Protégeme ➳Klaus Mikaelson

Capítulo 14. (+18)

Klaus's pov

—¿Esta es la parte en la que me lanzas contra el muro y Elijah me rescata?—Pregunta ella al ver que me quedé completamente inmóvil.
—No—Respondí y la apegué más a mi—Esta es la parte en la que continuamos en la cama—Sonreí de lado y ella rió sutílmente.
—No lo creo. Cualquiera puede oírnos o entrar por esa puerta y eso me traería muchos problemas con Kol que intento evitar—Dijo seria.
—Pero si él no te importa—La miré con molestia.
—Eso no significa que no intente apartarlo de todo esto Nik. No cuentes con eso—Respondió con seriedad y se largó de la habitación dejándome con la palabra en la boca.

Emily's pov

Klaus contaba con que yo dejara a Kol y vaya corriendo a sus brazos. Las palabras de Damon se hacían presentes en mi cabeza, sabía que debía tomar una decisión, no podía engañar a Kol con su propio hermano pero tampoco podía dejar todo por nada. Dudaba mucho sobre lo que Klaus sentía por mi, si es que sentía algo.

Necesitaba hablar sobre esto con alguien pero no tenía con quien, no contaba con los otros dos Mikaelson que no estaban involucrados amorosamente conmigo porque sabía que la que terminaría tragando sus propios dientes iba a ser yo.

La noche comenzaba a acercarse, el simple hecho de tener que compartir la cama con Kol luego de haberlo engañado me provocaba querer que la tierra me tragara. Kol salía del baño solo en ropa interior mientras secaba su cabello tayando la toalla contra su cabeza.

—¿Te pasa algo bebé? ¿Todo está bien?—Me preguntó sacándome de mis pensamientos.
—Sí ¿Por qué no iba a estarlo?—Respondí algo insegura.
—Estás algo rara desde que regresamos de Mystic Falls ¿Ocurrió algo por lo que debería de preocuparme?—Dejó la toalla en el cesto de ropa sucia del cuarto.
—No, pero quiero que hablemos Kol—Le dije con seriedad. Se sentó a mi lado.
—Dime—Dijo con inocencia. Que difícil iba a ser esto, debía iniciar el tema de conversación de otra forma.
—¿Tu que sientes por mi?—Tomó mis manos entre las suyas acariciándolas y mirándome a los ojos.
—Cuándo levanté la vista y te vi por primera vez, cuando me devolviste a la vida me impacté al verte perfecta ante mis ojos. Fue amor a primera vista lo que sentí por ti, yo te amo Emily. Por ti cambié muchas cosas relacionadas a mi vampirismo, también mi forma de ser. Me cambiaste la forma de ver este mísero mundo—Respondió sin titubear y sin una gota de ironía. En sus ojo se notaba una chispa casi mágica. De seguro en mis ojos también hay un brillo pero de las lágrimas que estaba conteniendo ante semejantes palabras.
—N...no se que decir. Kol yo...—Dije y mis voz temblaba, al igual que mi mandíbula.
—Dime que me amas—Me interrumpió.
—No—Mi voz de escuchó fuerte por toda la habitación. Su expresión cambió a seria y ya no notaba ese brillo en sus ojos, notaba furia.
—¿¡Cómo que no!?—Gritó. Me puse de pie y el me empujó contra el muro con su fuerza sobrenatural. Unas cuantas lágrimas rodaron por mis mejillas por causa del golpe.
—Lo que haz escuchado—Alcé la voz. Kol se lanzó sobre mi apegándome más a la pared y me tomó por los brazos aplicando una fuerza anormal. Retiró de mi dedo mi anillo, sin él era más que débil.
—Si no eres mía no serás de nadie más. Si te encuentro con otro te mataré ¿Me oíste bien?—Él aplicaba aún más fuerza en mis brazos. Jadeaba del dolor.
—Yo también te oí bien, Kol—Oí la voz de Marcel.
—¿Qué haces en mi casa Marcellus?—Le interrogó alzando la voz.
—Klaus me llamó, pero eso no tiene nada que ver con esto. Suéltala de inmediato Kol—Él lo ignoró por completo y de la nada Kol cayó al suelo, le había quebrado el cuello.

Caí sobre el pecho de Marcel y él me alzó en sus brazos.

—Llévame a mi habitación, no quiero que nadie se entere de esto—Él asintió ante mi pedido. Me dejó delicadamente sobre mi cama y me cubrió con una manta.
—Creo que esto es tuyo—Me entregó mi anillo y volví a ponérmelo.
—Gracias—Dije con la voz débil y cerré mis ojos.

