Capitulo Dos

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CAPITULO DOS

Después de recibir mi aceptación, pude al fin huir del lugar que por tantos años llame hogar, y ahora se había convertido en un verdadero infierno, gracias las personas que un día me amaron tanto y ahora me odian, mis padres, me hicieron prometerles que no regresaría nunca a casa, al menos hasta poder cambiar de vida y ser alguien de verdad, yo lo acepte, al final, nunca más quería volver a pisar este lugar, la UT (Universidad de Tokio) tiene una ventaja ya que todos aquellos que son aceptados y viven lejos de la universidad pueden acceder a una especie de área departamental para alumnos, se paga una módica cantidad al mes, que generalmente cubren entre los habitantes de esas casas, sin embargo al ser una nueva licenciatura no había muchos en mi generación y viviría sola.

Lo único bueno que hicieron por mí, mis padres fue rentarme un paquete de mudanza, en donde pude llevarme el viejo piano, el intento de cama que tenia, muebles que al fin accedieron a darme, tales como un ropero, mi buro, el librero junto con todos mis mangas, mi computadora, un celular nuevo, mi ropa, y un poco de dinero que pese a todo sin duda acepte para poder establecerme en este lugar, al menos el primer mes de mi estancia.

Antes de ingresar de manera oficial me encargue de que el espejo me devolviera una figura diferente, ya que no quería seguir recordando mi antiguo yo, mi cabello creció de manera considerable estos dos años, llegándome casi a la altura de la cintura, lo teñí de negro, un negro muy obscuro, cambie mi forma de vestir, siempre con negro y algún color fuerte de por medio, ya fuera el azul, rosa o rojo. Deje de usar faldas y vestidos, tenia pulseras en mis muñecas todo el tiempo, solo quería volver a empezar.

Me asombro estar en este lugar, ya que mi carrera ofrecía, no solo un gran campo de acción y no solo en educación más científica o filosófica de por medio, sino también estaba en el aprendizaje de un instrumento de cuerdas, canto, composición e historia, amaba tanto esto que era lo único que me alentaba a levantarme, mi última esperanza, la realidad hecha melodía.

Cambie mucho. Ya no acostumbro a llegar tarde, ya no dejo pasar nada de mis tareas, estudio todas las tardes, trabajo medio tiempo, por la mañana o tarde en la cafetería de la universidad, dependiendo de mi horario escolar, y los fines de semana, me dedico a ser mesera en un pub, famoso de los alrededores. Donde muchos de mis compañeros se la pasan bebiendo, no los juzgo pero yo no puedo darme el lujo de hacer eso, el alquiler lo pago, con lo que gano en la semana, en la cafetería de la universidad y lo que como, al igual que mis materiales. Lo pago con lo poco o mucho que gano en mi trabajo de fin de semana. Espero aún así encontrar otros empleos pronto, pese a todo no puedo con todos los gastos.

No me preocupo demasiado en hacer amistades, ya no creo en ellas, no me preocupo en llamar a mis padres, jamás me contestan, no intento más hablar con Yukiho, simplemente me ignora o al saber que soy yo, me recalca lo mucho que me odia, no intente ponerme en contacto con Umi, ni Kotori, al final, llevábamos ya tiempo sin hablar, sin saber nada, ni ellas de mi vida, ni yo de las suyas. A veces tenía días sumamente difíciles, en especial cuando soñaba con ellas en los momentos que eran tan bellos en esos días pero ahora eran horribles.

Hace poco soñé, con el día en que decidimos renunciar a seguir siendo un grupo de Idols por que las de tercero se iban a graduar y no podíamos seguir siendo musas sin ellas, reviví ese momento, las vi frente a mí en ese atardecer, en aquella playa alejada.

Donde solo éramos nosotras, las vi reír, con sus parejas, después de todo la vida me había quitado lo ingenua y pude darme cuenta de la relación de cada una de ellas con las otras, en ese grupo siempre sobre yo. Tojo Nozomi-chan tenia a Ayase Eli-chan, Nishikino Maki-chan a Yazawa Niko-chan, Minami Kotori- chan a Sonoda Umi-chan y Koisumi Hanayo-chan a Hoshisora Rin-chan, y yo bueno, estaba demás, al final solo les cause problemas, al ser egoísta y sobrepasarme en mi entrenamiento, por mi falta de responsabilidad y liderazgo.

Love Live School Idol Project: Un aplauso para el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora