- Capítulo 5 -

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Llegué a mi casa directo a mi cama, ni me cambié; lo único que quería era dormir y borrar este día, lo que ella dijo me hizo sentir mal; en mi vida han pasado varias mujeres, algunas duraron semanas a diferencia de otras, siempre que necesitaba sexo salía por ahí y terminaba con alguna en el hotel, nunca he traído a nadie a mi casa; las usaba como desahogo y ya está, no había necesidad de traerlas para eso a mí espacio personal, así que cuando ella dijo la hice sentir como que no vale nada, entendí ella tenía razón, la traté como seguro la han tratado muchas, yo quería ser diferente; pero mi enojo me cegó y cometí un error enorme, lo peor es que no querrá verme más y yo a ella sí, había puesto esa cantidad porque no sabía cuánto era y dos fue la rabia controlándome.

No podía dormir pensando en lo ocurrido pero de alguna forma lo logré, así que cuando mi despertador sonó, estaba muy irritada; me sentía agotada y no quería levantarme, me duché y me coloqué lo primero que encontré y me fui al Hotel, la cara de Angie al verme fue demasiado.

"¿Mal día?" pregunta "No quiero hablar de ello, tráeme urgente un café; necesito terminar de despertarme, aparte necesito firmar unos papeles y consígueme un boleto para Miami" le pido "¿Para salir luego de medio día?" ya conociéndome bien "Me parece bien, por otro lado; no vayas a notificar a nadie de mi vuelo, quiero hacer una inspección sorpresa al personal" le digo, ella asiente "Bien organizaré todo, una vez que tenga nuestros boletos te aviso" cierto, siempre me acompaña "Iré sola Angie, sólo quiero ver algunas cosas en el hotel, pero en realidad voy directo a casa, han insistido que no paso tiempo con ellos, pues bien ¡Sorpresa! me tendrán una semana" diciendo con falso entusiasmo "Está bien, ya me encargo de todo y envió un café para ti" dice, mientras yo salgó de su oficina "Gracias" digo ya de último.

Me fui directo a mi oficina, organicé unas citas en Miami, tanto de salud como de placer, necesito tener cosas que hacer o estando encerrada me volveré loca, quiero alejarme un poco y darle espacio a Amelia, al volver sé que la buscaré y espero ella quiera verme. Por suerte Angie me consiguió un vuelo a las dos de la tarde, así que me fui directo a casa; bueno eso era mi idea, pero manejé hasta casa de Amelia, obviamente no subí ni nada, tuve la intención pero no lo hice, en cambio estuve unos minutos en el coche y luego decidí irme a mi casa, hice la maleta y esperé a que Angie me recogiera para llevarme al aeropuerto, durante el camino no dejaba de preguntarme si todo iba bien ¿Tan mal me veo? La verdad no quiero saberlo, fui por mi boleto y entregué la maleta, durante la corta espera le di indicaciones ha Angie, confió en ella y sé que si surge un problema lo solucionara sola y si no me llamaría, me despido de ella y me voy abordar.

Cuando llegue a Miami fui directo a casa de mis padres, dormí durante mi vuelo de tres horas, el Uber me dejó en la entrada, aún tengo llaves así que tomé mi maleta y entré al salón, no se escuchaba ni un solo ruido, no es de extrañarse casi nunca están, subí a la que era mi habitación y está intacta, como si no me hubiese ido nunca; me di una ducha y me puse el pijama, pensé en bajar y ver si habían llegado, pero opté por dormir.

A la mañana siguiente una vez bañada y lista bajé a desayunar, ya se escuchan voces así que asumo no estoy sola, cuando entro a la cocina veo a todos trabajando y preparando algo, le pregunto a una de las mujeres que estaban ahí por mis padres y me dice que ya están en la mesa, le sonrió y voy en busca de ellos, veo a mi padre con su café y el periódico, mientras mi madre tiene su típico té y unos papeles, cuando les grito ¡Sorpresa! Veo la cara de susto de ambos, se dan cuenta que soy yo y se levantan a saludarme.

"¿Cuándo has llegado?" pregunta mi padre "Anoche, creo ustedes no estaban, me fui a descansar temprano" le respondo "Catherine de saber vendrías preparábamos algo" dice mi madre, mientras me inclino a darle un beso "No pasa nada, ahora porque no desayunamos y me ponen al corriente de todo lo que pasa aquí" digo tomando asiento en la mesa, así desayunamos juntos.

Mi Vida Entre Tus Piernas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora