Corrió la noticia de que el diablo estaba liquidando sus herramientas de trabajo porque preparaba su retiro para dejar paso a las nuevas generaciones. Así, llegado el día de la venta, en el suelo de su caverna estaban desplegados todos sus utensilios: el odio, los celos, la envidia, la malicia, el engaño y muchas otras armas para hacer el mal.
En un rincón, apartada de las demás, se encontraba una herramienta bastante más gastada que el resto. Pese a ello, llamó poderosamente la atención de todos los presentes, pero su precio era tan elevado que nadie pudo pagarlo. Extrañados de ello, le preguntaron al diablo cuál era el nombre de este lujoso objeto y el porqué de su desorbitado coste.
Entonces, el biablo les respondió: «Esto que deseáis se llama desaliento y es tan caro porque es la herramienta más útil de todas con las que trabajo: cuando las demás fallan, con ésta puedo doblegar las conciencias más firmes y, entonces, hacer con ellas lo que me place. Muy pocos saben que poseo esta arma y por eso puedo controlarlos».
Si bien hay muchas razones para caer en el desaliento (el trabajo, la familia, los amigos...), mantente siempre firme y persiste en el esfuerzo para superarlo.
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¿Una vuelta de tuerca? {Terminada}
Random¿Qué te parece darle una vuelta de tuerca a esos actos cotidianos? Te invito a que te emociones descubriendo las boberías que me atormentan; leyendo los cuentos que se me ocurren; hablando de los disparates que suceden en el mundo; destapando histor...