"Síndrome De Géminis"

«Capitulo 21»

"Días de un futuro cercano Pt.3"

Terminé por abandonar el Instituto aún con mis buenas calificaciones, Mr. Shining aún así me dejará retornar cuando el bebé nazca para poder seguir con mi estudio, mientras tanto, Natsuki se mantendrá estudiando aunque a regaña dientes ya que mi Padre le "dijo" que mi futuro esposo necesitaría buenos estudios a pesar de todo por lo que Satsuki en ese entonces trató de negarse diciendo que ahora necesitaba encargarse del bebé mas mis Padres terminaron negándose diciendo que en los meses que durara la gestación ellos se encargarían ¿Y pude decir algo? Claro que no, aquí soy el "niño embarazado que no puede hacer nada por 9 meses" ¡¡No es justo!! Mantenerme en cama no es algo que me alegre, necesito hacer nuevamente mis entrenamientos y leí hace pocos días que no era malo realizarlo mientras se esperaba un bebé, aunque con moderación claro.... pero su lema fue.

"Eres hombre y tu embarazo es un poco más peligroso que el de las mujeres, ahora sientate y sigue comiendo, Syo"

Amo a mis Padres pero están como locos con lo del bebé,  primero los regaños que terminaron dandole a Natsuki mientras yo era "mimado/obligado". La idea de esperar un bebé me asustaba bastante por aue aún era muy joven para ello pero supongo que sólo bastó una noche de amor para formar algo dentro de mi.

Suspire agotado nuevamente y voltee a mirar a mi madre que estaba facinada con una revista de maternidad mientras yo moría de vergüenza y la verdad no se si en su momento era pena ajena. En aquel momento Natsuki seguía en el Instituto pero conociendolo debe estar como loco por salir y venir a verme aunque todavía no quiero distraerle a pesar de que algunos días he deseado tenerle todo el tiempo a mi lado.

Rodé en el sofá,ya llevaba 3 meses de gestación y por suerte las nauseas habían terminado por lo que podía descansar sin sentirme mal cada cinco minutos por las estas, ahora me enfocaba más que todo en comer aunque me resultaba algo incómodo, más que todo por el hecho de que sabía iba a engordar y al nacer el bebé mi cuerpo quedaría no físicamente bueno, me refiero al hecho de que mi condición física se irá a la basura y tendré que comenzar nuevamente una vez sea sólo yo. Aunque, pensandolo bien, hasta ahora me he puesto a pensar como será el bebé, ¿Será niño o niña? ¿Se parecerá más a Natsuki o a mi? ¿Será tranquila como él o histérica como yo? Reí avergonzado ante mi pensamiento al admitir que realmente yo estaba loco.

Al pasar de las horas logré quedarme dormido mas mi sueño fue interrumpido por pequeños besos, era raro pero reconfortante aunque lo suficientemente notorios para que mis ojos terminaran entreabriendose poco a poco pudiendo divisar a un sonriente Natsuki que me miraba con tenura. Debía admitir que el observarle de aquella manera me animaba y alegraba mis días por muy grises que fueran, también,  me di cuenta que el sentimiento que tenía por él no era un simple querer si no que sentía un amor muy grande por él  que me hacía sentir completo. Mas sabía que aún no teníamos edad suficiente para tener una familia, pero como dijo Natsuki "Un día más y un día menor no harán gran diferencia. No somos tan viejos pero tampoco tan jovenes para realizar ésta gran hazaña..." Ignorando mis pensamientos sujete su rostro con mis manos para depositar un beso en sus labios pero mi padre llegó casi jalando a Natsuki para que se alejara de mi y ser él quien estuviese sentado a mi lado.

-Eres malo, Otosan.

-Mientras no estén casados o yo presente no tienen derecho a besarse, Natsuki tuvo un derecho mayor...

Sabía exactamente a lo que se refería y eso me hizo sonrojarme en sobremanera por lo que emiti un siave suspiro volteando a mirar a un tranquilo Natsuki que tan sólo reía por las palabras de mi padre.

-El día que Syo-chan y yo nos casemos él será solo mío.

Ambos rieron divertidos menos yo que moríade verguenza por sus palabras y ellos parecían no percatarse de ello o simplemente lo hacían a propósito por lo que me levanté del sofá dejandoles platicar a gusto para ir a la cocina donde encontré a mi madre cocinando un delicioso Shortcake de frutos rojos que hizo que aquello llamado "antojos" me diera por primera vez por lo que me acerqué mirandola unos segundos mientras acariciaba mi vientre cuando su mirada de pronto se enfocó en mi.

-Pronto estará,  no desesperes...Sólo unas decoraciones más y estará listo para quelo devores.

-¿Es para mi?

-Era para la hora del té pero por la manera en la que lo miras me di cuenta que voy a tener que preparar otro.

Reí apenas mientras mi madre depositaba un beso en mi frente entregandome un trozo del pastel, sin dudarlo lo tomé caminando a la sala donde mi Padre y Natsuki aún conversaban sobre el hogar al que ambos iríamos a vivir con nuestro bebé.

-Kurusu-sama, el bebé debe estar protegido pero sin tantos lujos, ¿No cree? Una casa de un tamaño adecuado para que él pueda jugar será perfecta.

-Pero una casa grande con más habitaciones sería mejor para cuando la familia aumente de uno a más nietos.

Fue inevitable para mi el casi no ahogarme con el pastel mientras miraba a ambos que me observaban con una sonrisa, ¿Es en serio? Su primer nieto no había ni nacido y ya había pensado en unos 20 más....ahora entiendo por que se llevan tan bien.