No es correcto, pero te amo♥

Capítulo 19

Salieron de la oficina y se toparon con varias miradas de parte de los empleados, pero la principal que le preocupaba un poco, fue la de ella sus ojos verdes ya no brillaban, en cambio su mirada estaba llena de furia, si no fuera porque Flor la sostenía de los hombros fuertemente, se habría lanzado hacia ella y hubiera provocado más problemas. 

Lo miró fijamente y ella se acercó.

–Navarro hola, ahora me voy a ir a comer con el Sr. Salinas pero después de eso me gustaría hablar contigo de la empresa claro, ¿tendrás tiempo? –le preguntó amablemente mientras Silvia estaba furiosa. 

No escuché nada después de que dijo que se iría a comer con mi novio –piensa Silvia. 

–Si claro –respondió pero su mirada estaba fija en Jorge. 

–Perfecto bueno las dejamos, ahorita te veo Silvia –se despidió de ambas al igual que Jorge. 

–Con per..con permiso –dijo nervioso sin mirar a Silvia. 

–Provecho –les dijo fríamente y su mirada no dejó de verlos hasta que desaparecieron de su vista pues ya habían entrado al ascensor. 

–A ver te calmas ¿okey?, solo es una comida de jefa y empleado ¿okey?, ¿Qué puede pasar en una hora y con dos personas que se acaban de conocer?

–:Ya no tengo hambre –se dio media vuelta y regresó a su oficina dejando a Flor pensando hasta que se dio cuenta que había dicho algo indebido. 

–SILVIA YO NO QUISE DECIR ESO, ¡SILVIAA! –gritó Flor.

KENTUCKY FRIED CHICKEN 3:15 PM

–Buen lugar para conocer a una persona ¡eh! –habló Jorge burlandose un poco.

– ¿Qué no le gusta la comida de aquí? –Danna estaba nerviosa y preocupada pensando que quizás a  Jorge no le gustaba esa comida. 

–¿A quien no?  pero yo pensé que era de esas mujeres que cuidan su figura y no comen grasas y cosas que engorden por mantener la figura y esas cosas.

–¡Ah! –ríe–Hay muchas cosas que no sabe de mi Salinas, aparte un día que rompa la dieta no pasa nada, mañana lo repongo en el gym –ambos rieron y se sentaron en una de las mesas. 

–Bueno entonces está bien, vamos. 

Ordenaron lo que iban a comer y esperaron 10 minutos a que les entregaran los alimentos, en ese tiempo solo hablaban de sus rutinas en el gimnasio y que a ella le gustaba mucho la comida rápida y que lo hacía todo el tiempo, a lo que él respondía con que no se le notaba, pero no por un cumplido o por otra cosa, sino porque en verdad no se le notaba era muy delgada, hasta llegó a pensar que era de esas personas con el metabolismo rápido, esas que comían y no engordaban, tal su caso.

Les entregaron sus cosas, y se fueron de nuevo  a una mesa pero ahora un poco alejada de las demás. 

–¿Y cuánto lleva trabajando en la empresa de Agustín?

–¿Quién es Agustín?

–Su jefe el señor Will, perdón es que nosotros estamos acostumbrados a hablarle por su nombre.

–¡Oh! Pues llevo 4 meses.

–¡Wow! Y ya es todo un experto en finanzas.

–Pues eso lo debo a la Universidad que supieron prepararme y porque mi padre es contador pero también sabe de finanzas y todos los fines de semana me enseñaba algo nuevo y por eso sé un poco más.