¡Gracias por cuidarme![BTS y tú]

Capítulo 30 [Especial de Año Nuevo Pte. 1]

Despierto algo cansada pero aún así me levanto y voy a desayunar. Los chicos deben estar esperándome.
Salgo de mi habitación y camino lentamente dirigiéndome al comedor.
-¿Y Suga Hyung?- escucho que preguntan desde la cocina.
-Llamó a esa chica y fueron a reunirse otra vez.
¿Chica?.
Entro a la cocina fingiendo no haber escuchado nada.
-Buenos días- saludo.
-Buenos días ______- Jimin y Jin son los únicos que se encuentran en la cocina.
-¿Los demás no han despertado?- pregunto mientras tomo un vaso de agua.
-Parece que no.
Jin está cocinando el desayuno para todos. Siempre se levanta temprano para alimentarnos.
Es como una madre.
Y Jimin...está acompañándolo sin hacer nada.
-Oh Jin, necesito tu ayuda para algo- junto mis manos.
-¿Para qué?- pregunta sin dejar de cocinar.
-Hoy...saldré y necesito escoger un atuendo adecuado- respondo algo nerviosa.
-¿Pasarás Año Nuevo con Suga?- ríe Jin al notar mi nerviosismo.
-Si- suelto un suspiro.
-Bien. Acabaré esto, Jimin, sírvelo en la mesa y yo ayudaré a _____.
Jin le da un toque de sal a la comida y apaga el fuego de la estufa para seguirme hasta mi cuarto.
Cuando llegamos abro mi ropero para que tenga una vista completa.
-Este vestido, este suéter y estos zapatos- dice inmediatamente.
-¿C-cómo...?- intento preguntar.
-Es el sentido de la moda- interrumpe mi pregunta y sonríe victorioso- Usa eso y cualquier chico caerá a tus pies- levanta un pulgar en señal de aprobación.
-¿Y el peinado?.
-Déjalo suelto, se verá bien- responde inmediatamente.
-Eres el mejor- lo abrazo agradecida.
-Lo sé, lo sé- ríe y caminamos abrazados hasta volver a la cocina.
Mientras pasábamos por las habitaciones Jin golpeaba las puertas y gritaba como loco para despertar a los que faltaban.
Me causó mucha risa.
En el comedor nos encontramos con Suga.
-Buen día- dice Jin y mira la mesa vacía- Jimin...le dije que sirviera la mesa- me suelta lentamente y va hacia la cocina enojado.
-Buenos días- saluda Suga.
-Buenos días- sonrío- Ah, ya sé que me pondré hoy...¿a qué hora quedamos?.
-¿Qué? ¿De qué hablas?- me pregunta sin entender.
-Tú...dijiste que pasaríamos Año Nuevo juntos- respondo aún más confundida.
-Creo que te confundiste, yo saldré esta noche.
¿Mis recuerdos me están haciendo una mala jugada?.
-Pero...- intento decir.
-Lo siento hoy no puedo. Mañana podemos salir si quieres.
¿Lo soñé? No, yo estoy segura de que me pidió una cita.
-Yo mañana no puedo. Voy a pasear a BangBomb- respondo. La verdad es que quiero que insista un poco en salir conmigo.
-Ah vale.
Su respuesta me molesta y no vuelvo a cruzar palabra con él en el desayuno.
...
Estoy barriendo mi cuarto con algo de furia. Los chicos se han ido y ahora tengo tiempo de desahogarme por lo qué pasó con Min Yoon Gi.
-¿Vas a salir con esa otra chica? Ojalá te diviertas- gruño mientras barro debajo de la cama.
-De seguro sólo querías jugar con la latina.
-Te odio.
-Tonto.
-Estúpido.
-Azucarado.
De repente mis comentarios empiezan a salir en español.
Estoy a punto de llorar, así que me siento en el piso de mi habitación intentando contener las lágrimas.
Debajo de mi cama veo un papel que no logre barrer con la escoba.
Lo tomo y lo leo.
-¡No puede ser!- grito al saber lo que contiene.
El chico N dejó su número anotado aquí.
Levanto la mirada lentamente y comienzo a reír de una manera malvada. Saco mi celular y marcó el número escrito en aquel papel.
...
-Me voy chicos- informó y me pongo los zapatos en la entrada.
Los chicos han llegado temprano por ser Año Nuevo y yo tengo una cita.
-¿Seguiste mi consejo?- pregunta Jin- Te ves hermosa...¡suerte!.
-Gracias- le dedico una sonrisa y salgo del departamento.
Suga...las pagarás muy caro.
Salgo del edificio y un carro está estacionado justo al frente.
-¡_____!- un chico baja del auto.
N.
-Hola N- digo amable y hago una reverencia.
-Te ves muy bien- me dice algo tímido- ¿Nos vamos?- pregunta abriendo la puerta de copiloto.
Entro al auto y cierra la puerta detrás de mí.
Este chico si es educado, estoy segura de que Suga no haría algo así por mí.
N rodea el auto y sube al asiento de conductor.
-¿A dónde vamos?.
-Reservé en un restaurante muy lindo.
-¿Qué esperamos? Estoy ansiosa.