[...]

Al derpertar vi en mi mesa de noche un vaso con sangre, giré mi vista unos cuantos centímetros y vi a Klaus sentado a los pies de la cama.

—Bebe—Me ordenó señalando el vaso y le obedecí.
—¿Qué haces aquí?—Pregunté y limpié la comisura de mis labios con la yema de mi dedo pulgar.
—Vivo aquí—Responde obvio.
—No. Aquí en mi cuarto—Fui insistente.
—Marcel se quedó preocupado anoche y me informó lo que había pasado—Se acercó un poco más a mi—No debí dejar que eso pasara, lo siento—Continuó, depositó un beso en mi frente y se largó del cuarto cerrándo la puerta detrás de él.

No salí de mi cuarto en todo el día. Luego de unas horas me levanté, tendí la cama y me dirigí a darme una ducha. Cuando salí oí mi móvil sonar, era un mensaje de un número desconocido.

"Necesito que nos veamos a las 22:00hs en la mansión Mikaelson cerca del bosque.
-Davina"

Junto con el mensaje había una archivo el cual abrí y era la ubicación gps de dicha mansión. Faltaban veinte minutos para las diez. Me vestí y salí de la casa intentando no levantar sospechas.

Al llegar a la inmensa casa color blanco aparqué el auto en la puerta y bajé de este poniéndole el seguro. Toqué la puerta pero estaba entre-abierta así que entré , todo estaba a oscuras. Una línea de luz entraba por una de las ventanas directamente hacia la escalera.

—¿Davina?—Mi voz resonó en todo el lugar.

Luego de buscarla en toda la planta baja decidí subir al primer piso. Iba subiéndo la mitad de la escalera.

De la nada alguien me hace chocar de frente contra el muro, escuché una respiración en mi oído y sentí su tacto recorrer el costado de mi cuerpo hasta deslizarse a mi feminidad.

Me volteé y me encontré con Klaus, la línea de luz iluminaba su rostro en forma diagonal. Se lanzó sobre mis labios desesperádamente y comenzamos a deshacernos de las prendas de vestir dejándolas a lo largo de la escalera mientras subíamos sin separar nuestros labios.

Ya estando arriba esta vez yo acorralé a Klaus contra uno de los muros, él no se resistió y bajó su mano hasta mi trasero para tomarlo con algo de fuerza. Comencé a besar cada parte de su cuello miéntras enterraba mis uñas en su espalda, él suspiraba con placer. Sentía su miembro erecto contra mi feminidad y eso me excitaba

Klaus me elevó tomándome de los muslos pasando su lengua cerca de mis senos y nos dirigimos a una de las habitaciones, nos lanzamos sobre una mesa arrojando al suelo lo que sea que se encontraba sobre ella. Quedé de espaldas a él, Klaus me jaló del cabello acercando su rostro al mío por detrás y comenzó besando mi cuello, luego mordió el lóbulo de mi oreja lo que me hizo reprimir un gemido entre mis labios. Siguió depositando húmedos besos a lo largo de mi espalda hasta llegar a mi trasero, de una manera rápida Klaus se deshizo de mi ropa interior, me volteó y abrió mis piernas bruscamente para luego abrirse paso en mi interior con su miembro. Los movimientos comenzaban rápidos y acababan más lentos. Una de sus manos la sostenía sobre mi cabeza y la otra entrelazada con la suya. Sentía su respiración agitada cerca del oído al besarme el cuello.

Luego de unas cuantas horas Klaus me cargó hasta la cama dejándome delicadamente sobre esta y bajó por mi abdomen rozando con su barbilla mi piel mirándome con picardía hasta que llegó a mi feminidad y comenzó a juguetear con su lengua lo que me hacia estremecerme con lujuria apretando la sábana entre mis manos soltando varios gemidos.

Klaus's pov

Abrí mis ojos lentamente, me encontraba completamente desnudo y solo una sabana color blanca que cubría de mi cintura hacia abajo. Volteé hacia mi derecha y de ese lado la cama estaba vacío. Restregué mis ojos y me puse de pie, me dirigí hacia el baño al escuchar el ruido de la ducha.

Entré sin hacer mucho ruido. Vi a Emily duchándose y mi mirada recayó sobre su marca con forma de luna, su marca de nacimiento, mordí mi labio inferior negando con la cabeza.

«¿Qué me estás haciendo lobita?»—Esa pregunta invadía mi mente.