Me despierto a la mitad de la noche, llorando desconsoladamente por la pesadilla que tuve de Scott haciéndome cosas que solía hacerme, cosas que me atormentan cada segundo de cada día.
Intento ahogar mi llanto mientras me hago un ovillo sobre mi lugar y tapo mi rostro con los puños de mi abrigo, los cuales atrapan cada lágrima que sale de mis ojos.
Siento un tacto sobre mi hombro y miro a este, encontrándome con una mano, sigo el brazo que la tiene hasta encontrarme con el rostro del cazador — Lo lamentó si te desperté. — le digo mientras sorbo mi nariz.
— No importa. — asegura con la voz tan calmada que me ayuda tan solo escucharla — Podemos irnos ahora si no te gusta estar acá. — me ofrece — De todas formas nos tendremos que ir en unas horas.
— Me gustaría irme de este lugar y no volverlo a ver. — murmuró con neutralidad pero con la voz temblorosa.
Daryl se aparta de mi cuerpo y va hacia Rick, mientras yo me levanto y acomodo mi ropa.
— ¿Que hora es? — le pregunta Grimes a Dixon y volteo a verlos.
— Cuatro y media, o cinco. — contestó la pregunta de Rick — Iré a ver las provisiones. — les aviso y me voy antes de que puedan acceder o negarse.
Llego a la sala de provisiones que está al lado de la cocina improvisada. Sé donde está porque no solo nos mantenían cautivas y violaban, también nos tenían de simples esclavas. Nos hacían cocinar almuerzo y cena, muchas veces limpiar, y lo peor es que teníamos que hacerlo como siempre estábamos, semidesnudas. Pocas veces se dignaban a darnos remeras o ropa interior medianamente nueva.
No éramos nada más que servicio y diversión para ellos.
Cierro los ojos tratando de quitar todos los horribles recuerdos del camino pero, cuando piso la cocina, llegan otros. Recuerdo como todos nos miraban cocinar y se reían de nosotras, como nos toqueteaban, y si nos defendíamos, si decíamos algo, nos mandaban a aislamiento o cosas peores.
Ladeó la cabeza y continuó con las manos temblorosas hasta la despensa de comida. La abro y me extraño a encontrar solo dos potes vacíos. Salgo al pasillo, donde me encuentro a Daryl y Rick, y niego extrañada, indicándoles que no hay comida donde debería haber — Quizás aún queden armas. — digo mientras voy al fondo del pasillo donde creo que guardaban los autos. En está parte no anduve mucho.
Me encuentro con una camion mediano blanco que nunca había visto. Me acerco para ver el asiento de conductor donde no hay más que sangre. Escucho como mis acompañantes entran a la habitación y abren la parte de atrás del camión.
Unas pequeñas risas de felicidad por parte de Rick alegran el tétrico ambiente y me acerco. Veo que el camión está lleno de comida, armas y balas, entre otras cosas. Sonrío un poco, a la par de ellos — Vayamos partiendo. — dice Rick antes de cerrar el camión con una sonrisa.
Subo de primer copiloto, quedando en el medio, y Daryl va al lado mío, Rick sube en el asiento de conductor. Prende al segundo intento la camioneta y comenzamos el viaje por la ruta, la cual se va aclarando gracias a la llegada del sol. Me alegro de dejar ese lugar, más al saber que nunca tendré que volver.
— ¿Que pasara con el auto? — les pregunto — No podemos perder ese energético CD de música. — me burlo de Grimes y este sonríe, negando.
— Es buena música. Es que vos y Daryl no tienen buen gusto. — dice con una media sonrisa — Podemos buscarlo otro día, está bien escondido. — dice Rick nuevamente atento al camino.
Después de minutos en la carretera, el sueño me gana y cierro los ojos pero no me quedo completamente dormida, aunque si descanso en el hombro de Daryl.
— ¿Estas sintiendo algo por ella? — escucho que Rick le pregunta al hombre que me presta su hombro como almohada en estos momentos.
— No, yo... no lo sé, hombre. — dice y quiero sonreír pero no lo hago ya que estoy en ese momento donde estás despierta pero consiente de tu alrededor, por lo que no puedo hacer movimientos más que los involuntarios.
— Está bien si lo haces, — asegura con un tono de voz más comprensivo que el usual — pero no estoy seguro de que ella pueda estar en algo como a vos quizás te gustaría.
— ¿A que te referís? — pregunta, sospechando a que se refiere.
— Que no creo que ella... — balbucea —Quizás no quiera solo...
— Pensas que solo quiero sexo con ella. — afirma, haciendo notar que se siente insultado por lo que insinuó su compañero.
— No... no lo sé. — Rick suspira con cansancio, obviamente emboscado por la afirmación de Dixon — Pero, Daryl, es obvio lo que le hicieron. No creo que pueda recuperarse de lo que le pasó tan fácilmente. — con esas palabras me siento un poco afligida, pero me hacen pensar en algo que no había pensado; sexo.
No sé si pueda, con todo lo que me hicieron. Quizás, dentro de un tiempo, pero ahora no, creo.
Se crea un solido silencio y se mantiene por largos minutos hasta que Daryl vuelve a hablar — Frena ahí, necesito ver algo. — dice y Rick hace caso.
Daryl va saliendo mientras me acomoda sobre el sillón, cuidando de no despertarme en el proceso. Cuando estoy completamente acostada, mueve un mechón que tengo en el rostro para detrás de mi oreja, sorprendiéndome con su tacto, asumo que Rick no está, supongo que no lo haría si fuese de otra forma.
Termino por dormirme completamente a los pocos segundos, ya completamente acostada y sin conversaciones a mi alrededor.
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Y, al tercer día, Maitén subió un capítulo. Y fue bueno... mejor dicho, regular.
Ahora ¡Daryl quiere algo con Sky! ¡Esto no es un simulacro! Repito ¡Esto no es un simulacro!
Ahora, gente hermosa del otro lado de la pantalla es el tiempo de -redobles por favor- *redobles con cacerolas y cucharas porque no hay presupuesto para una batería*, las preguntas.
¿Sky y Daryl están sentados en el árbol de los enamorados? Bue, no.
¿Creen que Sky esté lista para confiar en alguien más luego de todo lo que le paso?
¿Para ustedes, como sería Daryl enamorado? [Yo digo que protector pero distanciado, por lo menos al principio]
Buenos, eso es todo. Nos vemos en [aproximadamente] cinco o seis días.
Besos ♡
Mai[tén]
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Sky. [Daryl Dixon]
FanfictionEl cielo, durante el día, tiene muchas etapas; todas únicas y hermosas. Por eso ella se llama así, Sky. Al igual que el cielo, ella tiene distintas etapas y colores, todos únicos, hermosos. Todos igual de fascinantes para el frío cazador Daryl Dixon...