*En el departamento*

Suga entra de traje y todos lo miran.
NamJoon: ¿Tú qué haces aquí?.
Suga: Vine por _____.
Jin: Ella se fue hace poco.
Jimin: Si, iba muy guapa.
Suga le dedica una mala mirada al menor y pasa una mano por su cabello sin entender la situación.
Suga: Se supone que el plan iba bien...¿a dónde se fue esa tonta?.
Hobi entra en la habitación.
J-Hope: Salió con N.
Todos lo miran con los ojos bien abiertos.
J-Hope: Me contó lo que le hiciste y dijo que tomaría venganza.
Todos comienzan a reír y a burlarse de Suga.
TaeHyung: Ella tiene valor.
Suga: Esa niña...

*En el restaurante*

Observo con detenimiento el lugar, pues es muy hermoso.
-¿Te gusta?- pregunta mi acompañante al notar mi interés.
-Es muy lindo.
Nos asignan una mesa y en cuanto nos sentamos siento mi teléfono vibrar. Contesto.
-¿Dónde diablos estás?- reconozco la voz en seguida.
-¿Quién te dio mi número?- respondo secamente.
-Responde tú primero, estoy como loco buscándote. ¿Dónde estás?.
-Cenando- sonrío.
-¿En dónde?.
-En un restaurante muy bonito- juego un poco con él.
-Dame la dirección.
-No. Tú estás muy ocupado con lo que tienes que hacer hoy...deja de buscarme y continúa tu cita con la otra chica.
-¿Cuál otra chica?.
-A mi no me haces estúpida. Estás saliendo con alguien.
-Claro que no tonta.
-Ya te descubrí. Adiós- estoy por colgar pero su voz me detiene.
-Ahorita te veo. Saludos desde la ventana- suelta y cuelga.
Miro hacia el único ventanal qué hay y está tomando aire como loco. ¿Acaso corrió hasta acá?.
-¿Una emergencia?- pregunta N preocupado.
-Me temo que sí- hago una mueca.
-¿Me la permites?- un jadeante chico pelinegro toma mi mano y me levanta de la mesa.
-Suga...- murmuro.
-Es una emergencia. Claro llévatela- responde el otro preocupado- Llámame y dime cómo está todo- dice.
Suga me saca arrastrando del restaurante y sigue así por toda la calle.
-¿Me puedes soltar? Estás lastimándome- digo sin dejar a un lado mi imagen molesta.
-No.
-¡Te digo que me sueltes!- jalo mi brazo bruscamente y me detengo.
Me mira estupefacto.
-¡Eres un idiota!- reclamo en su cara.
Estuve deseando todo el día poder decirle esas palabras en la cara.