Capitulo 3

531 39 3
                                    

"El complejo de estrellas de Hollywood"

 — ¿Oigan, creen qué esto sea legal?— preguntó lentamente Percy. 

— Tomando en cuenta que entramos por el jardín de un hotel y no por las puertas del estudio, no lo creó— respondió Jason.

Los cinco miraban a su alrededor, observando con detenimiento a todas las personas ahí reunidas, que en su mayoría eran jóvenes.

— Ahora entiendo porque la recepcionista habló tan bajo, cuando pregunte.— dijo con sorpresa en su voz.

Los autos no dejaban de entrar desde su lado derecho, aunque muy pocos entraban por el izquierdo, pero cualquiera que llegara en grandes camionetas, entraban directamente al estudio, recibiendo miradas emocionadas por quienes esperaban en la enorme fila afuera.

— Deberíamos preguntar como entrar, he visto que muchos chicos llevan papeles pequeños en las manos. Y de ser esas las entradas, necesitamos conseguir las nuestras.— dijo la hija de Ares, completamente seria, sacando a todos de sus cavilaciones. 

— Clarisse tiene razón, ademas no creo que Nico tenga suficiente tiempo para analizar a todas las personas de aquí, sobre todo harán falta las que ya estén adentro.— concordó Piper,— Habrá que encontrarla antes de que esto acabe, ¿Jason, podrías acompañarme a buscar a un vendedor?— preguntó ligeramente cohibida ante la atenta mirada que le dio el romano.

— Seguro.— dijo cortés, entrando en su papel de antiguo pretor,— Mientras nosotros conseguimos información y las entradas, podrían comenzar a revisar el área.—  dicho esto camino con la hija de Afrodita a su lado directo a la fila frente a ellos.

— Ire de este lado.— exclamó rápidamente Clarisse, alejándose del mismo modo, sin darles tiempo para replicar algo a los restantes.

— ¿Y bien Nico, haz sentido algún aura de semidiós?— cuestionó con una sonrisa ladeada.

Pero antes de poder responder el hijo de Hades, el rugir de un motor que se acercaba los hizo girar a su izquierda, encontrándose con la veloz entrada de una motocicleta deportiva que arribaba al lugar, llamando la atención de la mayoría, no solo por el sonido del arranque, sino que el pulcro color blanco y el conductor algo pequeño, eran algo que no se podía ignorar.

El sujeto se detuvo a un par de metros desde donde ellos habían llegado, apagó el motor y de un grácil y delicado movimiento descendió del vehículo.

"Bastante femenino" se dijeron ambos semidioses, pero volvieron a quedar estáticos, cuando el conductor comenzó a retirar el casco de su cabeza, dejando caer una larga cascada de risos de diferentes colores, quitando el aliento a varios espectadores. Con su mano libre, sacudió su cabello dejándolo libre por completo y con su casco aún bajo su otro brazo, abrió la parte delantera de su traje hasta su busto, retiro una malla pequeña del guarda-fangos trasero y tomo una bolsa deportiva colgándola a su hombro.

Levanto la mirada hacia el frente, con expresión etérea, dio un rápido vistazo a su alrededor, dejando ver unos ojos claros aún bajo la leve iluminación que había. 

Entonces comenzó a caminar a paso firme, dirigiéndose a las enormes puertas del estudio; había que reconocer que a pesar de usar un traje de protección para motociclistas, botas y guantes a juego, era bastante atractiva y lo quisiera o no, se veía demasiado sexy, ademas del constante contoneo rítmico de sus caderas al andar. Lo sorprendente del asunto, era que aún luciendo completamente neutra y ligeramente altiva, mucha gente se acercaba o la saludaba de lejos, a lo que ella respondía con una sonrisa, asentimiento con la cabeza o con su mano libre.

Behind The Armor (Nico Di Angelo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora