3. Te oí

43 5 2
                                    

*Aixa*

Ya había pasado unas dos semanas desde que ingrese a “Duke” y aun no entendía muchas cosas como ¿Por qué la odian? ¿Qué les hizo? O ¿Por qué no hablas? ¿Por qué no te defiendes? ¿Por qué tienes cicatrices en tu cuerpo? ¿Dónde vas los fines de semana?

 Todo eso ha estado corriendo por mi cabeza desde que desperté  ya que me acosté tarde ayer por esperar a Stefani pero no llego a dormir , llego a la mañana del lunes  y me despertó de forma distinta a otras veces , esta vez me aventó agua  y ella  ya estaba lista  , no me espero ,como siempre se marchó antes a desayunar , no entiendo mucho a esta chica , es un libro por descubrir . . .

*Stefani*

Ya las cosas no estaban tan fáciles con la pequeña Aixa , diariamente me hacía un interrogatorio especialmente los lunes que son los días que regreso al internado después del fin de semana que eran los únicos días  que nos daban permiso para salir y no estar encerrados como si fuera una cárcel .

Y el porqué del “Ya las cosas no estaban tan fáciles con la pequeña Aixa” , es porque  no estoy nada acostumbrada a que me pregunten cosas , supuestamente  esas cosas hacen los padres no las compañeras de habitación.

-hace 15 min-

Me trepe por uno de los  arbustos que no tienen espinas que me permiten entrar al bendito internado, ya lo hacía con maestría ya que era cosa  de todos los fines de semana , al llegar  a la habitación  me encontré con una bella durmiente , cosa que si seguía durmiendo no comería y estaría quejándose todo el día porque no comió , la sacudí despacio , no despertaba –¡Aixa!- le hable alzando la voz  pero nada , se preguntan  si ya le  hable  , no , no lo he hecho aún , pero la  niña está completamente dormida , la volví a sacudir , le quite las frazadas , le di media vuelta , le  ale el cabello rubio , la levante , la volví a  recostar , pero no pasó nada la niña seguía durmiendo como piedra así que tome  una decisión , me vestí y termine de arreglar , saque su uniforme del ropero  , lo deje en mi cama  , cogí  el vaso de su buro , lo llene con agua , regrese y se lo tire encima – ¡pero que  demon….! –dijo un tanto enojada  , ella me vio  con ganas de vengarse , pero no se lo permití  y salí lo más rápido posible al comedor  , llegue  busque mi desayuno y fui a la mesa que compartía con la rubia de  cabellos ondeados .

Estaba tan sumergida en lo que hasta ahora ha pasado  que no me di cuenta que Aixa me veía fijamente – ¡tú! , me las vas  a pagar – dijo señalándome  y acto seguido se  sentó  al frente , tomo un poco de mi pan y se lo llevo a la boca .

*Aixa*

Ya cada quien se encontraba en su respectiva clase aburriéndose con su respectivo profesor , unos de mis compañeros , específicamente los de adelante prestaban atención , de la mitad para el fondo todos hacían lo que querían , unos sacaban el móvil y empezaban a chatear o wasapear  , otros simplemente decidían seguir con su hora de sueño , otros ligaban  y así , yo me encontraba en el grupo que escuchaba al profesor . . . claro de rato en rato ya que me aburría , ya era un tema que he hecho desde la primaria.

*Stefani*

Al fin ya habían acabado la clases , eran prácticamente las 6 , ya me había duchado y estaba en ropa interior , sentada en mi cama mientras  Aixa arreglaba nuestra habitación  o eso trataba – ¿puedes ser más ordenada?- me  reñía , sí genial una niña de 14 años me estaba llamando la atención – estás en tu último año de preparatoria y tienes la habitación como si fueras una niña de 4 años que  aún no saben bien que es el orden – detestaba que me den sermones , sea la persona que sea ,en este caso esta hermosa niña , así que me tire en mi cama boca  arriba- oye, te estoy hablando , ya que no hablas siquiera mírame ¿no?- okey me estaba haciendo enojar , me di la media vuelta , dándole la espalda –ash ,sueles ser detestable algunas veces – alzo un poco la voz – tenemos que ir a cenar – hablo un poco más calmada ,di la vuelta y moví mi cabeza de un lado a otro dándole a entender que no iría y al parecer me entendió  porque se dio la vuelta y salió de la habitación

Ella no cree en el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora