Una Oportunidad ❄ NaruSasu

30

Delante del fuego. Naruto relató historias y chistes estúpidos, sin poder reprimir las risas que le causaba, tapó su boca. Naruto apartó la mano y dejó al descubierto su sonrisa, porque según él: "Eres demasiado hermoso para no poder apreciarte a cada segundo".

Sonrojado hasta las orejas obedeció, no ocultó su sonrisa y dejó que el brillo de sus dientes perlados se luciera, junto a sus delgados labios y rojizos como una fresa.

—Me duele...

Sasuke dejó de beber de su vaso y miró preocupado a Naruto.

—¿Qué te duele?

—Me duele que estés tan lejos de mí pero te sienta tan cerca.

Un poco confuso para Sasuke. Que aun así se arrodillo frente al rubio y besó el dorso de su mano.

—¿Ahora estas mejor? –preguntó satisfecho al ver al otro feliz.

—Mucho mejor –asintió reafirmando su sonrisa. Tomo de las mejillas a Sasuke y lo observó fijamente. —. Me alegra saber que solo yo puedo conocer esta parte cursi de ti.

—No te sientas tan especial –rodó los ojos y volvió a tomar su postura normal. —, aunque no te equivocas del todo.

Naruto infló sus mejillas y como un niño haciendo su berrinche jalo de las ropas del azabache.

—¿No soy el dueño de tu cursilería? –fingió tristeza.

—No.

La respuesta llegó a él como un balde de agua fría, bajo la cabeza desganado, sintiendo los delgados y fríos dedos de Sasuke levantar su mentón.

—Pero si el único que la merece realmente –completó, apoderándose de los carnosos labios de Naruto.

Correspondió el gesto con gusto, delineando con su lengua los labios de Sasuke. Pidiendo silenciosamente que abriera su boca, y así lo hizo, adentrando su lengua en la cálida cavidad bucal.

Naruto fue el primero en romper el contacto, cada segundo el momento se volvía más íntimo. Sentía nervios por el intenso silencio y carraspeo su garganta.

—Me encantan los momentos que paso contigo, Sasuke –recostó la cabeza en el pecho del aludido. —. Me siento en completa paz, excepto cuando me golpeas –añadió divertido. Recibiendo un golpe en la frente. —. Auch.

—Te lo mereces por idiota.

—¿Y no merezco un beso? –levantó sus labios, pidiendo que estos fueran besados.

Sasuke cerró los ojos y beso la frente de Naruto, justo en la zona donde había golpeado.

—No es lo que esperaba... pero estoy satisfecho.

Acomodó los cabellos rubios y con una sonrisa en su rostro, besó los labios de Naruto.

—Agradezco que por fin me correspondieras, Naruto.

—Lo siento si te hice sufrir mucho –elevo la mirada y miró el rostro tranquilo del azabache.

—Eso fue lo que hizo que nunca me rindiera.

Un recuerdo surco sus pensamientos, regresando al tiempo de su infancia. El niño que luchaba por sobresalir sin quedar estancado. Se vio a sí mismo en las palabras del Uchiha y sonrió orgulloso, Sasuke no descansaría hasta obtener lo que quisiera.

«En verdad eres perfecto, Teme»