Yo, Él, Ella, Nosotros...

CAP. 8 ¡AL FIN! Parte 2...

Disclaimer: Los personajes le pertenecen a la maravillosa S. Meyer (Qué más quisiera yo que Edward fuera mío, las cosas que le haría jajaja) yo solo me adjudico la historia que espero sea de su agrado...

Por favor UNA DISCULPA MUY GRANDE, pero aquí estoy de vuelta y acabaré las historias así como publicare más, tanto como ustedes me quieran aquí, les quiero un montón y esperemos vernos aquí cada semana a partir de ahora, besos y gracias por no irse. N.S.

Música:

Mientes tan bien – Sin Bandera.

CAP. 8 ¡AL FIN! Parte 2...

Bella abrió sus piernas para poder ponerse a horcajadas pero cuando estuvo en esa posición él se puso de pie y subió directamente a su habitación, no la quería ahí, la quería toda la noche en su habitación, en su cama...

Cuando llego la aventó en la cama haciéndola rebotar y reír, ella alzo las manos sobre su cabeza para alzar una pierna y posarla sobre su pecho, él tomo el delicado pie y lo llevo a sus labios provocando sus risas...

-No eres muy buena con el alcohol ¿No?...

-Ja, ja, ja no, si creo que no, tome mucho esta noche – él alzo una ceja en pregunta...

-No tomaste más que una copa...

-Bueno eso es mucho para mí, cuando tenia 15 tome una sola copa y eso porque estaba con mi padre, él es policía, mmm se me hace que alguien saldrá arrestado por usurpar el honor de su hija – Bella no se daba cuenta de lo que decía, Edward pensaba que era por el momento pero ella estaba en años atrás recordando el pasado y haciéndolo presente...

-Bueno me atendré a las consecuencias...

Empezó a subir por el cuerpo de la chica y dejo un reguero de besos hasta llegar al inicio de sus bragas, poso sus pulgares en ellas y las bajo lentamente hasta dejarlas caer en el piso de la habitación, subió besando su piel desnuda hasta posar su boca en su sexo absorber su aroma mezclado con su excitación, dio una lamida que hizo que ella se revolviera en la cama pero él llevo su mano a su cadera para mantenerla quieta y seguir en su tarea, llevo su otra mano a su entrada para abrir sus labios y disfrutar de ese elixir. Ella se revolvía en la cama y gemía ante las sensaciones que él le provocaba, su lengua no le daba tregua y añadió dos dedos mas expandiéndola piñizcando sus paredes haciéndola ver estrellas y retorcerse en la cama a causa de su orgasmo, lamio todo lo que ella le daba saboreando como un sediento que está en un desierto sin darle tregua. Subió hasta ella para posarse encima sin dejar caer un solo gramo de su peso, tenia su brazo sobre los ojos y respiraba agitadamente...

-Mmm nena no sabes lo hermosa que te ves así...

-Ja, ja, ja supongo que eso le dices a todas pero mientras hagas esas maravillas bien...

-Se hacer cosas mejores nena – y sin previo aviso entro en ella de una dura estocada haciéndola dar un respingo, maldijo en voz alta al ver lo apretada que estaba era como.... Era como estar en casa de nuevo recordar eso días dónde ella estaba, dejo de pensar en eso, en ella más concretamente y se dedico a disfrutar del cuerpo de la bella mujer que tenia debajo de él gimiendo.

Sus envestidas era precisas, rápidas salía en su totalidad para volver a enterrarse en ella...

-Estás tan apretada cariño, envuelve tus piernas en mi cintura – ella lo hizo y él se puso de pie para llevarla con él y ponerse de rodillas sobre la cama, las envestidas eran fuertes y ella gemía pegado a su oído dándole un buen sonido del disfrute que tenia...