Vamos por esos 700 seguidores chicas <3 nos queda muy poquito ((;
Capítulo 30.
Te extrañé mucho.
Hace dos años.
15 años.
La parada de autobús tiene un pequeño techo de metal a punto de desmoronarse sobre nuestras cabezas, y de los dos tristes y deplorables asientos que tiene, uno de ellos tiene un agujero al centro. Jamie y yo decidimos dejarle el de "mejor estado" a una señora de mayor edad que traía unas bolsas de supermercado con ella, mientras nosotras nos estrujábamos para caber debajo de la diminuta sombra que proyectaba el techo.
— ¿A qué hora dijo que llegaba el bus?— Jamie se da aire con la mano, en tanto tapa el sol con la otra, y resopla—. No entiendo por qué teníamos que venir a buscarlo nosotras, ¿Es que no tiene padres con un auto equipado de un bendito aire acondicionado?
—Me dijo que ellos no podían — suspiro y saco una botella de agua de mi bolso —. No deberían tardar, quizás se atrasaron al salir — calmo a Jamie y bebo de mi agua —. ¿Quieres un poco?
Ella niega con la cabeza y se seca el sudor de la frente. Me acomodo el vestido de verano de color lila y sacudo el polvo de la falda. La parada debe ser más antigua que la señora sentada a nuestro lado y está llena de hojas secas, polvo y telarañas, no sé por qué un bus de campamento tiene que hacer la parada aquí, habiendo muchas en mejor estado y con más espacio.
Después de que Lucas partiera a la Universidad, Nicholas se inscribió a un campamento de verano por todas las vacaciones — no sé si por la tristeza o porque solo quería un cambio de aires— eso significó que por tres largos meses Jamie y yo estuviéramos totalmente solas. Nicholas nos llamaba todos los domingos, porque era el día que los dejaban usar el celular, pero aparte de las llamadas no hemos tenido nuevas noticias. Casi lo mismo ha ocurrido con Lucas, solo que él llama únicamente a Jamie... yo no puedo responderle siquiera un hola sin atragantarme como una idiota, desde el beso las cosas han estado un poco tensas entre nosotros.
El verano con Jamie me ha servido mucho para cambiar mi autoestima, el tiempo entre chicas es muy placentero cuando tienes una amiga como la mía, sobre todo si te alientan a usar vestidos cortos de verano como el que estoy usando ahora mismo. He cambiado mucho y siempre que veo mi nuevo reflejo pienso en Lucas, pienso en lo que diría, cómo se comportaría y sus reacciones ante mi nueva persona.
—Odio el verano — gime Jamie mientras se hace una cola de caballo—. ¡Oh, mira! ¡Ahí viene el bus! — apunta entusiasmada hacia el final de la calle.
El bus de campamento que se asoma entre los árboles es enorme, de color blanco y gris, tiene escrito a los lados muchos saludos y dibujos de diferentes personas y se puede ver por la ventanas a gente moviéndose como si estuvieran en una fiesta privada. Esto no parece un campamento, es una fiesta.
— ¿Qué clase de lugar es al que fue Nicholas? — Pregunta Jamie con cara de espanto—. ¡Eso es una orgía de adolescentes!... quiero inscribirme para el próximo año.
— ¡Jamie! — grito.
— ¿Qué? — se encoge de hombros —. Nicholas tuvo diversión en ese lugar, y me refiero a... — me guiña un ojo —. Di-ver-sión.
— ¿Y cómo lo sabes?
Jamie me apunta con obviedad una ventana del bus y observo a una chica en sostenes apretando los pechos sobre el vidrio y besándolo al mismo tiempo. Cuando se aparta, el beso queda marcado en rojo sobre el material.
ESTÁS LEYENDO
Enséñame a besar ©
Ficção AdolescenteLeila está emocionada por tener su primera cita, sobre todo si su primera cita es con Jackson Harper, el chico por el que todas, y probablemente algunos todos, babean en la escuela. Pero, cuando la cita está a punto de terminar y por fin se besan...