Agradable maldición

3K 193 74
                                    

¿Es qué ni el sábado puedo descansar? Bueno que más da. Sé que hoy será un gran día, no como ayer. Sólo de recordar todo lo que pasó me dan ganas de arrancarme el cabello.

Soñé que la señorita Hinata estaba con el maldito albino, iban caminando por el parque tomados de la mano. Qué asco. Yo salí de entre los arbustos para sorprenderlos y encararlos pero sólo se agacharon, ella pellizcó mis mejillas y él despeinó mi cabello. Y sí se agacharon a mi altura porque tenía la apariencia de un niño de 10 años. Maldición. Luego de eso mi sueño fue delicioso, habían tazones de ramen, miles y miles de ellos, caían como gotas de lluvia pero no se rompían, se mantenían a flote para que yo los agarrara. Estaba en la cielo, me bañaba en el caldo del ramen. Veía a miss Hyuga casi desnuda salvo porque en cada pecho tenía un narutomaki y en sus lindas manos sostenía un tazón de ramen que justo cubría su lugar especial, mi objetivo. Desafortunadamente mis sueños ramenezcos fueron esfumados por mi despertador, no me importó. Pues sabía que hoy podía hacer una inspección del terreno, claro hablando de cómo acercarme a la suculenta Hinata.

Me duché rápidamente y me puse el uniforme deportivo. Ya que como hoy sólo hay rango no hay necesidad de que lleve aquella ropa formal. Bajé a desayunar y vi a mis padres besándose.

—Ejem— me "aclaré" la garganta para que notaran mi presencia —¡Ejem!— lo repetí más fuerte porque la primera vez me habían ignorado. Funcionó, se separaron.

—Hola, nene— mi mamá me dio un beso en la mejilla.

—Buenos días, hijo — saludó mi papá con ese tono tan habitual de él. No se inmutaron ni un poco al saber que su hijo ¡Su único hijo estaba viéndolos devorarse la boca del otro!

—¿Qué tal la mañana?— les pregunté para ver si les daba un poco de vergüenza —creo que hoy hay besos de desayuno— miré a mamá y luego a papá.

—Naruto, nosotros también tenemos derecho a amarnos— se defendió ella —y a todo esto ¿a qué hora llegaste a noche? — cambió el tema. Mejor le sigo la corriente, no quiero pelear tan temprano.

—Antes que ustedes. Llegué antes de las 12— levanté los hombros —¿Y ustedes a qué hora?

—Un poco después que tu— ahora habló mi papá ofreciéndome un tazón con cereales y leche.

—Gracias, pa— tomé dicho tazón —por cierto hoy llegaré más tarde. Las clases extra con la señorita Hyuga empiezan hoy.

—Muy bien, nene— mi madre me besó la frente para después tomar su bolso que estaba en la silla de al lado —aprovecha lo más que puedas.

—Sí, hijo— papá puso su mano sobre mi hombro— Ya nos vamos. No llegues tarde— y se fueron.

Terminé mi desayuno y me fui a la academia.

De camino hacia allá encontré a Sasuke-teme y me dijo que no se quedo ayer a la fiesta porque tuvo otro "menester"que atender, éste teme y sus palabras raras, y también porque le dijeron que estaba "ocupado"; me preguntó sobre eso. Le mentí y le dije que había estado bastante "promedio". No le iba a contar que la chica me quería usar como su dildo porque no soy un juguete sexual. Él solo se limitó a preguntarme si así iba a lograr algo con Miss Hyuga. Lo vi con ojos de "eres un maldito", captó el mensaje y mejor seguimos en silencio. Aunque en realidad sí tenía algo de razón, si mi meta es la señorita Hinata, debo enfocarme en la tarea.

En días como hoy me gusta mas ser un Titan que un God o uno de los  casi inexistentes Dual (especialidad en dos áreas) porque así solo me centro en los deportes. Mientras que los God se la pasan corriendo de un lado a otro, para cumplir con sus horarios.

La primera estación fue kickboxing. Hoy "la legendaria" y Shizune nos agotaron. El calentamiento fue brutal, luego trabajamos en tríos: 2 vs 1, claro que cambiábamos de puesto. Mis compañeros fueron Sasuke y Lee, maldito teme, me dio un jab lo conectó perfecto que me hizo sangrar el labio. Lindo, ahora parece que o me volví un buscapleitos o que me mordió una chica. No importa, me las cobre dándole una patada en el costado derecho, en el cual apareció un apreciable hematoma. Sí ya se que fue rudo. Luego para colmo nos hizo quedarnos un rato en la bañera llena de hielo. Se me congeló el trasero y Naruto jr. se hizo piedra, y no en el buen sentido.

Mas tarde tuvimos un pequeño receso para luego ir a natación.

Ésta vez mi bañador era nuevo y no había peligro de quedar expuestos o a merced de la entrenadora Mei. A pesar de eso, hizo una movida y con el pretexto de que vio que al dar las brazadas del lado derecho hacía una ligera torsión, me "revisó". Pasó sus manos por todo mi cuerpo, me dio un masaje en los hombros e hizo que flexionara mis bíceps para comprobar. Era mas que obvio que no encontraría problema alguno. Y saboreo el momento aunque también hay que tener en cuenta que no soy de palo y aquellos movimientos que me hacía me excitaban. Por un momento me pasó por la mente poseerla ahí mismo pero recordé lo que dijo Sasuke: así no lograras nada con Hinata. Debo canalizar mi atención en ella. Como pude escape de las garras de la profesora Terumi para regresar a la práctica. Y cuando tocó el timbre de salida corrí a los vestidores para ponerme mi ropa casual. Y claro no estaba de más algo de colonia.

Salí de la escuela para conseguir un taxi, Neji me vio y se ofreció a llevarme en su auto. Fue en el trayecto en donde me enteré que son primos. No puedo creerlo, de verdad que soy despistado. No importa, puede que él me ayude con su prima.

Llegamos, la señorita Hyuga vive en un departamento que es un piso completo. Es el sexto para ser preciso. Tocamos el timbre y a los poco segundos ella abrió la puerta.

No sé porqué es maestra, debería ser modelo. Hoy estaba tan sexy. Esos jeans azul naval le quedaban tan bien. Una simple blusa blanca de manga corta y con cuello en "V" la hacía verse genial. Unas bonitas sandalias que me permitían ver sus delicados y blanquecinos pies. Hasta sus uñas son perfectas. Y para terminar de darme un infarto por lo linda que era, su cabello, que usualmente esta recogido en peinados altos y complicados, estaba en una coleta baja y caía hacia el frente de su lado izquierdo.

La voz de Neji desinfló mi globo.

—Hinata, aquí esta lo que tu padre envía.

Miss HyugaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora