La semana pasada para Ginny había sido intensa y lenta. La expectativa por el partido contra Slytherin y la ansiedad por saber cual era el contenido del regalo que Harry le había dado habían hecho que cada segundo pareciera una hora. El sábado, había pasado algo inesperado que hizo que esta semana pasara volando para la pelirroja. Su novio y su hermano habían aparecido de imprevisto en el campo de Quidditch del colegio para ver la práctica a del equipo y se habían quedado hasta la noche compartiendo con ellas.
Había llegado el sábado del partido. El equipo de Gryffindor jugaría el partido más importante de la temporada, si ganaban tenían todas las posibilidades de hacerse con la copa. Ginny no quería por ningún motivo dejar que eso pasara. En los últimos años Gryffindor, con Harry a la cabeza, había ganado la copa y ella no se podía quedar atrás.
Harry, había enviado una carta con Horus diciéndole a Ginny que debía llevar el regalo al camerino del estadio y una vez terminado el partido fuera cual fuera el resultado lo abriera. También le había advertido que si no ganaba se perdería de otra sorpresa que le tenia para cuando en una semana, viniera de vacaciones.
- ¿Estas lista Gin? - SI Herms ¿podrías llevar el regalo de Harry y tenerlo tu? No quiero perderlo - Claro Gin y tal como te dijo en la carta te lo pasare al finalizar el partido en el camerino, ahora a ganar - Decía Hermione mientras salían de la sala común camino al estadio. Ginny y ella habían decidido tomar el desayuno en su sala común para que la pelirroja estuviera mas relajada. Kreacher les había llevado un delicioso desayuno con zumo de calabaza que se había convertido en el favorito de la pelirroja pues le recordaba a Harry.
- Ginny ya estábamos preocupados - dijo Dean Thomas cuando la pelirroja entró al camerino ya vestida con el uniforme del equipo y con su Saeta de Fuego en la mano. - No te vimos en el desayuno pensamos que te había pasado algo o que te había tocado irte de nuevo - agregó con un tono que no le gustó mucho a Ginny.
- Solo decidí tomar el desayuno en la sala común con Hermione para estar mas relajada, le pedí a Kreacher el elfo de Harry que nos llevara desayuno - Ginny pensaba que con recordarle a Dean que ella era en todo sentido de Harry, este dejaría de usar ese tono de reclamo que se le salia aveces.
Hermione se había ido a tomar asiento en la tribuna junto a los demás estudiantes de Gryffindor, cuando llego a su lugar, notó que casi todo el estadio miraba hacia la tribuna principal donde se encontraban todos los profesores y algunos invitados. La chica comenzó a recorrer la tribuna con la vista para tratar de identificar que o a quien miraban. - Profesor Flitwick, Profesor Slughorn, Profesora McGonagall, Hagrid, una mujer que he visto en algún lado hablando sonriente con Harry y Ron.............. ¡UN MOMENTO! - Hermione se levantó estupefacta, varios compañeros de Gryffindor se reían de la reacción de la chica que había contado en voz baja los profesores y por ende, había dicho el nombre de Harry y Ron en un tono que los que estaban cerca habían escuchado y se habían aturdido por el grito con el que termino la frase. En ese momento un patronus en forma de Jack Rusell Terrier apareció frente a la chica y con la voz de Ron decía - Amor, les queríamos dar una sorpresa, ¿quieres venir para acá? La profesora McGonagall te autorizó, o ¿voy a donde tu estas? Harry no puede ir, trajo compañía - Hermione levantó la mirada y vio como Ron la miraba fijamente desde la tribuna principal con una sonrisa en el rostro. ¿Como podía una simple sonrisa de aquel chico crear esa sensación de paz y tranquilidad que la inundaba?. La chica contempló por unos segundos a su novio hasta que este le hizo señas con el dedo como queriéndole decir ¿Voy o vienes? y la hizo reaccionar, hizo un patronus y le dijo que en un momento iba para allá. Los estudiantes alrededor de Hermione todos de Gryffindor estaban anonadados de las habilidades de su compañera y de su novio, hacer el Expecto Patronun era una de las cosas mas complicadas de la magia, hacerlo corpóreo era 100 veces más pero hacerlo hablar y enviar un mensaje, eso si que era increíble y ellos acababan de ver como los dos chicos lo hacían si ninguna dificultad, como si fuera lo más común del mundo.
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Harry Potter, viviendo tras la guerra.
FanfictionDesde mis once años, cosa que paso hace bastante tiempo, he sido lector y aficionado de las historias de Harry Potter escritas por nuestra querida, J.K. Rowling y así como asistí durante una década fielmente al cine y me moleste con algunas adaptaci...