Narra Lauren
No podía dejar de mirar el perfil de Camila. Acabábamos de dejar a Jacob con mi madre y ahora nos dirigimos a la dirección que me había enviado Normani. Notaba la ansiedad de Camila y a la vez la tristeza de la alejarse del pequeño, eso me parecía adorable.
Cuando a una orilla de la carretera vi a Ally saltando con los brazos estirados, sabía que habíamos llegado. Estacione junto a ella y baje del auto para abrir la puerta de Camila quien me miro como si me quisiera regañar, ella odiaba cosas como estas. De todas maneras tome delicadamente su pequeña mano y decidimos seguir a Ally por un camino de tierra.
-Que bueno que no use tacones-Me dijo ella riendo.
Camila usaba unos jeans ajustados, unas converce y una playera que dejaba a la vista su perfecto abdomen. Algo tan simple la hacia ver como una reina.
-Dios...-Dije cuando ví el hermoso lugar.
No era lo más pero junto a una laguna había una hermosa mesa de madera con dos asientos a su alrededor. Las chicas habían dejado dos platos de... ¿Pizza?
No sabía si Camila se tomaría bien la idea de que nuestra cita fuera comer pizza pero si es que se molesta, me aseguraré de matar a mis amigas.-Las dejo-Nos dijo Ally-Si nos necesitan estaremos en la cabaña de por allá-Señalo una pequeña casa de madera que estaba a unos siete minutos-Adios.
Tras despedirnos de ella caminamos por el cesped hasta la mesa. El rostro de Camila al ver la pizza me estaba matando, ¿Que significa?
-Santo Dios-Dijo ella poco a poco mostrando una sonrisa-¡Pizza preparada por la abu de Dinah!-Grito emocionada.
¿Podia ser alguien mas adorable que Camila Cabello? Porque yo creo que no. Mi pequeña latina rápidamente se sentó lista a que yo siguiera sus pasos para comenzar a comer. En cuanto estaba frente a ella, me miro esperando a que yo le dijera si podía o no comer, claramente asentí riendo de como aplaudía y atacaba su trozo.
-Joder, princesa, tu nariz está llena de salsa-Me reí. Con un pañuelo la limpie y me causo gracia como ella trataba de ver la punta de su nariz sin buenos resultados-¿Como eres feliz con un trozo de pizza?
-Un trozo de pizza hecho por la abuela de Dinah-Me corrigió.
Hubo unos segundos de silencio en los que ambas nos perdimos en nuestras miradas. Note que sus ojos apesar de todo habían perdido el brillo que solian tener, ¿Lo había causado yo? No lo sabía y no quería saberlo, solo quería encontrar la manera de volver a sus brazos y que volviéramos a ser como antes. Su rostro estaba más delgado y jamás lo había notado, pero su sonrisa... Su sonrisa no cambió, ella seguía mostrando sus perfectos dientes, seguía arrugando la nariz y seguía mordiendo la punta de su lengua. Estaba tan enamorada que aquel simple gesto me hacía querer correr por las flores mientras gritaba cuanto la amaba.
-Te amo-Solte por sorpresa. No lo había ni si quiera planeado, solo lo dije. Los nervios me consumieron, ella no decía nada-Oye, per...
-Te amo-Me interrumpió. Un nudo se formó en mi garganta, estaba jodidamente feliz-Yo quiero que estemos juntas-Paso su mano sobre la mesa y tomo la mia- No tengo ni idea de si estamos haciendo esto bien, de si Dinah me matara si le digo que volvimos o algo, pero te amo-rió con lágrimas en sus ojos-y si crees que no te doy todo lo que necesitas no lo busques en otra, dímelo y yo te lo daré-Me dolía como sus ojos me rogaban que le dijera que me hacía falta-Lauren, te conocí y me hiciste tan feliz... No puedo perderte.
-Mi amor tu no tienes que darme más-Estire mi brazo y comencé a acariciar su mejilla-Soy feliz, soy muy feliz-Me reí-Quiero que seas mi novia para siempre, quiero siempre despertar a tu lado y quiero reír junto a ti hasta que me muera.
***
-La vuelves a lastimar y te juro que...-Dinah no pudo terminar cuando Camila entró a la habitación y rápidamente la empujó a un lado. La Polinesia me tenía contra la pared a segundos de asesinarme.
-¿Estas bien? Dinah suele ser una bruta-Dijo más fuerte para que la más alta escuchara.
Todas las chicas se lo habían tomado de lo mejor, excepto la que más había tenido que soportar con la tristeza de Camila. Ella tenía una pelea mental entre sí abrazarnos y felicitarnos o si me asesinaba y me lanzaba por un río.
Camila se puso de puntas y suavemente beso mis labios hasta que Dinah fingió estar vomitando junto a Normani.
-¡Ya basta!-Grito Camila girando la cabeza sin dejar de rodear mi cuello con sus brazos-Apuesto a que ustedes dos se comen en la noche.
Rápidamente me sorprendió la respuesta de mi novia y mire a las dos morenas. Mani no dejaba de reír mientras que Dinah estaba sonrojada viendo a Camila como si ahora también la quisiera matar a ella.
Las risas pararon cuando el celular de mi novia nls interrumpió.
-Aló-Dijo ella con el ceño fruncido al igual que todas la veces que comenzaba una llamada-¡Oh! ¡Hola papi!
-Hola-Dije causando que Camila me mirara molesta y se fuera a otra habitación de la cabaña.
Ninguna de las chicas dejaba de reir y me imaginaba a Camila caminando enojada por toda la habitación como una bebé.
-You know-Les dije a las chicas-She call me Daddy.
-¡Lauren ya cállate!- Me grito en español mi latina causando mas risas aunque las morenas probablemente solo entendieron mi nombre.
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