ঔৣ 12장

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Pov JiMin

¡Rayos! ¿Cómo pudo mi Mate con tan solo trece años pudo ponerme tan duro?.

Por desgracia, mi naturaleza me ponía peor que un humano en estas circunstancias. No sé cómo pude conseguir el control suficiente para no hacerla mía en cuanto pude, si fuera NamJoon, hubriera pasado un montón de cosas.

Pov Tn

Tapé mis oídos esperando a que JiMin saliera del baño. Este cabaña era prácticamente la única por este bosque, por lo que de seguro, solo se escuchaban sus gemidos fuera de esta.

Este momento era realmente morboso.

Había pasado como media hora, y creo que ahora él podría estar mejor. Y en cuanto lo pensé, él salió tranquilo y un poco agitado del baño.

Dios, qué vergüenza.

- ¿Qué haces? -preguntó él, yo estaba con la cabeza escondida en mis piernas mientras las abrazaba- ¡Hey! -movió mi hombro haciendo que levantara mi rostro, pero aún así me negué a mirarlo.

- Lo siento -musité como pude- No debí hacer eso -sentí como mis mejillas comenzaban calentarse. Esperaba una actitud distante o incómodas palabras cortantes, pero lo único que escuché de él fue una risa dejándome confundida- ¿De qué te ríes? Esto no es gracioso.

- Tn, es normal ¿Sí?. Soy hombre por lo tanto soy muy sensible en esa parte. ¿No dicen que la carne es débil?... pues, justamente me pasó a mí, no es nada del otro mundo -lo miré aún desconfiada- Ven... -tiró de mi mano y me llevó al sofá, pero esta vez me senté bien y tomando distancia- Estás tan callada...

Me miró divertido, como si le encantara verme en este estado.

- Solo es vergüenza -murmuré mirando mis dedos.

Él se paró y se puso de cunclillas frente mío, mostrándome una pequeña sonrisa, dijo:

- No tienes por qué asustarte. Es demasiado normal, créeme -abrió sus brazos dándome a entender que quería que lo abrazara -No te haré nada -no le hice caso, así que fue él fue quién me abrazó- Eres muy tierna ¿Sabes?.

Rodé los ojos aguantándome las ganas de contradecirlo por ese último, pero para mi desgracia, aún me sentía muda y un tanto cohibida.

Desde ese momento había dejado hablar con él, me moría de vergüenza.

Vergüenza que duró un par de días.

¿Confundida? Peor que un laberinto.

Desde ese día estaba más que segura de antemano, que algo cambiaría entre nosotros, pero no. A pesar, de ese momento tan incómodo, JiMin se las había arreglado para volver a hablarme como si nada hubiese pasado.

Nuestra extraña relación había cambiado un poco. Sólo con la diferencia de que a menudo solía robarme uno que otro beso, mientras bromeábamos, y a espaldas de su hermano.

JiMin sabía que no estaba tan de acuerdo con que me besara, creí habérselo drjado en claro en aquella breve conversación, por lo que me hacía reír en seguida, pero lo gracioso aquí era que al final, yo acababa como él al principio, robándole algunos besos de la misma forma.

Y a medida que pasaba eso, no podía negar que lo que había comenzado como una ilusión como el resto, esta iba creciendo de una forma raramente fuerte.

Ya no podía ocultarlo más, me sentía impotente al no poder decírselo. Esperaba el momento adecuado para conversar de eso, pero jamás se presentaba uno.

Mi pequeña MATE [JIMIN] [PRIMERA TEMPORADA] [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora