Mi pequeña MATE [JIMIN] [PRIMERA TEMPORADA] [EDITANDO]

ঔৣ 64장

Pov Jimin

Hace aproximádamente media hora había llegado a mi casa después de haber dado un largo pero confiable discurso de disculpas hacia los omegas que habían sido lastimados a causa mía. No era mi intención hacerla tan larga, simplemente se dió.

¿Qué pasó?

Pues nada del otro mundo, había llegado enojado a revisar las cosas en mi manada, porque mi padre seguía insistiéndome con lo de la ceremonia, (y quien prometió volver a hablar conmigo al notar lo enfurecido que mi lobo me había puesto ante su presión) y que el congreso de Alfa de Alfas me había dado un plazo de un mes para poder realizar la ceremonia, y presentar a Tn, como la Luna de mi manada.

No importa cuanta sea la incomodidad que me cause alguien, mi lobo tomaría el control de mí nuevamente.

Todo se había atrasado por lo que le ocurría a mi Mate, y no la culpo por lo que le haya pasado. Todo había resultado ser una desgracia y cosa del destino.

Escuché la puerta ser golpeada por unos demandantes golpes, mis oídos se agudizaron al mismo tiempo que mi olfato.

La abrí y mi padre entró con el ceño fruncido asercándose a mí para luego tirarme al piso con fuerte golpe en el rostro.

- ¡¿Cómo demonios te atreves a no poner más exigencia en la búsqueda de esos cachorros?! .-sobé mi mejilla con cierto miedo de lo que me podría hacer mi padre-. Párate de una vez .-me samaqueó del brazo bruscamente y me safé de la misma forma de su agarre.

- Mandé a los omegas más preparados para la búsqueda .-encaré defendiéndome. Si bien mi lobo no reaccionaba tan agresivamente por el hecho de ser mi padre y de que fue Alfa, no iba a dejar de que me gritara así sabiendo que yo ocuparía su título pronto.

- ¿Es enserio? .-ironizó aun más furioso que cuando llegó-. Jimin, no por nada la Luna te escogió a ti para ser el Alfa de nuestra manada ¿Me escuchaste? Asi que pon bien tus pies en la maldita tierra y date cuenta que ese caso lleva casi un mes sin resolverse .-rugió-. No puedes hacer que esta irresponsabilidad tuya crezca más. No puedo tener un día satisfactoriamente tranquilo recibiendo la misma respuesta de tu Beta cada vez que le pregunto por el caso, esto lo tienes que tratar tú no los omegas..

- Esto es algo que pronto estará totalmente a mi cargo, asi que yo soy el que lo resolverá sin ayuda de nadie.-gruñí enfadado con mi ceño más fruncido que el de él. Mi lobo comenzaba a despertar nuevamente y el odioso calor comenzaba a llenar cada parte de mi cuerpo.

- El puesto honorable de Alfa no es un jodido juego Jimin .-dió un paso hacia a mí retándome con la mirada. Si lo que quería es que sea sumiso ante él y accediera a todo lo que él me dijera, estaba muy equivocado.

- Créeme cuando te digo que no lo és padre.-respondí con el mismo tono amenzante que utilizó, entredientes continué con mi respuesta-. Mi Mate está en peligro por los miserables de los desterrados. Tengo pruebas de fueron ellos quienes secuestraron a los niños, y yo sé lo que haré en su debido momento. Créeme que con mi Mate nadie se lo toma a juego...

Mi padre se mantenía absoltutamente serio, estaba enfadado y ¿quién no?. Sabía que lo más probable esté despcionado de mí por no hacer las cosas a sus espectativas, pero de este caso también depende la vida de la chica a la que amo, y quien pronto será totalmente y únicamente mi Luna, mi diosa, mi reina...

《Mataremos a lo que queda de los desterrados para poner más a salvo a nuestra Mate》.-decidió nuevamente mi lobo en mi subconciencia.

De hecho esta desición la tenía desde mi niña partió rumbo a Italia. Mientras ella estaría recuperándose mentalmente -y que me arrepiento de cierta parte, ya que no la tengo a mi lado- yo iba a encargarme de matar a todo aquel que me intentara lastimarla y creara calumnias sobre ella. Sarta de basura.

Ya me había dehasido de una parte, y no me arrepiento...

Y lo seguiré haciendo con todo aquel que se atreva a interferir entre mi pequeña Luna y yo.

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Mi padre decidió que iríamos a hacer una guardia de inmediato. Estaba totalmente cansado y estresado, y cmo no, a un hilo de mi impaciencia. El calor se mantenía aún fogoso dentro de mis venas y mi estómago, esto era realmente enfermizo.

Podía sentir el aura de mi padre aún alterado, parecía que quería ayudar pero aún así tenía esa quisquillosa actitud de querer darme una lección. No quería pelear más, suficiente tuve con algunas horas atrás, asi que acepté sin requintar.

Eran un aproximado de las diez y media de la noche, mi padre y yo estábamos ahora en nuestras fotmas lobunas, inspeccionando como los omegas hacían su trabajo, y claro que también nosotros copiábamos su guardia.

Nuevamente la luz de la Luna, hizo inundar fabulosos recuerdos con Tn, fue inevitable hacer una ligera mueca en mi hocico, siempre mi interior se volvía sumiso cuando la recordaba, y ala vez se me formaba un horrible dolor de pecho en mis adentros.

Extrañaba verla sonreir, acariciar sus cabellos oscuros, sentir su suave piel ligeramente bronceada como la mía. Anhelaba volver a sentirla... la extrañaba muchísimo.

Cuanto deseaba tenerla cerca conmigo ahora, yo sabía que sólo ella ponía domarme y traerme una tranquilidad totalmente eficaz.

Pero no...

Trataría de esperar por ella...

La noche paso rápido, hubo algunos choques de carácter con mi padre mientras entablabamos un tema de conversación pero gracias al cielo que mi lobo no fue tan agresivo y pude tenerlo bajo mi control.
Le conté a mi padre todo lo que pasó entre mi Mate y yo, vaya fue la sorpresa que se exaltó -bueno un poco, pero no tanto- él concordaba con todo lo que yo sentía, no sabía como pero lo hizo.

Casi terminando la guardia, mi padre y yo conversábamos cautelosamente por sobre como había a los miserables que intentaron quitarme la cercanía con mi Tn, y este se dispuso a ayudarme con la búsqueda del resto de aquellos malditos, sólo con la búsqueda, porque quien los haría pagar con sus propias manos, sería yo.