Mi pequeña MATE [JIMIN] [PRIMERA TEMPORADA] [EDITANDO]

ঔৣ 31장

Kim Tn

— Este adefecio no reservó lo que pedí.

— Tampoco habían asientos libres a diez metros. No seas mamón, hyung.

— Pero, y ¿Para qué nos quieres tan lejos? –pregunta su hermana– ¿No te basta con tenerla todo el día pegado como chicle? Déjala respirar. No se va a morir por un minuto que no estén solos.

— No. Créeme, sí se va a morir –le contesta él.

— Hyung. Apúrate. En media hora empieza –hace berrinche Kook– Es eso. ¿Lo toma o lo dejas?

JiMin pone mala cara y toma nuestros boletos de golpe, haciendo sonreír a su hermano.

— Ya luego practican. Ahora, vamos a comprar comida.

— ¿Cómo no engordas? –murmura su heermana.

— La envidia, ¿No beibi?

— Cállate.

— Amor, iré al baño al primero –dice HyunA mirando a Nam– ¿Vamos?

Nos mira a Wen y a mí a lo que asentimos.

— ¿Por qué las chicas van en grupo?
¿Qué hacen tanto? –pregunta Kook.

— Cosas –responde Wen.

— Ya vuelvo –me separo de JiMin.

— Vuelve pronto o me me moriré y será tu culpa.

JungKook le pega en la espalda.

— Compórtate. A veces, me avergüenzas.

— JungKook, ya –le calma Nam– Iremos por botanas. Nos encontramos aquí o en la fila.

HyunA asiente cogiendo nuestros brazos para ir a los servicios. Cada quien entramos por precaución, y salgo primero con Wen.

— Tn, ¿Cómo toleras al feto mayor?

Me mojo las manos.

— La pregunta es: ¿Cómo me tolera él a mí?

Arquea una ceja.

— Tu hermano no es taaan fastidioso como lo hacen ver ustedes –exagero– Es muy lindo.

Me sonrojo escuchando una arcada de su parte.

— Lo dices porque no vives con él 24/7.

— Exacto. Soy su enamorada, no su hermana.

— Cuando crezcas serás su esposa y créeme... no lo querrás tener cerca.

— Creo que exageras –me río– Sabremos como darnos nuestro espacio y... experimentar varias cosas también.

— Tn tiene razón –dice HyunA saliendo del baño– Eso más bien lo dices tú, porque no encuentras a tu Mate.

Wen hace una mueca haciendo que HyunA ría con gracia.

— Ay, Wen. No cambias –se lava las manos– Deja que las cosas fluyan. No te estreses por eso.

— A veces, creo que no estoy hecha para ésto. Te veo a ti y a Tn, y creo que me aburriré de tanto amor a los tres meses.

— Pero, es porque no lo tienes aún –continúa la peliroja– Créeme que la cosa cambiará cuando lo tengas enfrente. Incluso, querrás que te haga más de un hijo.

— ¡Ahg! ¡No! Anulo todo tipo de maldición.

— Ah, verdad que eras conservadora –se arregla el cabello.

— Y aún así, creo que no estaría lista para un bebé. Tengo experiencia con mi hermano y no. Lloran demasiado, hay que cargarles, limpiarles su mierdilla, y no. No es lo que quiero. Thank u, next.