El ángel de mis sueños

Rosas rojas

Veía a través de su habitación, los días pasaban y aún no le dejaban salir del lugar, para ella parecía que le prestaban más atención de la que debían, su deber le llamaba y se sentía inquieta de no poder ayudar o salir de ahí y más por Neji y Toneri quienes no le dejaban a capa y espada y cuando no estaban ellos su cuñada Tenten intervenía; de vez en cuando su padre iba a verle, finjiria si dijese que no estaba feliz con ello, pero aún las heridas de su corazón seguían como una llaga abierta, la joven aún se sentía triste y nostálgica de no poder hablar con aquel azabache que ocupaba sus pensamientos, pero Itachi le veía de vez en cuando  y le enviaba mensajes que por los caprichos de su hermano le transmitía a la peliazul, aunque ciertamente la joven le agradaba y mucho.

En cuanto a Itachi,  era ayudado por Utakata  y Juggo en el cuidado de su hermano, por lo que este estaba más enfocado a su trabajo y demás quehaceres, sus padres estuvieron ahí un gran rato, pero se marcharon finalmente para cuidar de sus finanzas, aunque Sasuke se alegro de que al menos estuviesen un poco con él.

Por otra parte Temari ya estaba en casa con su retoño y había ido a visitar a la ojiperla al hospital en dos ocasiones ese mes.

Por su parte Gaara entre ronda y ronda iba a ver a la peliazul  ya que debía acercarsele, más si quería conquistarla ya que sentía a Toneri muy peligrosamente apegado a ella (claro este no sabía que ella era su hermana) e incluso tuvo una confrontación con el peliplata por ello, pero aquel chico sólo se burlo del pelirrojo y le dijo que no le dejaría el camino libre y al contrario de lo que el ojiturquesa quería lograr lo termino poniendo más alerta ya que este aunque era su hermano y obviamente no estaba en plan romántico  con ella este no quería perderla tan pronto, era egoísta y soberbio y lo sabía pero deseaba tanto tener cerca a su hermana aunque pareciera un loco enamorado u obsesivo pues para él era lo único que quedaba de su madre, una joya valiosa que debía proteger y aunque el tiempo pasaba y el seguía soltero no tenía ningún plan de conseguir mujer aún, sus  únicos anhelos y objetivos eran su hermana y su trabajo.

Sasuke pensaba en ella mucho, aún seguía en sus sueños y anhelaba aquellos días en que ella estuvo ahí cuidándolo, pero por lo que tuvo oportunidad de hablar con ella en navidad sabía de su condición y que no podía hacerlo y estaba preocupado, pero no tanto ya que su hermano le comentaba de ella y estaba esperando aún las revisiones para saber si la operación había tenido éxito o no, pero la doctora le decía que era pronto aún para saberlo y que se necesitaba esperar más para ver si el trasplante había funcionado, aunque creía que esta ocultaba algo, pero sentía que tal vez exageraba un poco con eso.

En cuanto a Utakata... había visto más veces a la peliazul, aunque aún la miraba de lejos y lo que descubrió le trajo mucha felicidad a la vez que tristeza y una gama de emociones.

Todo eso había ocurrido en un mes, pero lo más destacable fue la pelea de Karin con el azabache...

Karin había sido avergonzada, humillada y la comidilla social de la clase alta por Mikoto Uchiha quien se encargo de hacer quedar mal a la pelirroja y su familia ante la sociedad, estaba tan furiosa que había ido a confrontar al Uchiha menor, el único que le apoyo fue Suiguetsu quien aún tenía la esperanza que esta recapacitara y se fugará con él pues este en verdad le amaba; Karin llego a reclamarle a Sasuke pero este no sabía de lo que está hablaba hasta que Itachi llegó y aclaró la situación pues él era el responsable de abrirle los ojos a sus padres y descargó todo su odio hacía aquella pelirroja al igual que el Uchiha menor el cual sentenció que jamás se casaría con ella y no vería ni un yen más de su fortuna, pues ya no quería verle la cara  cerca de él o su familia y esta solo se marchó con rabia no sin antes jurar que se vengaría.

Actualmente...

Era de noche y Utakata observaba unas fotografías viejas donde se podía apreciar que una era una fotografía de un grupo escolar, otra donde el pelinegro se encontraba con una peliazul en un parque de diversiones, otra donde se mostraba esta misma pareja en un árbol de cerezos, otra donde se veía a una rubia abrazada de una peliazul junto al muchacho de cabellera negra riendo y otras más de ellos junto a otros muchachos y muchachas con uniformes escolares; el hombre en cuestión sonreía observando las fotos y recordando aquellos momentos los cuales paso con la que para él era su mejor amiga y las amigas de esta ya que aunque no era muy popular tenía un gran corazón y las pocas amistades que poseía le querían sinceramente, así que para él estaba decidido no volvería a apartarse de ella, una vez se marchó y la dejó arrepintiéndose siempre pero esta vez no, pasase lo que pasase estaría a su lado, así pues al día siguiente iría a hablarle, pues quería saber más de ella.

Al siguiente día...

Toneri atendía pacientes, Tenten y Neji ese día no irían ya que verían al obstetra por lo del embarazo de la chica de chinguitos, así que la peliazul estaba sola con una enfermera que le atendía en momentos y Kabuto quien le observaba periódicamente y se aseguraba que estaba todo en orden, Gaara de vez en cuando iba a verle, al igual que Sakura y Naruto, pasaban las horas hasta que un ramo de rosas se asomó por la puerta el cual ocultaba al portador de dicho ramo, la chica tenía curiosidad de quién se trataba, creía que era para su compañero de cuarto hasta que el que traía las rosas descubrió su rostro dándolo a mostrar al tiempo que decía:-"Hinata Hyuga ¿te acuerdas de mí?"-.