No es correcto, pero te amo♥

Capítulo 50

Primero quiero decirles algo:
Nunca me imaginé llegar hasta este capítulo, es decir, cuando inicié con la historia pretendía que solo fueran mínimo 30 capítulos pero creo que está dando un giro parcial, que espero entiendan y comprendan, y no me odien tanto, porque yo las amo, ¡Gracias! Y ¡ay! para el pendiente, es como si hubiera leído 192 paginas de word sé que querían saber bueno eso es todo, con permiso♥

(...)

—Tu currÍculum es perfecto, veo que trabajaste en company publicidad, buena empresa, ¿Qué paso?, ¿te corrieron? —preguntó aquel hombre canoso.

—No, motivos personales —respondió él.

—Bueno, no tengo duda en que tu presencia aquí, será lo más favorable, ¿sabes? No hay mucha diferencia con la empresa del señor Will, es similar a lo que se hace aquí, de hecho somos los mismos, somos de la misma rama solo que con otro nombre, pero sus proveedores también surten a esta empresa, Agustín y yo somos buenos amigos, a pesar de ser competencia —dijo con una sonrisa.

—Me alegra escuchar eso, significa que no habrá tanto cambio y que me puedo acoplar más fácilmente.

—Así es Jorge, bueno sin más me queda decirte que bienvenido a tu nuevo hogar.

Él sonrió, se le removieron los recuerdos.

COMPANY PUBLICIDAD 9:00 AM

Silvia estaba revisando documentos y programando las siguientes juntas con el comité, la próxima sería dentro de unos días antes de las fiestas decembrinas. Alguien tocó a su puerta.

—¿Puedo pasar?-dijo Marcelo-

—Adelante —dijo sin mirarlo.

—¿Qué crees? —dijo entusiasmado.

—¿Qué paso?

—Silvia, mírame —tono tímido.

—Perdón, es que tengo mucho, mucho trabajo, ¿Qué paso?

—En este mes las ventas aumentaron un treinta por ciento, a la gente le agradan los productos y las campañas publicitarias que hemos estado haciendo, a las personas les agrada y el comité está muy contento con estos resultados, y en parte es a ti porque has sabido controlar y dirigirnos, gracias.

—No todo el mérito es mío, es de todos sin todos ustedes nada de esto sería posible, gracias a ustedes por ser un muy buen equipo de trabajo.

—¿Cómo estás? —ella bajó su mirada.

—Tranquila me siento bien —mintió.

—Cada día estas más bella, te acuerdas cuando —él tomó su mano —solíamos contarnos todo, cuando éramos la pareja perfecta, cuando me amabas.

—Eso paso hace mucho tiempo, y ya sé por dónde vas y te digo de una vez, una relación es lo que menos quiero por ahora —aleja sus manos.

—No te voy a presionar, te voy a esperar y esta vez no voy a ser tan imbécil, yo no te voy a hacer sufrir nunca más.