---Yokozawa---
6 meses han pasado ya...
No puedo entender como el tiempo pasa tan rápido sin saber cómo, apenas ayer tenía a mi bebé en el vientre y ahora lo tengo en mis brazos un poco más grande, sus gestos son idénticos a Zen, en verdad son tan parecidos.
Se nota que es su padre...
Ahora mismo acabo de dejar a mi hermoso Usui en su cuna, en toda la noche se la paso despierto, y como a mí no me tocaba trabajar me la pase arrullándolo para que Zen pudiera descansar.
-Mamá.
-¿Qué ocurre Hiyo?
-¿Después de la escuela puedo quedarme en la casa de mi amiga?
-Claro. –bese su frente.
-Gracias. –me abrazo- Iré a despedirme de mi hermanito.
Hiyo se fue a la habitación de Usui y yo me dirigí al comedor para levantar los platos de la mesa y lavarlos.
Mi niña se despidió de mí y se fue cuan su amiga y la mamá de ella.
Después de hacer un poco de quehacer me quede recostado en el sofá puesto que tenía sueño de que había despertado temprano.
Nunca imagine que tendría una vida así.
Con dos hermosos hijos y un esposo maravilloso.
¿Quién lo hubiera pensado?
Y más cuando yo puedo tener hijo...
Esto es tan extraño.
El timbre de la puerta sonó y me levante a abrir.
-Hola mamá oso. –comento.
-DI gracias que no tengo ganas de golpearte ahora mismo Masamune.
-Takano-san, deja de molestar a Yokozawa.
-Lo siento, -rio- es que hace mucho que no le decía así.
-Pasen.
-Yo debo volver a la editorial, traje a Ritsu porque me lo pidió, quiere que le des consejos de maternidad.
-¿Ah? –cruce los brazos.
-No le hagas caso a Takano-san, solo está bromeando.
-Lo sé. –suspire.
-Bueno dejo a las mamis.
Tanto Ritsu como yo le dimos un golpe a Masamune.
-¿A quién le llamas mami? –gruñimos.
Él soltó una carcajada y acarició el vientre de su amado.
-Cuídate pequeña.
-¿Ya saben que nombre le pondrán? –pregunte.
-Emily.
-Lindo nombre.
-Bueno, cualquier cosa por favor no duden en llamarme.
-Hai.
Masamune se despidió y Ritsu entro al departamento dejando una bolsa llena de postres en la mesa del comedor.
-¿Quieres que preparare un poco de té? –pregunte.
-Por favor.
Mi niño comenzó a llorar.
-Iré a verlo. –comento.
-Gracias.
Puse un poco de té y vi a Ritsu cargando a mi niño.
-No puedo esperar para tener a Emily en mis brazos.
-Te sienta bien la maternidad.
-No bromee Yokozawa-san.
-Solo es un comentario, o mejor dicho un elogio.
-Supongo. –suspiro.
Serví las tazas de té y las coloque en la mesa.
-En verdad se parece tanto a ustedes, aunque sinceramente se parece más a ti. –comento- Es tan lindo.
-¿Acaso me estás diciendo lindo? –reí.
-Y-Yokozawa-san. –se sonrojo.
-Es una broma, -reí- ¿Cuántos meses tienes?
-Ya cumplí los 7 meses.
-Ya casi.
-Me siento Ansioso, -sonrió- incluso mi niña se mueve demasiado, también debe estar ansiosa por salir.
-Los primeros meses y los últimos son los más importantes.
-Ah, -suspiro- es verdad.
Seguimos charlando acerca de su embarazo y de las pautas que me había dado el doctor y que le pudieran servir a él.
En todo el rato Usui se había quedado despierto, parece que lo he acostumbrado mucho a cargarlo que no quiere separarse de mí ni un momento.
Le dije a Ritsu que se fuera a dormir a mi habitación porque se veía cansado.
El timbre volvió a sonar y me levante con mi niño en brazos.
Al abrir la puerta me di cuenta que no había nadie, solo un sobre en la puerta, con mucho cuidado lo levante y lo lleve a la habitación de Hiyo, recosté a mi niño y abrí el sobre.Una imagen de Kioshi que parecía que... atrás de la foto había una pequeña nota.
Si quieres salvarlo tienes que seguir mis instrucciones, ¿te parece? Pero no se te ocurra decirle nada a nadie.
Dejaré un número al cual tendrás que llamar a media noche, y más te vale que llames.
Nos vemos.
Siento un gran dolor en mi pecho.
-Kioshi...
Siento tanto temor, mis piernas comienzan a temblar como todo mi cuerpo.
¿Qué debo hacer?
Mis lágrimas comienzan a salir y no puedo detenerlas.
No quiero que le pase nada a mi hijo, yo me muero si le pasa algo.
Sé que no es mi hijo biológico pero, me encariñe con él.
-Yokozawa, ¿puedo pasar?
Guarde el sobre en mi bolsillo y me limpie las lágrimas.
-Claro.
-¿Pasa algo?
-No.
-Es que escuche algunos sollozos.
-No es nada Ritsu, te lo aseguro.
-Confiaré en ti. –sonrió.
No puedo decirle nada a nadie, no quiero que le haga nada a Kioshi, no me lo perdonaría.
Hare lo que me pide...
A pesar de todo Kioshi es mi hijo...
---Takano---
Al llegar a la editorial comencé a realizar mi trabajo y también el trabajo de mi hermoso castaño, ya que pronto tendrá a nuestra linda niña.
-Takano-san, Eiri no quiere darme el manuscrito. –comento Kisa.
-Pues oblígalo.
-Pero...
-He dicho, si lo dejas que haga lo que quiera se hará irresponsable.
-Hai, hai.
Luego de unas horas Isaka entro acompañado de Asahina.
-Takano quiero que me acompañes.
-¿Qué ocurre?
-Tienes una visita.
Respire profundamente y me levante.
-Sí viene Mao le dicen que aquí están las correcciones. –comente.
-Así será. –dijo Hatori.
Acompañe a Isaka hasta la oficina de juntas. Mientras me contaba de los proyectos que se avecinaban en los próximos meses.
Al llegar a la oficina me dijo que entrará y que cualquier cosa estaría en la suya. Abrí la puerta algo confundido.
-Has tardado.
-¿Señor Onodera?
-Te seré muy franco, -se levantó sacando una chequera- ¿Cuánto quieres por dejar libre a mi hijo?
-¿Perdone?
-Te daré todo el dinero que me pidas.
-No lo haré.
-Te lo dejaré más fácil, -sonrió- te daré a ese bastardito que espera, ¿te parece?
-Váyase a la mierda, -comente furioso- Ritsu es la persona que yo más amo y no la dejaré jamás.
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Destino Incierto (Kirishima x Yokozawa)
أدب الهواة¿Qué pasaría si tanto Takano como Yokozawa no solamente compartieran un gato? ¿Sí fuera un niño que adoptaron cuando eran jóvenes? ¿Qué pensará Kirishima cuando vea a un chico muy pegado a su amado? Cuando Takano y Yokozawa tenían 18 años se encontr...