No es correcto, pero te amo♥

Capítulo 42

A pesar de haber discutido con Jorge la noche anterior, tenía su conciencia tranquila al fin y al cabo ella no había hecho nada malo, pudo conciliar el sueño, despertó y tomó una ducha. Eligió un pantalón ajustado en color negro y camisa negra sin mangas, un saco en color rosa pastel y sus zapatillas negras con un ligero tacón. Cepilló su cabello y fue a la habitación de su bebé, le dio un beso y lo cobijó. Desayunó fruta con yogurt y algo de jugo, ordenó sus cosas y salió de la casa, rumbo a la oficina.

DEPARTAMENTO DE JORGE 
6:30 AM

A diferencia de Silvia, él no pudo dormir muy bien, le hacía falta ella, y es que ya no podía pasar ningún día sin estar sin ella, pero ni sus acciones ni sus pensamientos le ayudaban, ¿Sería que ya estaba tan dentro de él, que para todo la necesitaba? ¿Por qué dejar pasar a Gerardo? ¿Por qué dejarlo ponerse detrás de ella? ¿Será que se estaba enamorado de él? ¿Por qué no lo detuvo cuando casi le arrancaba el brazo a León? ¿Será que de la emoción de ver al niño en su primer año o que estuvieran ahí los tres juntos como una familia?

Ahí vas otra vez de imbécil Jorge, como siempre. Qué más pruebas quieres, para que te demuestre ella que te ama, imbécil —piensa Jorge.

Todas esas preguntas le rondaban la cabeza mientras se duchaba. Si no le había dirigido la palabra después de la pelea, era para no alterarla ni a la bebé. Y es que por qué seré tan imbécil, se supone que si está conmigo es porque me ama y me lo ha demostrado mil veces, te mereces una disculpa mi amor —piensa angustiado. Salió y se puso su traje en color azul rey y sus zapatos negros relucientes, peinó su cabello hacia arriba y fue a la cocina a desayunar algo.

COMPANY PUBLICIDAD 8:00 AM

Oficina del Señor Will

—¿Qué te dijo específicamente? —pregunto su jefe.

—Que quería que fuera para allá porque hay unos problemas con uno de los proyectos y que me necesitan para resolverlos, pero yo no podía ayer pues era la fiesta de cumpleaños del bebé de Silvia.

—¡Ay si leoncito!, pero bueno eso lo justifica, y ¿ya no te ha hablado?

—No, y es que Danna hablo con él pero no sé qué le dijo.

—No te preocupes, ahora la mando llamar, le pregunto y luego te aviso.

—Si señor gracias, nos vemos —Él salió de la oficina.

Oficina de Silvia 8:35 AM

—¿Le ayudaste a Jorge con los pendientes ayer?

—Algo es que ayer me tuve que ir porque...me sentía mal por eso —respondió Marcelo despreocupado.

—Qué raro ¿no? siempre te sientes mal, si sigues así es mejor que te vayas no queremos gente que no trabaja o que se siente mal "todo" el tiempo.

—No pasará de nuevo, de hecho ahora iré con él para que me diga en que le ayudo, con tu permiso —se retira de ahí. Luego de unos minutos alguien llamó a su puerta.

—Hola, ¿puedo pasar? —tono tímido.

—Sí —respondió cortante y sin mirarlo.

—¿Cómo estás? —la mira algo apenado.

—Bien y ¿tú? —respondió sin dejar de ver su computadora.

—Mal, no puedo estar bien si no te tengo conmigo, me haces falta todo el tiempo —ella lo miró.

—Tú fuiste el que se fue como si nada ayer, me dejaste ahí sola —tono molesto.

—Lo sé mi amor pero ponte en mi lugar un poquito, me mata verte con alguien más y mucho más si es con tu ex pareja.