Mi admirador secreto ||Niall Horan||.

#24. «Día normal».

Capitulo veinticuatro.

—Y esta es cuando paseabamos por la playa. Fue muy gentil el hombre que la saco –dijo mi madre mostrandome las fotos desde la camara. Estabamos ambas sentadas merendando chocolate caliente. Estaba helando afuera. Sonrio ya que Miami es tan hermoso. Las playas, todo. Además de que mamá y Yaser no perdieron el tiempo y se fueron a Disney.

—Que lindo, ma –le dije alegre.

Mi telefono vibra. Veo un mensaje de Eri. Hoy quedamos con mi mejor amiga de ir a comprar cosas para navidad. La cual sería en dos días. Yo ya compre el pasaje para irme con papá, y volvería luego de dos días.

— ¿Eri? –Me pregunta mamá. Asiento y una bocina se escucha afuera. Supe que era ella. Tomo el dinero que tengo, un abrigo y me despido de mamá. Para cuando yo volviera, ella estaría en el doctor haciendose unos chequeos. Subi al auto de mi amiga, bese su mejilla y arrancó hasta el centro comercial.

— ¿Qué compramos? Nuestro sobrino nacerá dentro de poco y no se que regalarle –se empezo a comer las uñas, nerviosa. Entramos en una tienda de bebés, y mpezamos a mirar todo. No faltaba un “aww” que salia de nuestra boca al ver las cosas tan pequeñitas. Yo me decidi en comprarle una camiseta que decia “si piensas que soy lindo, espera a ver a mi tía” Lo sé, esa me encanta. Y luego, Eri le compro un biberon. Sam y Marcus no han comprado absolutamente nada para el bebé, quieren concentrarse en terminar la escuela y luego le dedicaran tiempo. Pero hasta que eso pase, Eri y yo compraremos cosas para nuestro pequeño Gabe.

—Son $33 euros –me dijo. Le pague y guardo la camiseta en una bolsa.

La recibí con gusto, guarde el cambio y salimos. Ahora entramos a una tienda de hombre. Tendría que comprarle algo a Zayn. Me decidí por un reloj, y Eri miraba toda la tienda nerviosa. Mientras yo pagaba, ella elijio una chaqueta de cuero que tanto le gustaba a su novio. Otra vez recibimos las bolsas y nos fuimos. Ahora nos tocabamos nosotras. Pero no nos scondimos nada. Preferimos regarle a sam otro en secreto, mientras nosotras lo usabamos. Eran tres brazaletes que tenian un BBF en dijes. Y luego colgaba un corazón. La chica envolvio los brazaletes en dististas cajas y nos las llevamos. Ahora tendriamos que comprarle algo a mi nuevo hermano u hermana. El cual no tengo ni idea de que sexo es. Mamá no quiere saber, quiere llevarse una sorpresa. Tenía que ser algo unisex. Le compre unos jeans que me encantaron. Eran para cualquier sexo, así que no abria problema. Luego compre una gorrita que decia “Amo a mi hermana”. Esa si la usaría todo el tiempo. Bueno, creo que soy algo adicta a la ropa de bebé. Al terminar todo, vimos la hora, nueve en punto. Ya iban a cerrar. Subí a su auto, y me dejo en casa. Aproveche a que Zayn se estaba bañanado, Yaser estaba trabajando y mamá en el doctor, para ocultar los regalos. Metí todo debajo de la cama y baje las sabas para que no se dieran cuenta. ¿Y adonis? Lo que sé es que se lo deje encargada a mi abuela. ¡Me olvide de ir a buscarlo! <<Eres una mala madre, ____>> pensé. Tome mi telefono celular, y marque a mi abuela.

— ¿Hola? –escucho su voz.

— ¡Abuela! –dije suspirando–. Ya llegue. Ayer. Pero me olvide de llamarte para avisarte. ¿Cómo esta mi bebe?

—Está hermoso –dijo riendo–. Con tu abuelo, lo sacamos todos los días al parque y juega con otros perros. Le dimos un baño, y ahora esta pomposo. Mañana te lo llevaremos, ya es algo tarde y tu abuelo esta durmiendo.

—Ok, muchas gracias abuela –le dije sonriendo y corto el telefono. Mi abuela, era una señora bastante joven. Tuvo a mamá a los veinte años, y ahora tiene sesenta años. Pero se mantiene joven. Guardo mi telefono y me recuesto en mi cama. Mamá suelta un grito de “¡Llegue!” y bajo. Traia unas cajas con ella, y al parecer era… comida china. Que asco. Si, si esperaban un “mm, que delicioso” pues no, la odio con todo mi corazon.

—Mamá –le dije abrazandola–-. ¿Cómo te fue? ¿Qué te dijo?

—Está todo en orden, y para tener tres meses, está bastante bien. Se puede ver la cabecita, pero le dije que no quiero ver el sexo –dijo riendo. Dejo la comida sobre la mesa, y me preparé unos sandwichs. Ella sabe que odio la comida, pero no se porque la trae.

—Disculpa por traer comida china, solo que Yaser quería comer y pensé que ya habias superado tu odio hacia lo oriental –dijo riendo.

—Jamas –me negue–. Nunca dejare de tenerle asco al sushi. Es tan asqueroso como pueden comer pescado crudo.

—Ok, princesa –dijo y la puerta se abre dejando ver a un Yaser Malik, sonriente.

—Hola, amor –saluda a mi madre con un beso en los labios y yo susurro un “que asco”. Besa mi mejilla y luego se sienta en la mesa, junto a mí–. ¿Y Zayn?

—Se estaba bañando. Tiene una cita con su novia –le dije. Eri me habia comentado que se iba rapido porque tenia que ir a cenar con Zayn a un restaurante.

—Oh, ya entiendo –dijo y todos reimos. Se esucharon unas pisadas, y Zayn estba avestido con unos jeans, una camisa negra y una chaqueta de jeans. Peino su cabello, dejando ese mechon rubio bien levantado en forma de jopo, y luego agarró sus llaves.

—Vengo tarde, no me esperen –dijo y se fue. <<Wow, Zayn. No esperes, vete ahora, no hagas tantas despedidas>> pensé sarcastica. Empezamos a comer mientras mirabamos television y hablabamos. Pasar año nuevo con papá sería algo raro, porque nunca he conocido a Karen, su novia. Se que tienen algo desde hace mucho tiempo, pero nunca hablamos o me ha mostrao una foto de ella.

—Me voy a dormir, con permiso –dije y me fui a mi cuarto. Me coloque el pijama y mire la hora. Once y treinta. Habiamos comido helado que compro mamá esta mañana. Estaba cansada. Me eche a la cama y cerré los ojos. Fue facil dormirme.