dos percibimos, entonces las dos puertas grandes de madera se cerraron, y así es como dejé ir a lo más preciado que tenía.

[...]

Ya ha pasado una semana desde que vi a Ji Ho por última vez, había vuelto al Instituto y había sido muy bien recibida por todos, estaba yendo al psicólogo y mis padres intentaban estar conmigo el mayor tiempo posible que su trabajo les permitía.

Narra Ji Ho

Lo siento mucho mi querida Hara, prometo que nos volveremos a ver, lo prometo, te amo...

Narra Hara.

Venga, vamos a ello.

—Mamá, ¿puedo hablar contigo un momento? —pregunté indicándole que se sentara a mi lado.

—Claro que sí mi vida, dime.

—Verás... Es que no es un tema fácil...

—Vamos cariño, sueltalo.

—Ji Ho, el chico que me secuestró, y yo estábamos saliendo[...]

Y le conté todo lo que me había pasado.

—Ay cariño —me abraza— ya no podemos hacer nada, lo sabes, ¿verdad?

—Sí.

—Pero no te preocupes, porque hay más chicos ahí fuera, esperando.

Yo solo le amo a él mamá.

Le sonreí de forma tranquilizadora a mi madre y fui a mi cuarto diciéndole que iba a hacer deberes.

Y así es como pasaron los días, iba al insti y no había día en que no mirase al pupitre que tengo al lado, donde se sentaba Ji Ho, o mirando con impaciencia a la puerta para que entrase por ella y dijera su frase típica "lo siento, el autobús se ha retrasado". Lo echo mucho de menos... Te amo Woo Ji Ho...

I'm in love with a killer ︴ZicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora