---Yokozawa---
Me siento tan impotente, no puedo tranquilizar mis nervios, quiero poder resolver las cosas lo mejor posible pero... no quiero que a Kioshi le hagan daño.
Quiero llorar, quiero gritar y sacar este dolor que tengo, es mi hijo, yo...
Debo rescatarlo, si yo fui el que le hizo daño a ese tipo debo liberar a mi hijo, a pesar de todo el mal que hizo Kioshi es muy importante para mí, no puedo dejarlo.
Camine hacía la habitación de nuestro hijo y lo vi durmiendo en la cuna.
-Usui, -acaricie su mejilla- mi hermoso hijo, de haber sabido que tendría que irme y dejarlos, hubiera hecho miles de cosas para hacerlo más felices.
No quiero perderlos...
No quiero dejarlos...
Camine de nuevo a mi cama y me recosté acurrucándome en los brazos de Kirishima.
-Solo por hoy, déjame estar en tus brazos Zen.
-Osito, ¿pasa algo? –bostezo mientras abría los ojos.
-Z-Zen. –murmure.
-¿Tuviste un mal sueño?
No pude más y lo bese.
-Hazme tuyo. –susurre con un sonrojo en mis mejillas.
-¿Eh? –se sorprendió.
-Quiero ser uno contigo.
-Vaya, -sonrió- me encanta cuando mi osito tiene la iniciativa.
-E-Es porque te amo idiota. –me sonroje.
-Lo sé. –tomo mi mentón y me beso.
Lentamente metió su mano bajo mi camisa haciéndome soltar un suspiro.
-Me encanta tus reacciones.
-B-Baka.
-LO sé.
-M-Mañana, -susurre- s-salgamos como familia.
-Es una excelente idea, -sonrió- podemos pasar temprano por Hiyo y salir antes de que entre a la oficina.
-Sí.
Empezó a besar mi cuello dejando algunas marcas en él mientras acariciaba mis pezones.
-Ahhh, -gemí- Z-Zen.
-Estás muy provocativo.
-Ahhh, gemí- te amo.
-No más que yo.
Se colocó arriba de mí quitándome mi ropa hasta dejarme desnudo.
-No me canso de la vista que tengo.
-Cállate. –desvié mi mirada.
-Ese es mi osito gruñón. –beso mi frente.
Empezó a lamer mis pezones mientras comenzaba a acariciar mi miembro. Los chupo y mordisqueó haciendo que no pudiera controlar mis gemidos.
-Ahhh Z-Zen.
-Aquí estás muy animado. –sonrió.
Tomo mi miembro y comenzó a masturbarme. Me beso apasionadamente y luego bajo hasta mis piernas donde lamió la puntita.
-Ahhh. –gemí.
Lo metió a su boca y yo trate de apartarlo.
-E-Espera.
-No lo haré, -me miró con lujuria- quiero darle otro hermanito a nuestros hijos.
-Ahhh n-no e-espera...
Metió un dedo a mi entrada mientras me aferraba a las sabanas.
-B-Baka n-no al mismo tiempo.
-Se ve que lo disfrutas.
-Muérete.
-También te amo.
Sentí otro dedo moverse en mi interior.
-Ahhh n-no más.
Siguió lamiendo mi miembro hasta que no pude más y me corrí en su boca.
-Delicioso, -sonrió- pero aun debo prepararte.
Respire profundamente y lo mire.
-Hazlo.
-¿Eh?
-Mételo por favor.
-Pero aún...
-Te necesito. –susurre.
-No me culpes sino puedes caminar mañana. –coloco la punta de su miembro en mi entrada.
-Te amo Zen.
-Yo también, no sabes cuánto.
Entro de una embestida en mí recargándose en mi cuerpo.
-Ahhhh, -gemí- Z-Zen.
-¿Duele?
Mordí mi labio.
-No, -lo bese- no duele.
-Te amo Takafumi, eres lo más importante para mí, -me abrazo- que haría sin ti.
Mi corazón empieza a latir deprisa, y siento un gran dolor, lo amor, quiero quedarme con él pero...
Me aferre a su espalda cuando comenzó a moverse.
-Z-Zen, -gemí- t-te amo.
-Y yo a ti. –beso mi frente.
Me beso apasionadamente mientras se movía lentamente, haciéndome sentir tantos espasmos de placer.
De un jalón hizo que me colocara arriba de él y comenzó a mover mis caderas de arriba hacia abajo haciendo que fueran más profundas.
-Ahh Z-Zen n-no tan...
-Bésame Takafumi, dime cuánto me amas.
Me recargue en sus hombros y lo besé, él acariciaba mi espalda tocando cada parte de mi piel, prendiéndome con cada caricia.
Quería memorizar cada tacto, cada beso, cada palabra...
Puesto sería la última...
Me tomo de la cintura y empezó a moverme de arriba hacia abajo.
-Ahhh T-Te amo. –gemí.
-Y yo a ti.
-M-Me vengo.
-Y-yo igual. –jadeo- Te llenaré con mi semen para que quedes embarazado de nuevo.
-I-Diota ahhhhh.
Me corrí en nuestros vientres y él dentro de mí.
-Fue muy placentero. –comento.
-Baka.
-¿Otra ronda? –sonrió.
-No, -lo mire- solo quiero dormir en tus brazos.
-Sí mi amor.
Me quede dormido en sus brazos tan cálidos y protectores.
Si pudiera estar con él para siempre...
A la mañana siguiente nos bañamos y cargue a nuestro hijo, salimos de la casa y fuimos por Hiyo a la casa de su amiga.
Al llegar me dijo que si después de dar el paseo podría volver, por lo cual aceptamos.
Fuimos a un restaurante familiar y pedimos un desayuno delicioso.
-Me gusta cuando salimos en familia. –sonrió Hiyo.
-Y yo más. –comento Zen.
-Tengo una linda familia. –comente.
Nuestra convivencia fue la mejor, pero...
El tiempo ose había acabado.
Acompañamos a Zen a su trabajo y pasé a dejar a Hiyo con su amiga. Tuve que pedirle a la mamá de su amiga si cuidaba a Usui por mí, por lo cual acepto.
-¿A dónde vas mamá? –pregunto Hiyo.
-Debo realizar unas compras y Usui apenas se durmió.
-Está bien, yo también lo cuidaré.
-Lo sé.
Abrace fuertemente a Hiyo.
-Te adoro Hija.
-Y yo a ti. –sonrió.
Besé la frente de Usui y me dirigí a la casa. Al llegar tome una maleta y eche la ropa que tenía a la mano, tome mi dinero que guardaba para emergencias y mi pasaporte.
Tome una hoja y una pluma para dejarle una nota a Zen. Me quite mi anillo de compromiso y de matrimonio y los coloque en la mesita con la nota.
Mire el departamento una vez más.
Mis lágrimas comenzaban a caer sin poder detenerlas.
-Lo siento, pero debo salvarlo, cuida de nuestros hijos Zen.
Tome un taxi rumbo al aeropuerto.
Soy lo peor...
Pero...
¿Qué otra cosa puedo hacer?
ESTÁS LEYENDO
Destino Incierto (Kirishima x Yokozawa)
Fanfic¿Qué pasaría si tanto Takano como Yokozawa no solamente compartieran un gato? ¿Sí fuera un niño que adoptaron cuando eran jóvenes? ¿Qué pensará Kirishima cuando vea a un chico muy pegado a su amado? Cuando Takano y Yokozawa tenían 18 años se encontr...