Empezó el tercer curso y con él las pruebas de Quidditch y las clases aburridas de Historia de la Magia con el Profesor Binns. Lily había estado pensando todo el verano si presentarse a las pruebas para el equipo de Quidditch de Gryffindor, cosa que decidió cuando McGonagall envió a Louis una carta diciéndole que ese año sería el capitán. Había entrenado mucho con su nueva Nimbus 2023 que le había regalado su padre por su 13 cumpleaños. Un pergamino en el tablón de la Sala Común la mañana del primer día de clases, les comunicó que las pruebas serían el día 4 de Septiembre. Lily sonreía al leer esa nota. Bajó a desayunar con Hugo y Priscila y recibió su nuevo horario. McGonagall le pidió que la acompañara a su despacho y ella la siguió. Estuvieron hablando sobre el horario de la pequeña ya que Lily había elegido Aritmancia y Estudios Muggles en lugar de Adivinación y Cuidado de Criaturas Mágicas y, al parecer, era la única de tercer curso que había elegido esas asignaturas, por lo que sus clases serían únicamente para ella y la beneficiarían en los TIMOs dos años después. Se despidieron y la ex Jefa de Gryffindor le deseó suerte en las pruebas de Quidditch. A esas alturas todos sabían que Lily se presentaría a las pruebas. El año anterior no lo hizo porque estaba demasiado pendiente de sus estudios y no le apetecía formar parte del equipo y tampoco asistía a los partidos. Había estado en una fase muy poco agradable pero se había recuperado gracias al apoyo de su primo y su mejor amiga. Ese iba a ser su año. Su cambio físico, su cambio de personalidad y todo lo demás era lo que necesitaba para madurar.
Pasaron los días y las pruebas se abalanzaron sobre ella como una lluvia de agua fría. Habían pasado los días demasiado rápido. No había tenido tiempo de volar en el campo de Quidditch pero no le importaba. O eso era lo que parecía. El día de las pruebas bajó a desayunar con la equipación de Gryffindor. Le quedaba genial. El jersey se pegaba a su cuerpo y fomentaba sus curvas recién adquiridas. Todos los chicos volteaban para verla hasta que Louis, después de que sus mejores amigos le dijeran “Tu hermana ha crecido mucho. Podrías decirle que se pase por nuestro dormitorio un día, ya sabes.” y él les propinara sendos puñetazos a cada uno, gritara en el Gran Comedor “¡Ya está bien! ¡Que nadie vuelva a mirar a mi hermana! ¡Quién lo haga que se atenga a las consecuencias!”. Esa actuación “heroica” hizo que Lily mirara a su hermano con todo el odio con el que fue capaz. No obstante, bajaron juntos al campo de Quidditch.
- Lily, perdóname, pero tenía que hacerlo. Soy tu hermano mayor y…
- Y ¡NADA! Louis, sé cuidarme solita. Gracias. De todas formas, gracias. – Lily abrazó a su hermano y éste, impresionado por la reacción de su hermana, ya que pensaba que se llevaría un puñetazo como mínimo, respondió a su abrazo.
Llegaron al campo de Quidditch dónde ya estaban algunos de los que iban a presenciar las pruebas y animar. También había en los vestuarios varios de los apuntados para presentarse a las pruebas. Lily estaba nerviosa y, aunque intentó que no se notara, no engañó a su hermano.
- Lils, tranquila. Lo harás genial. Llevo años viéndote volar. Sé que lo harás bien. No me defraudes.
- Estoy tranquila, hermanito. Y no te voy a defraudar. Te voy a quitar el puesto de “mejor jugador de la familia Potter”.
- Oh, no, no lo harás. Zayn no lo consiguió y no lo harás tú.
- Ya veremos. – Y salió del vestuario, dejando a su hermano sin palabras.
Lily observó el campo con el que había soñado tantas veces que veía desde el cielo.
- Vamos a comenzar. Ya sabéis que haber formado parte del equipo en años anteriores no garantiza vuestra continuación este curso. Y los elegidos los publicaré en el Tablón de la Sala Común cuando todas las pruebas finalicen. Bueno, comenzaremos con los que se presentan para cazadores. Ya sabéis que sólo necesitamos a dos, puesto que yo soy el tercero. – Lily se situó en unos de los laterales mientras esperaba su turno, ya que ella se presentaba para buscadora. Su novio, Peter, estaba jugando muy bien como cazador pero falló en una recepción. Aún así, era de los mejores.
