~Recuerdos~ Zayn y tu [TERMINADA]

Capítulo 7 ~Recuerdos~ Zayn y tu

El camino fue muy largo y cansado. Yo fuí fijándome en cada detalle del paisaje que me rodeaba.  La vegetación era increíble, por cada sitio que mirabas había colores vivos.  El aire fresco hacía que mi pelo se moviese al ritmo del viento. Miles de animales pequeños correteaban a mi lado intentando jugar conmigo, incluso algun pájaro se llegó a posar en mi cuerpo juguetona mente.

Atravesamos bosques verdes y frondosos, en los que te podías perder fácilmente. Praderas largas y llenas de flores exóticas. Montañas altas y rocosas. Y algunas zonas de pequeños desiertos, con su arena fina y su clima caluroso.  Me quedé asombrada de ver tanta variedad de paisaje en tan poco terreno.

Noté como Zayn, Liam, Harry y Blanca me miraban atentamente. Harry se acercó a mi.

-¿Te gusta esto?- preguntó el.

-¿El qué?- pregunté yo sobresaltada, mientras le miraba atentamente.

-Este mundo-dijo sonriendo.

La verdad, me costaba comprender que estaba en otro mundo, me había dado unos cuantos golpes para asegurarme de que aquello estaba pasando de verdad, y si, estaba pasando. Era tan aterrador pensar que quizas me quedaria alli para siempre, atrapada en aquel extraño mundo tan desconocido para mi.

-Si... he soñado con esto antes- respondí algo insegura. Pense que Harry se sorprendería,  pero no fue así.

-Antes dijistes que habías soñado conmigo.¿Cómo fue el sueño?- Me miró. Parecía muy interesado, así que se lo conté.

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-...Entonces el niño le amenazó con decirselo a su madre y ella se defendió...- seguí contandole.

-Diciéndole que no sabía su nombre, entonces se presentaron- completó mi frase Harry y yo le miré con la boca abierta, estaba helada.

-Si... ¿Co... cómo lo sabes?- dije intentando no tartamudear, cosa que no fue posible.

-Cuando lleguemos a palacio te lo explico- contestó.

Después de aquella conversación no volvimos ha hablar. Creo que yo seguia demasiado sorprendida para poder formular alguna palabra. ¿Y si mi sueño habia sido real y por eso Harry lo sabia?

Al rato llegamos a las puertas de un enorme palacio, con matices de plata y cristal que relucían con la luz del sol. Estuve un rato contemplándolo hasta que un griterío me sacó de mis pensamientos.

-¡____! ¡____!- cuatro chicas venian corriendo hacia mi con una rapidez bastante sorprendente, y tengo que admitir que me asusté un poco. Cuando llegaron a mi lado me abrazaron fuertemente, no paraban de gritar y alguna hasta lloraba. Yo miraba a los demás confusa.

-Chicas... _____ no sabe quien sois- dijo Blanca con la voz apagada. Ellas se separaron bruscamente de mí.

-¿Es eso cierto? ¿No sabes quienes somos?- me dijo una de las chicas. Tenía el pelo color castaño claro y unos ojos marrones grandes. Yo la superaba en altura.

-_____... ¿Sabes quienes somos o no?-repitió otra de ellas. Ésta tenía el pelo casi rubio y una sonrisa traviesa. Yo negue con la cabeza.

-Bueno... entonces tendremos que presentarnos- dijo una chica de mi misma altura, rubia y con los ojos verdes.

-Estoy de acuerdo, yo me llamo Sissi- era peliroja y con los ojos azul turquesa. Nos dimos dos besos y sonreimos.

-Encantada Sissi- dije, todavia aturdida.

-Pues, yo me llamo Lala- dijo la chica que había hablado primero. Se acercó a mí y me abrazo.

-Yo me llamo Tris- dijo otra de ellas sonriendo, casi riendose. Yo también la sonreí y nos dimos otro abrazo.

-Y por ultimo yo, encantada, me llamo Kathia- dijo la rubia, su voz era muy dulce.

-Encantada de conoceros a todas- miré a las demás.

Ellas me miraban atentamente, haciendome sentir bastante intimidada. El silencio comenzaba a ser incómodo, ya que yo no sabía que decirlas.

-Bueno venga, entremos, nos están esperando- rompió el silencio Harry.

-¿Quienes?- pregunté abriendo mucho los ojos.

-El rey y la reina, tus...- algo no dejo terminar la frase a Zayn. Un fuerte ruido sonó y las enormes puertas del palacio se empezaron a abrir. Me quedé sin aliento mientras que miraba a las personas que salían por las puertas. Ellos... ellos eran las personas que habían salido en mis sueños. La mujer y el hombre me miraron sin decir una palabra. Hasta que ella no aguantó más y con lagrimas en los ojos se echó sobre mi y me sostubo entre sus brazos. Yo me sorprendí sin entender nada, pero tuve la necesidad de abrazar a aquella mujer. El hombre vino por detrás y también me abrazó.

-Oh mi pequeña... cuánto tiempo- sollozó la mujer. ¿Mi pequeña? ¿Cuánto tiempo? Un momento... ¿De qué estaban hablando? No les conocía de nada. ¿Que era todo aquello? Estaba paralizada. Nada tenía sentido, no le encontraba sentido.

-Hija, me alegro de que hayas vuelto- el hombre sonrió. ¿¡Qué!? ¿¡Cómo que 'hija'!? ¿¡Haber vuelto a dónde?! Aquello era una gran locura. O todos estaban locos o yo tenía algún problema.

-Per... perdonen pero creo que se han equivocado de persona- me atreví a decir. Ellos me miraron sin entender nada.

-¿Perdona?- el hombre frunció el ceño. Yo me estremecí.

-No os conozco de nada, señor- intenté no mirarlos a los ojos.

-Por favor Mila, acompaña a _____ a la salita. Y vosotros conmigo ¡ahora!- El hombre estaba furioso, parecía que se le iba a explotar la vena de la frente. La mujer me cogió de la mano y entró conmigo al palacio.