Capitulo 20: "Mijail"

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El típico sonido que hacen los aviones para avistare que ya te puedes soltar los cinturones sonó.

¿Hace falta decir que ha sido el despega más tenso e incómodo que he tenido?

Si. Todos estábamos en silencio, pero silencio de estos incómodos, ah, y no nos olvidemos de los llantos de vaca que Janel daba, porque al parecer a Liam le ROZO una bala. Repito, ROZO.

Aunque, por la cara de fastidio que Liam se traía valió la pena.

Miré el brazo derecho de Liam, y pude ver como estaba sangrando, bastante. Aunque no lo suficiente para volverse peligroso, creo. Me desabroche el cinturón, y me acerque a Liam, el cual estaba sentado diagonal a mi asiento. 

Es un cabron de mierda, pero no le odio lo suficiente como para dejar que se desangre.

—Quítate la camisa, hay que revisar esa herida—ordené, el sin rechistar hizo caso. De un rápido movimiento se quitó la camisa sin apartar la mirada de la mía. Yo se la mantuve indiferente.

Me arrodille, y me acerqué más para poder examinar mejor la herida. 

Un poquito más, y no hubiera sido solo un roce. Coloque mis manos sobre su tersa piel, y apoye mi dedo indice y gordo a los alrededores de la herida, y la estire. Esto me ayudo a comprobar cuan profundo el roce fue. 

Sin apartar mis dedos de su herida, gire mi cabeza hacia a Alexey, que se estaba sentando en frente de Liam.

—¿Puedes buscar el botiquín o algo para limpiar esto por favor?

El asintió, y se levantó del asiento impulsándose con los brazos. 

Tardo unos segundos en traer unas vendas, algodón, alcohol, betadine, aguja e hilo. 

Le sonreí agradecida. Me volví, y como pude con una mano cogí el alcohol, y sin tacto alguno, le eché en la herida. Como era de esperarse, él no se quejó ni nada por el estilo. 

—Tenemos que hablar—dije en voz alta, para que todos me escucharan, aunque solo me estaba dirigiendo a Liam.

Con un algodón limpie los restos de sangre mezclada con alcohol que resbalan por el brazo de Liam. 

—No es buena idea que tu novia siga con nosotros, por el bien de ella, y por el de nosotros—hablé, dirigiéndome directamente a el.

Levante la mirada para ver su expresión. Tenía el ceño fruncido, pero en sus ojos no había enfado ni nada parecido. 

—¿Y porque crees eso? —preguntó irándome directamente a los ojos. 

—Porque no está hecha para el peligro, no está preparada para esto. Por dios, ¡intento salir por la puerta principal en medio de un tiroteo!

—Yo sabía lo que estaba haciendo—dijó Janel de mala gana. 

—¡Si no fuera por mi ahora mismo serias un puto colador humano! 

—Entiendo tu punto, pero ella se queda—dijo firmemente Liam. 

—Como sea, que quede claro, como alguno de nosotros salga herido por salvarle el jodido culo, no volverá a ver la jodida luz del día. Ella no es de los nuestros, y no responderé bien come algo les pase a ellos. ¿Estamos?

El asintió de acuerdo. Termine de darle las últimas vueltas a la venda, y con un perfecto nudo, termine. Recogí todas las cosas que usé, y me pare. 

—Gracias. 

Le ignore. Que le jodan, no estoy de humor. 

Me senté de vuelta en mi asiento, y me puse los cascos para escuchar música. 

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