- Muy bien, podéis marcharos. Ahora el turno de los Golpeadores. – Fue una prueba muy rápida puesto que sólo se presentaban 4 y dos de ellos no se mantenían en vuelo. – Muy bien, os informaré. Ahora los Guardianes. – También fueron rápidas las pruebas, aunque Louis parecía aburrido porque ninguno de los que se presentaron parecía que fueran a parar alguna vez la quaffle, hasta el último, Hugo, que paró los cinco tiros que le lanzó Louis y éste dio por finalizada la prueba de Guardián. – Perfecto, ahora los últimos, los Buscadores. – Louis miró a su hermana y le sonrió para darle ánimos. Lily se subió en su escoba y dio una patada en el suelo. Sólo había dos personas para el puesto de Buscador: Lily y Sunny Mabrey, hija de Katie Bell, quien se casó con un jugador de las Avispas de Wimbourne, John Mabrey.
- Muy bien, chicas, voy a soltar la Snitch. La primera que la atrape será la buscadora del equipo. Es la forma más rápida que se me ocurrió, se han alargado las pruebas más de lo que pensaba. Bien, a la de tres. Uno, Dos… ¡Tres! – Louis soltó la Snitch y empezó la acción. Lily y Sunny empezaron a volar y dar vueltas por el campo. La gente gritaba y animaba. Lily miró hacia la grada mientras buscaba la Snitch y vio a su hermano Zayn que la animaba y a su lado estaban Niall y Rose, que también gritaban. Los ojos de Niall y Lily se cruzaron y ambos sintieron algo extraño en esa mirada, como una corriente eléctrica que les recorrió el cuerpo. A Lily le animó ver a ese chico rubio mirándola y se centró en la búsqueda de la pequeña bola dorada. Al cabo de unos treinta segundos la vio. Estaba volando alrededor de los aros de gol del otro extremo del campo, más cerca de dónde estaba Sunny pero ella aún no la había visto. Lily decidió seguir volando en círculos hasta llegar a ese extremo sin que ella lo notara, y le salió bien. Llegó hasta dónde estaba la snitch y la atrapó sin que Sunny se diera cuenta. Las gradas prorrumpieron en gritos y aplausos y Lily descendió con la bola en alto. Al aterrizar notó cómo la abrazaban y al separarse se dio cuenta que era su hermano y capitán del equipo. Después llegó un chico corriendo y agarró a Lily por la cintura, la levantó del suelo y la volvió a posar en el suelo; puso sus manos en su cara y la atrajo hacia sí para besarla. Fue un beso muy dulce y un poco agresivo por el momento pero fue lo mejor de la prueba de quidditch: Lily había recibido su primer beso de Peter. Louis los vio y se quedó momentáneamente en shock pero reaccionó rápidamente, separó a los chicos y estuvo a punto de pegar a Peter, pero se contuvo a tiempo porque era el mejor cazador que se había presentado a la prueba.
- Bueno, olvidaremos esto y nos volveremos al castillo. ¡Vamos, todos fuera de mi vista! – Ya estaban saliendo del estadio y Lily se disponía a salir corriendo de allí pero… - ¡Todos menos tú, Lilian Luna Potter! – “¡Mierda!” Lily se paró en seco y cerró los ojos, dispuesta a aguantar los gritos de su hermano. Los abrió para ver cuantos quedaban en el campo y vio a Zaynque tiraba de Niall para salir de las gradas, pero éste estaba petrificado. A Rose no se la veía por ninguna parte, pero la imagen de Niall rojo de rabia y totalmente inmóvil aturdió a Lily “¿Se ha enfadado? Pero ¿por qué? ¿Por el beso? No puede ser. Yo no le gusto.”
- Lily… - James agarró por el codo a su hermana y le dio la vuelta para mirarla a los ojos. – Enhorabuena. Estás en el equipo.
- Gracias.
- Pero dime la verdad. ¿Estás con ese chico? ¿El tal Peter?
- Sí. Y espero que no le mates antes de elegir a los cazadores. Sabes tan bien como yo que ha sido el mejor.
- Sí, es cierto. Pero eres mi hermana pequeña. Tiene que molestarme que los chicos vayan detrás de ti. Es verdad que has cambiado mucho este verano pero es mi deber protegerte.
- Pues no lo hagas. Sé cuidarme sola. Y ahora todos sabrán que tengo novio y me dejarán en paz. Espero que tú también lo hagas.
- No sé. Supongo que sí, que lo haré, pero me va a costar. Ven aquí. – Louis agarró a su hermana y la abrazó como nunca. Lily le devolvió el abrazo.
- Me alegro de ser tu hermana, Lou.
- Y yo de ser tu hermano, Lils. Ahora, espero que hagas ganar a mi equipo porque sino…
- Sino, ¿qué? – Lily cruzó los brazos y miró a su hermano con los ojos entrecerrados, esperando una respuesta.
- Nada, nada. ¿Escribes tú a papá o lo hago yo?
- Jajaja, mira qué cambio de tema más sutil. Lo haré yo. Anda, vámonos. Este año vamos a pasar mucho tiempo juntos y no quiero hartarme de ti antes de empezar. – Se miraron y empezaron a reírse a carcajadas. Había empezado el curso bien. Lily estaba segura de ello.
